Esta historia está ambientada tres años después de la película.
Tras la ruptura con su novio Rocío Mendoza decide irse de su país natal y mudarse a Colombia, para tener un pequeño respiro y poder disfrutar de sus vacaciones alejada del drama, sin e...
Me desperté pude ver que Camilo y yo seguíamos abrazados, habíamos dormido toda la noche así. Sus chinos caían sobre sí rostro y sus suaves ronquidos resonaban en mis oídos. Se veía tan hermoso. Debió sentir mi mirada pues comenzó a abrir los ojos.
-Buenos días - sonrió un poco.
-Buenos días - susurré.
-Que hora es? - tomé mi celular y vi la hora.
-Son las siete de la mañana.
-¿Y por qué estas despierta?
-Debo irme al hostal.
-Quédate.
-Sabes que no puedo, hoy si tengo trabajo.
-No importa quedate aquí conmigo - hizo un puchero y yo lo besé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Seguimos besándonos hasta que ya no teníamos aire. Sin lugar a dudas las últimas horas habían sido las mejores de mi vida.
-¿Entonces te quedaras?
-Quiero pero no puedo. Además tu familia no debe verme aquí.
-porque lo dices?
-Por dios Camilo, ¿que van a pensar?
-Que piensen lo que quieran.
Solté una pequeña risa -. A veces eres imposible Camilo.
-Y aun así me quieres - me quitó el pelo de la cara y me dio un pico.
-Aun así te quiero.
Inicio +18
Comenzó a besarme de nuevo y se puso encima de mi.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Siguió besándome y comenzó a bajar hacia mi cuello. Dejaba besos gentiles mientras bajaba hasta llegar al punto entre mi cuello y mi clavícula, beso más fuerte, uno que dejaría marca. Yo solté un pequeño gemido.
-Shhh podrían escucharte y entonces estaríamos en problemas - susurró en mi oído y dejo un beso en el lóbulo de mi oreja.
Podía sentir como mi ropa interior comenzaba a mojarse. Sus manos bajaron a mis muslos y comenzaron a subir lentamente.
-Camilo.... - suspiré.
-Mhm - dejó otro beso en mi cuello.
-Camilo... Debemos parar - sus manos pararon en seco y me miró.
-Estas segura? - su voz estaba muy ronca, Dios mio no quería que parara pero teníamos que esperar, aún no estaba lista.
-Esta bien - dejó un beso en mi frente y volvimos a abrazarnos bajo las cobijas.
-Gracias por entender.
-No haré nada hasta que tu lo quieras hermosa.
Sonreí y volví a quedarme dormida.
Fin +18
La puerta se abrió de dando un golpe en la pared y Camilo y yo nos despertamos. Lo primero que vimos fue a Mirabel con los ojos abiertos llenos de pena.
-Ah lo lamento, no era mi intención. Camilo ya son las ocho y media, levántate que la abuela no tarda en despertar.
-Gracias - dijo apenado - El ah y...
-No te preocupes, no diré nada - se fue.
-Dios mio que pena.
-Tranquila no dirá nada.
-pero... - un beso - Camilo - otro beso - es tu prima - otro beso - Camilo escucha porfavor.
-Esta bien.
-Tu familia es importante y aunque tu seas demasiado importante para mi ellos no lo saben, no quiero que piensen que solo me fijo en ti por tu apellido. Y estas escenas no ayudan.