Anatomía [Chris Evans]

Descubierta

Alex suspiraba por Thompson era demasiado obvio y es que los ojos azules del hombre lograban atraparla llevándola a la misma perdición.

—Si sigues así te va a entrar una mosca en la boca— Comentó Sarah quién estaba a su lado —Deja de babear y por lo menos disimula— Agregó la afroamericana.

—Sarah— La reprendió por lo bajo a lo cual la nombrada solo se encogió de hombros y soltó una risita por lo bajo.

—Señorita Smith, podría retomar la lectura.

La repentina orden y voz del profesor Thompson la hizo entrar en pánico más que nada a Sarah quién miró su libro que ni siquiera estaba en la página correcta. Un silencio durante unos segundos que fue todo lo que necesito el hombre.

—Pagina 118 señorita Smith, por favor concéntrese— Dijo el hombre a lo que la chica sólo asintió y busco la página.

Por la mente de Sarah fue inevitable no pensar que si se hubiera tratado del profesor Warren ya la hubiera mandado derecho a detención.

Una vez que la clase terminó Sarah salió y espero a Alex quién como de costumbre era la última en salir de esa clase solo para ver a su amado profesor Thompson.

—Profesor— Llamó tímidamente la rubia  al hombre.

El profesor Thompson dejo su tarea de acomodar sus libros y material para su siguiente clase y miro a Alex quién era una alumna ejemplar de su clase.

—¿Si señorita Taylor?— Preguntó el siempre amable hombre.

—Termine de leer el libro que me recomendó fue realmente bueno— Comentó la rubia con una gran sonrisa imposible de ocultar.

—¿De verdad?, es realmente largo, ¿lo terminaste en una semana?— Preguntó genuinamente sorprendido el hombre.

—Si, no paraba de leerlo en mis ratos libres es realmente bueno.

—Me alegra que te haya gustado, es de mis favoritos, por lo general a los jóvenes de tu edad no les gusta leer y mucho menos algo tan complejo y largo— Comentó el hombre.

—Pues soy diferente— En su comentario había un doble significado muy sutil.

—Lo se y es bueno Alex sé que lograrás grandes cosas— Y como siempre el parecía no darse cuenta.

—Si...

Justo cuando iba a decir otra cosa la oportuna Sarah apareció.

—Alex llegaremos tarde.

—Voy— Dijo de mala gana —Nos vemos mañana profesor Thompson— Sonrió dulce y amablemente la rubia antes de salir del aula.

—Nos vemos señorita Taylor— Se despidió el siempre tan cordial hombre.

Fallon suspiró con resignación evidente delante de la puerta de su casa antes de sacar sus llaves y abrir la puerta había visto el auto del profesor Warren en la entrada. Cuando entró miro a su madre y al hombre conversar amenamente mientras comían, últimamente se le estaba haciendo costumbre al hombre estar ahí casi todos los días.