𝐴𝑇𝑌𝑃𝐼𝐶𝐴𝐿 | taekook.

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Su lobo interno movió su colita encantado y a Jungkook le brillaron sus ojitos con millones de estrellas encerradas dentro de ellos. Momo y Sana sonrieron enternecidas ante la escena y Jimin y Sunye, chocaron sus palmas al ver las miraditas entre el castañito y el peligris.

Tae finalmente apartó sus orbes del chico a su lado poniendo atención a las indicaciones de los administradores del gimnasio, mordiendo sus labios con nerviosismo y Jungkook suspiró de forma cursi al sentir a su lobo tirarse con la pancita arriba y su colita agitándose de forma bastante rápida.

- Oh, por la luna, Jungkook ¿Te gusta Taehyung?¿Kim Taehyung?- Jungkook volteo a ver a la chica a su lado, creía haberla visto antes en su clase de ballet, sin embargo nunca habían hablado antes.

- ahm ¿Por qué preguntas?- la chica rió junto a sus dos amigas y miraron al chico con incredulidad.

- Es un idiota, ni siquiera parece un alfa de verdad y es la vergüenza de toda su familia, ni siquiera es tan atractivo- la chica posó su mano en su hombro, negando con un suspiro - Oh, pobre de ti, de seguro ni siquiera sabias quien era el, te acabamos de salvar de la mayor vergüenza de tu vida-.

- Irene ¿puedes callarte y seguir maquillando tu linda carita?- Jimin interrumpió el momento, conociendo bien las palabras venenosas que ese trío de chicas siempre susurraban a los oídos de otros, ya habían intentado hacerlo con el, solo que su objetivo de malas hablas no había sido el alfa si no que el mismísimo Jungkook.

Le habían dicho quien sabe cuantas mierdas falsas sobre los rumores de aquel chico y le advirtieron que seria una mala influencia para "un omega tan delicado como el".

Irene, Rosé y Suzy no eran más que un trío de omegas envidiosas que cuando detectaban a una amenaza como lo podría ser alguien más talentoso que ellas en el ballet o un omega más bonito trataban de deshacerse de el, volteando a todos en contra de ellos. Y bueno, Jimin ya era un bailarín mucho más avanzado que todos los de esa clase, mientras que Jungkook era el más veloz aprendiendo y siguiendo cada indicación al pie de la letra y sin ningún fallo.

- Chicos, vamos, tenemos que irnos ya- Momo se interpuso entre la competencia de miradas entre las tres chicas y Jungkook, Jimin y Sunye, quien había escuchado todo más sin embargo se había mantenido mas calmada.

Todos se levantaron, listos para irse a sus casas sin embargo Jungkook notó a Tae un poco mas cabizbajo que de costumbre, así que se adelanto mirando a Sunye para que no preguntaran y tomando la mano del alfa con rapidez para llevarlo al baño, mirándolo con seriedad al estar ambos a solas.

- ¿J-jungkook?- el alfa aun no alzaba su mirada asi que el castaño se inclinó, apoyando sus manos en sus rodillas y mirando a Taehyung desde abajo con ojos amables, liberando feromonas reconfortantes para el otro.

- ¿Sabes qué yo no pienso eso, cierto?- Tae desvió la mirada con una expresión insegura y Jungkook suspiro, tomando ambas mejillas y acercándose al rostro ajeno peligrosamente, haciendo que el otro lo volviera a mirar con las mejillas rojas y el corazón alborotado - Tae, para mí, eres el mejor alfa que ha podido existir, después de mi padre, claro-.

El chico rió leve, pudiéndose relajarse ante aquel bonito omega.

Jungkook se separó, sonriendo victorioso al lograr alegrar al alfa. Junto sus manos frente a el y se balanceó dudando si decir lo que quería o no. Sin embargo, Jungkook nunca se guardaba sus opiniones.

- y también...- miró al más alto frente a el acariciando un poco el brazo de este y mirándolo con ojos inocentes a través de sus pestañas - si me preguntaran, también eres muy, muy atractivo-.

Y con eso, el pequeño omega Jeon se fue con una sonrisita enorgullecida en su rostro, dejando atrás a un atolondrado alfa que sostuvo su pecho mientras se deslizaba hasta el suelo, sintiendo su corazón latir desenfrenado en su caja torácica.

Diosa luna, incluso si Jungkook le hubiera dicho que vivían en una realidad virtual y que en realidad eran un experimento del gobierno con ese gesto en su rostro y esa caricia en su cuerpo, el le habría creído.

Así que Tae se fue pensando sobre lo bonito que era Jungkook y entonces recordó lo que él y Jimin le habían dicho.

"Solo intenta interactuar con tu lobo a solas y en un ambiente controlado, se trata de confianza mutua".

Bien, fácil.

Pasó de sus padres y de la señorita que se encontraba limpiando la casa y finalmente se encerró en su cuarto, sentándose en su cama.

Bueno, ahora solo tendría que esperar a que se pasara el efecto de sus supresores, mientras tanto podía dormir un poco.

Así que Taehyung se recostó y se envolvió en sus sábanas cerrando sus ojos con algo de tensión.

Hace años que Tae no convivía sin supresores con su lobo, recientemente había dejado un poco de lado los inhibidores puesto que Jungkook le había dicho que le gustaba su aroma pero dejar de lado los supresores... Era algo grande.

Taehyung solo deseó que todo fuera bien y que nadie entrara al cuarto mientras su alfa estaba libre.

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Dedicado a:
Kmhpkjbts

¿Qué creen que pasará con el alfa de Tae?

En el sig cap las cositas se van a poner interesantes (guiño, guiño, codo, codo).

Ah, perdón por la tardanza mis padres me arrastraron hasta un pueblo con pobre recepción de internet por dos semanas y no pude actualizar.

Nos vemos en el sig cap, byebye~

- Ann.