Capítulo 8. Qué haces Oliver?

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Mi color favorito es el blanco, pero veo que he estado toda la vida equivocado, mi color favorito es el verde de los ojos de la chica que tengo frente a mí

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Mi color favorito es el blanco, pero veo que he estado toda la vida equivocado, mi color favorito es el verde de los ojos de la chica que tengo frente a mí. Es imposible apartar la mirada cuando fija esos hermosos ojos en los míos, su pelo rojo que parecen llamas, es donde mis manos quieren enredarse. Sus labios que cada que los ves te hacen un invitación a lanzarte sobre ellos.

No sé de dónde sacó que tengo novia, debe ser que confundió mis salidas con Jane y ahora cree que somos novios. Jane es una chica guapa e inteligente, nos conocimos el verano pasado en Londres cuando Owen me la presentó, desde el primer instante supe que él sentía más que amistad por aquella chica, y aunque podía habermela follado en esa ocasión, no lo hice, ya que ella desde ese día dió señales de que le gusto, y quitarle la posible novia a mi hermano no estaba en mis planes.

Ahora mi atención es de la chica fuego, la tengo así en mis brazos y sólo quiero besarla, esos labios que me incitan una y otra vez al pecado de volver a probarlos. Se escapa de mi agarre y puedo notar que está molesta en serio

— Suéltame, no me toques, no soportes mis cambios de humor, total tú y yo no somos nada y no tienes por que aguantarme, mucho menos yo a ti —grita enfurecida y veo como Jess y Alan se acercan

— Después no te quejes de las consecuencias chica fuego

— Ya tú lo dijiste, soy un fuego y tú no serás el que me apague

Cada vez que me reta es como si me invitara a irme sobre ella, quizá es lo que me gusta tanto, que no sea como otras que han pasado por mi vida, que siempre están para mi cuando yo quiero y ella es todo lo lo contrario

— Qué pasa chicos? —pregunta Jess extrañada

— Pregúntale al amigo que has traído —da media vuelta y se va, quiero seguirla pero Jess me detiene agarrando mi brazo

— Qué coño pasa Oliver, que le hiciste para qué esté así de cabreada?

— No es asunto tuyo  —me suelto de su agarre

— Todo lo que tenga que ver con Andrea Maverick tiene que ver conmigo y si ella no puede solucionarlo, lo soluciono yo, así que me dices ya que carajos pasó

— Ya te dije que no es asunto tuyo —No puedo explicar lo que pasa porque ni yo mismo sé que está sucediendo

— Te voy a explicar algo de Andrea que quizá no sepas. Ella no es una chica común.

«Ya eso lo sé muy bien»

— No es como tus ligues de una noche que has tenido en Londres —continúa —no sé que pasa entre ustedes, pero ella no es de las chicas que alimentará tú ego diciendo que sin ti no va a sobrevivir, si quieres a alguien que te ruegue, ella no es la correcta, no llorará por ti, tampoco te va esperar, no sé morirá de tristeza si no estás, si quieres a una chica que te necesite para todo, esa no es ella, porque si al final necesitas a una chica para sentirte superior, ella no es la correcta, así que lo que sea que esté ideando tú mente, puedes eliminarlo —termina haciendo un gesto y marchándose detrás de su prima

Me voy también enojado porque no entiendo la situación, me siento frente al mar y mirar la inmensidad me hace reflexionar, la brisa que toca levemente el borde de mis pestañas aclara los pensamientos que a desordenado esta chica. Que pasó para que tomara esa actitud? Me sigo preguntando una y otra vez, aunque puedo imaginarlo y sea lo que fuese por qué le molesta tanto?  Y por qué coño me cabreo conmigo mismo?  Mi cabeza quiere estallar y no deja de preguntar tantos por qué.

La espesa oscuridad se hace presente y estamos de regreso en la ciudad, todo el transcurso de la isla hacia la ciudad a sido en total silencio y no puedo evitar sentirme frustrado por no saber que le está pasando a esta chica.

Vamos directo a su casa, Alan y Jess se despiden de ella, yo solo observo desde lejos. Llegamos al hotel y mi mejor amigo me sigue hasta mi habitacion, cerrando la puerta tras de mí.

— Ahora si me vas a decir que esta pasando  —reclama con total seriedad

— Esa chica me está gustando mucho Alan,  a la misma vez que me va a volver loco —estallo —hasta ahora todo estaba fluyendo bien, no entiendo que está pasando, te acuerdas lo que te conté lo que pasó un día antes de tu compromiso, esa noche fue increíble, de esas noches que no se olvidan fácilmente, creí que teníamos intimidad y no sólo por el sexo lo digo también por lo que pasó en el campamento, en las aguas, la vi tan frágil que pensé que teníamos una conexión más allá.

— Oliver eso no es intimidad, el solo coger no significa intimidad, llevarse bien en la cama, no significa encajar en tu caos, saber de sus tragedias no significa conocer el centro de su alma  —pone la mano en mi hombro y continúa

La intimidad significa que la persona te conoce desde todos los ángulos digo lo triste, lo feliz, lo indiferente. Es aquella persona que te ve en plenitud en cualquier circunstancia y no solamente cuando quiere saciar el deseo. Intimidad es saber cuándo vas a llorar y abrazar tratando de aliviar tu o su aflicción. Es darte cuenta de que necesitas un cariño mientras el mundo te está jodiendo —argumenta —no creo que Andrea y tú estén en ese punto, se conocen hace días, puedes que tenga una conexión especial con ella, pero espera a saber que siente ella también

— Ok ya me dejaste más confundido de lo que ya estaba, no te estoy diciendo que este profundamente enamorado de ella, pero es fuerte la conexión y ahora no entiendo el por qué de su reacción en la isla.

— Las mujeres son así bro, se enojan hasta porque no respiras igual que ellas, están todas como una puta cabra —reímos a la vez —ni caso ya mañana se le pasará

Mañana? Yo no puedo esperar a mañana

Después de un rato de reflexión y consejos Alan se va a su habitación y acostado mirando al techo me vienen a la mente varias teorías, aunque ya logro adivinar lo que pudo haber pasado.

Resuelto a no quedarme con todas las dudas que hay en mi cabeza, ya que no soy ese tipo de persona que alberga sentimientos y pensamientos para sí mismo porque más tarde o mas temprano salen en forma de frustraciones e iras y definitivamente no soy de esas personas.

Salgo y voy directamente hacia la galería, sé que allí la voy a encontrar. Llego y para mi decepción no está, pero no me doy por vencido, voy camino a su casa, después de varios intentos de llamarla y varios mensajes, mo obtengo respuests, pero quiero explicaciones y la única forma de obtenerlas es subiendo por las escaleras de incendio que me llevará hasta la mismísima terraza que da a su cuarto.

Qué haces Oliver?  Un rompecorazones como tú, escalando unas escaleras para ver a una chica y pedir explicaciones?

«Hasta yo me sorprendo de lo que estoy haciendo»

Está sumergida en su laptop, una música agradable resuena en toda la habitación, me quedó algunos minutos observando a la chica que últimamente acelera mi pulso y pone a cosquillear el estómago, está comiendo un pedazo de pastel y su lengua recorriendo cada centímetro de su boca desequilibra todas las ideas que traigo, se ve tan jodidamente sexy en ese pijama que sólo pienso en arrancarlo y recordar los momentos que creamos en la cabaña y por un momento no tengo claro a lo que vine, coloca el platillo en la mesita de noche, está inmersa observando algo y al voltear me ve y no pude evitar sorprenderse

— Te dije que habría consecuencia chica fuego

Seré tu Media Noche ©  ️[EN PROCESO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora