Destino (Camilo Madrigal Y Tu)

La Llegada

Camilo pov

Un día más había comenzado, como siempre, los Madrigal habíamos empezado el día buscando las nuevas tareas con las que ayudaríamos. Desde hace 3 años las cosas habían cambiado muchísimo, Dolores y Mariano se habían casado hace unos meses e Isabela llevaba una relación de un año con Julián. Desde ese día yo había decidido dedicarme a otra cosa, sin embargo, jamás había encontrado para qué, así que seguí ayudando como antes.

Estaba saliendo de una casa cuando vi a un taxi llegar, era raro tener visitantes. Me acerqué con curiosidad y pude ver a un hombre y mujer jóvenes que seguramente eran hermanos carcajeando, dirigí mi mirada hacia el otro lado y entonces la vi, la chica más hermosa que había visto en mi vida, su piel morena, pelo ondulado y café abajo de los hombros, sus hermosos ojos verdes resaltando el color de su piel y su sonrisa, podría iluminar todo Colombia con esa sonrisa, esa sonrisa tenía más magia que toda la familia Madrigal junta, era la magia que mi vida necesitaba ¿Cómo lo sabía? Solo Dios sabe. Tomé la apariencia de mi prima Isabela y me acerqué.

-Disculpe ¿se les ofrece algo? - le dije temblando.

-Hola yo... ¿Sabe dónde esta este lugar? - me dijo sonriendo, mis piernas se sintieron como gelatina, tenía una hermosa voz.

-Es ese de allá, el de las puertas azules - le dijo señalando el lugar intentando ocultar mis nervios

-Okey, gracias, que tengas un lindo día - se fue con sus amigos y tomé mi forma normal, no pude evitar soltar un suspiro, esa chica era perfecta.

...

Había llegado la tarde y no podía sacarme su sonrisa, sus ojos y su voz de mi cabeza, toda mi familia se preguntaba el porqué de mi comportamiento tan extraño, no estaba siendo yo mismo. Y es que, no sabía ni su nombre.

-Camilo ¿Estas bien? - mi madre habló - te ves diferente.

-Estoy bien mamá, me iré a mi cuarto un rato y después saldré a caminar un poco.

-Esta bien hijo. Puedes hablar conmigo de lo que sea - dijo gritando la última parte. Seguí caminando hasta mi habitación pero mi hermana me detuvo.

-¿Cómo se llama?

-¿Qué? ¿Quien?

-La chica - casi me ahogo con mi propia saliva haciendo que mi cara se cambiara.

-Y... Yo... Y... - respiré y acomodé mis ojos que aun seguían desacomodados.

-Te vi tomar la apariencia de Isabela para ir a hablar con ella menudo cobarde - dijo burlándose.

-No sé como se llama - dije aceptando mi pequeña derrota.

-Se llama Rocío.

La miré con mis ojos muy abiertos - ¿Estas segura?

-Claro que sí, escuche como le decían desde que llegó. Es linda - me guiñó el ojo y se fue dejándome con una sonrisa en el rostro por milésima vez en el día.

En cuanto entré a mi habitación fui a un espejo y me convertí en ella, me acerqué aún más a él y comencé a tocar el rostro y contemplarlo, era completamente hermosa, volví a mi físico natural y vi mis chinos, jamás los peinaba, parecía una palmera, solté un suspiro y me dejé caer en la cama, ¿como podría acercarme a ese ángel sin ponerme tan nervioso?