Velo del Destino

Diecisiete

Los días pasaban sin un cambio aparente, Baekhyun había empezado a sentirse más triste de lo usual y quería llorar a cada momento; pensaba que quizá era porque JoonGi se había vuelto algo pesado con el tema de irse juntos.

Suspira mientras junta sus piernas con sus brazos y deja caer su quijada sobre sus rodillas mirando la fuerte tormenta que se desataba frente a él. No había vuelto a ver a Chanyeol desde la última vez donde hicieron el amor y se sentía tan frágil como una gota al romperse en el suelo.

Sabía que pronto empezaría a nevar y definitivamente en ese momento desearía ser un oso para poder hibernar y no tener que ver aquel manto blanco… Sin embargo sabe que como cada ciclo, tendría que verla de nuevo y sentirse miserable.

Últimamente se la pasaba todo el durmiendo ya que se sentía cansado; suponía que era por el frío así que no le prestó mayor importancia y solamente siguió arropado. Sin embargo, en la tarde fue a buscar algo de leña ya que la que Chanyeol había cortado para él se terminó.

Mientras caminaba buscando ramas secas, su pie se doblo y cayó de rodillas, afortunadamente la nieve era gruesa así que no se lastimó; suspira y luego ve una mano frente a él así que levanta su mirada.

—Hola, Baek ¿Estás bien? —dice con la preocupación reflejada en sus ojos.

—Sí, gracias, —acepta la mano para luego levantarse. —Solo me mareé un poco, —ríe, —estoy algo torpe desde hace unos días, —suelta la mano con cuidado y levanta su cesta que había caído al suelo.

—Te ves un poco pálido, parece que vas a enfermarte, —coloca su mano sobre la frente del omega, —tienes fiebre.

—Seguro es por el clima, —en ese momento estornuda y ambos ríen en voz baja, —no es nada serio, me pondré bien en algunos días.

—Si tu lo dices, —mete sus manos dentro de sus bolsillos, —¿Qué hacías por aquí de todos modos? Hace mucho frío.

—Mi madera se terminó así que estoy tratando de conseguir algo, —se encoge de hombros.

—No creo que encuentres nada en el suelo, ven, —toma la muñeca de Baekhyun con suavidad para luego empezar a caminar por la nieve.

Baekhyun se había empezado a sentir cansado después de un tiempo ya que llevaban un buen rato caminando; sin embargo cuando quiso soltarse, Joongin apretó su agarre lo que le asustó un poco, pero no dijo nada y solo siguió caminando.

—Este lugar es muy oscuro, —susurra Baekhyun cuando entran a un minibosque de árboles muy frondosos que no dejaban entrar los rayos del sol, —¿Qué hacemos aquí? 

Joongi suelta su muñeca y luego sus ojos cambian a un color azul profundo que asustó a Baekhyun, pero se mantuvo en silencio. Sin embargo tuvo que gritar cuando el alfa rompió de un puñetazo un árbol que no era tan grande provocando que este caiga al suelo.

Después de un momento siguió golpeando el árbol hasta que lo hizo pedazos y luego los recogió en sus brazos, sus ojos volvieron a su color normal, además sonrío.

—Gracias, —dice Baekhyun más calmado, —eres muy amable.

—No es nada, lo que sea por ti, —luego de eso sintieron un viento frío golpear su ropa. —¿Has pensado en lo que te he dicho? —dijo después de un rato.

—Sí… Pero es que no lo sé, —baja la mirada recordando a su alfa.

—¿Es por él? —coloca su mano en su mejilla fría para levantar su cabeza.

—¿Qué? ¿Cómo? —sus ojos se mueven nerviosos.

—Todos en el pueblo hablan de eso, aunque es como un secreto ya que no lo dicen en voz alta, —se encoge de hombros y suspira.