Seré tu Media Noche © ️[EN PROCESO]

Capítulo 13. Rostro de cielo

Otra vez sucede, otra vez que las personas que más amo están en peligro, y esta vez ni cerca estoy para saber que pasa, no sé a qué me enfrento, o sí, a perder una de las pocas personas que realmente quiero. Toda mi cabeza es una neblina de emociones tristes, pero también tengo apoyo de mis amigos, Jess y Alan no se han separado de mí, Oliver también ha sido mi pañuelo de lágrimas, los hermanos Noêl se han sumado desde la última vez que los secuestradores llamaron, y como nos orientaron, no hemos involucrado a la policía.

Jane se va acercando con una expresión muy rara en su cara, está sudorosa y un tanto nerviosa, intenta hablar pero es como si las palabras no pudieran salir de su boca.

— Buenas noches —saluda

— Buenas —contestamos todos

— Andrea, me temo que soy portadora de malas noticias

— Sabes algo del secuestro?? Sabes dónde está mi tía?? —pregunto desesperada

— Quisiera, pero es algo relacionado con la empresa

— No tengo cabeza para eso, lo hablamos luego  —vuelvo a mostrar mi cara de decepción

— Tendrá que ser ahora —Paul interrumpe

— Paul que bueno que estás aquí, lo estoy  pasando mal, dónde estabas?

— Andrea, lo siento mucho, pero debes recoger tus cosas y marcharte de esta casa —afirma con un aire de superioridad y los ojos cargados de odio

— Cómo que me tengo que ir de mi casa, que estupidez estás diciendo Paul? —empiezo a ponerme nerviosa

— Eso mismo quería comentarte —interrumpe Jane

— Pero que están diciendo? —todos nos miramos sin entender que está pasando

— Este documento que dejó tú tía lo dice claramente, que si ella llegara a ausentarse, todas sus propiedades, así como las acciones de ANMASH y todas sus sucursales quedarían bajo el poder de Paul Tribault.

Siento que la sangre me hierve, y con esa misma intensidad me sube a la cara, no pienso, mi respiración se acelera y los latidos de mi corazón se vuelven más lentos, lo único que se me ocurre es irme encima de la persona que ha vivido bajo el mismo techo que yo y es un estúpido traidor.

— Eres un hijo de puta —me lanzo sobre él tirando los puños al aire rozando levemente su cara —Dónde está mi tía??, dónde la tienes?? Te voy a matar Paul —grito a más no poder

Oliver y Alan me detienen pero yo sigo pataleando y lanzando mis manos sin lograr nada. Los ojos se me cargan de lágrimas y el pecho lo siento apretado, no puedo entender por qué razón hace todo esto si desde pequeños fuimos muy buenos amigos, incluso creía que sentía algo por mí.

— Estoy esperando que salgan todos de mi casa — dice con una voz jactanciosa

— No tienes que repetirlo grandísimo idiota —responde Jess —el poder envicia a los mediocres de espíritu como tú —tranquila nena todo se va a resolver, vamos a recoger tus cosas

— Por qué haces esto Paul, cuál fue el daño tan grande que te hice? — cuestiono con lágrimas en los ojos

— Tú no, pero tu tía sí, recuerdo cuando era un niño como humillaba a mi madre, la ponía a trabajar durante horas sin descanso ninguno, expuesta a todo lo perjudicial y el tonto de mi padre no decía nada, porque siempre a tenido adoración para la gran señora Margaret Maverick, mi madre murió y él no tuvo la decencia de asistir a su funeral porque los asuntos de tú familia siempre a sido prioridad para él, sólo te estoy haciendo sentir un poco de lo que yo he sentido por todos estos años.

— Dónde tienes a mi tía Paul, ya tienes todo lo que querías

— Todo no, sólo espera y te devolveré a tu tía y a tú querido Antón

No puedo escucharlo más, no puedo respirar el mismo aire de la asquerosa persona que tengo delante, Jess y Allison me ayudan a recoger mis cosas y las de mi hermana, rápidamente salimos de ahí los chicos nos esperan abajo y nos vamos para el hotel ya que todas las casas que tenemos están bajo el poder de Paul. Los Noêl me ofrecen su casa del centro pero no me sentiría cómoda y mucho menos Ash que no se le da muy bien convivir con extraños, ya a preguntado varias veces por la tía y aunque Alan la distrae muy bien, no  se le olvida y yo ya no sé que excusa ponerle.

Recuesto mi cabeza en la cama y no puedo creer en lo que se ha convertido mi vida en sólo horas, quisiera cerrar los ojos y que todo lo que estuviera pasando fuera un sueño, quisiera despertar y ver ahí mi tía con esa estampa tan firme y segura que tiene siempre, su determinación,  su amor y cariño para hacer pasteles, sus regaños de la noche por llegar tarde, los besos y los abrazos que junto a Ash me despertaban, quisiera ver a Antón parado en una esquina de la cocina viendo como me robaba los pedazos de pastel, como traía en brazos a Ashley después de la escuela, la fidelidad que siempre le dedicó a mi tía y a mi familia completa. Quisiera decirle tantas cosas que nunca les dije, pasar ese tiempo juntos que aveces me negaba, quisiera quedarme dormida y que todo sea un mal sueño.

Logro dormir un poco pero una llamada de Jane me despierta, diciendo que mañana hay una reunión de accionistas que convocó Paul para presentarse como nuevo director de la empresa. Pero lamentablemente para él hay algo que no se imagina, cree que lo tiene todo ganado y no es así, mi tía Margaret siempre fue una mujer de negocios y muy inteligente, por si algún caso como este se pesentara. Salgo al balcón y veo un cielo completamente nublado, sin una estrella visible,  el cielo incluso está como mi vida nublado y sin ninguna claridad, miro hacia un lado y está Oliver en el balcón, expectante, simplemente observándome.

— Sabes que puedes contar conmigo para lo que sea —sus labios se iluminan con una sonrisa y en su rostro se refleja el cielo estrellado que me falta esta noche

— Lo sé —le devuelvo la sonrisa

Sólo con mirarlo se aquietan los demonios que llevo dentro, trae paz en medio de la guerra, es todo lo que necesitaba para enfrentar el día doloroso que me espera mañana.