La puerta de la casa fue golpeada un par de veces, Gun terminó de colocar el gorrito con orejas de oso en la cabeza de su hijo, y se quedó quieto esperando que esta vuelva a ser tocada. Cargó a su cachorro en sus brazos protegiendo su cabeza con su mano, bajó las escalera y caminó con cierto temor hasta la puerta. Pero su cuerpo se relajó rápidamente al oler el aroma de Omega. Abrió la puerta encontrándose con un Omega de cabello negro ligeramente largo, una bonita sonrisa y ojos brillantes. Ya se hacía la idea de quien era.
Su madre le propuso la idea de encontrar una o un Omega que cuidara de Chimon ya que ella debía viajar a Phuket por un periodo de tiempo largo, su abuelo había enfermado y su madre necesitaba ir a cuidarlo.
—Hola. Mi nombre es New.
Gun sonrió enternecido por el tono de voz del Omega, su hijo estaba escondido en la curvatura de su cuello, pero aun así miraba curioso a New.
—Hola, New. Me llamo Gun, ¿Vienes por el puesto de niñero?
—Sí, Sunmi me dio la dirección.
—Adelante.
Gun aprendió que New era un Omega de veinte años, estudiante nocturno de la Universidad, vivía con su padre en un pequeño departamento en el centro de Bangkok y necesitaba el trabajo porque quería ayudar en los gastos de la casa. New llegaría en las mañanas antes de que el Omega tuviera que ir a la Universidad, y se iría en la tarde, unas horas antes de entrar a clases. Naturalmente Chimon se sintió cómodo con la nueva presencia en casa, y es que el Omega tenía un ligero olor canela y algodón de azúcar, con paciencia Gun enseñó a New los hábitos de su cachorro, elogió la manera rápida del niñero en aprender las cosas, a lo que el Omega respondió que llevaba varios años cuidando a cachorros por fines de semana y que este sería el trabajo más largo que tendría.
—Desde mañana debes venir antes de las siete y media de la mañana. Mamá se ha ido ayer, por lo que estarás completamente solo con mi hijo —New asintió con emoción. —A veces suele venir un Alfa de cabello azul, se llama Tay y es mi mejor amigo, no hay problemas en que entre a casa. Si quieres puedes acompañarme al super mercado a hacer las compras para la semana.
Ambos Omegas y el pequeño Alfa subieron al auto de la madre de Gun. Tomaron un total de dos horas en realizar todas las compras, Gun se sentía incómodo debido al lazo, y se estaba cansando del carácter asqueroso que su Omega había tenido durante una semana. Durante la semana una vez más había pasado lo de la conexión entre su hijo y su padre. Esta vez incluso el llanto luego de que se cortara fue más intenso, más doloroso, Gun se tiraba de los cabellos frustrado sin saber qué hacer para consolar el frágil corazón de su cachorro dolido.
—Sé que es imprudente de mi parte... —New jugueteó con sus dedos.
—No, está bien. Puedes preguntarme.
—¿El padre de Chimon vendrá alguna vez a verlo? Es para estar preparado.
Gun suspiró acariciando los cabellos de su bebé que acabó dormido en su pecho mientras este estaba recostado en el sofá. Besó la pequeña porción de piel de su mejilla que estaba libre ya que Chimon tenía su rostro escondido en el cuello de Gun.
—Para serte muy sincero... no lo sé. Pero supongo que debo enseñártelo —el Omega castaño se levantó con cuidado de no levantar a su hijo y se encaminó a las escaleras que llevaban a las habitaciones. —Vamos arriba.
Una vez en la habitación Gun recostó al pequeño cachorro en la cama, arropándolo con las sábanas que tenían impregnado su aroma. Vio a New quedarse en un rincón, fue directamente a un cajón pequeño de su cómoda, sacó un álbum, revisó entre las páginas hasta dar con una foto de Off sonriendo. La sacó con cuidado, y se la tendió al menor.
—Wow —New sonreía sorprendido. —Chimon...
—Sí, es la copia de su padre, ya lo sé. —el pecho de Gun hormigueó en gusto, se sentó en la orilla de la cama viendo a New revisar la foto. —Se llama Off, si... si él llega a venir cuando no estoy debes llamarme, por favor.
—¿Debo dejar que vea a Chimon?
Un suspiro salió de los labios del Omega castaño, no podía no dejar que Off vea a su hijo si los encontraba, y aun si le prohibiera la entrada sabía que el Alfa vería de cualquier modo a su cachorro.
—Sí, pero debes avisarme, ¿Entendido?
—Entendido, capitán.
New se marchó luego de la cena que el Omega preparó dejándolo solo nuevamente. Gun se acostó en su cama con pijama y acurrucó a su pequeño en sus costillas mientras leía en su celular lo que debía exponer el día siguiente en la Universidad. Ni siquiera tenía ganas de ir, pero la nota era importante, y terminar su carrera también, por lo que se regañó para ponerle más empeño.
—Dadada.
Las manitos de Chimon intentaban llegar al rostro de Gun, acción que enterneció al Omega dejando de lado su celular para prestarle toda su atención a su hijo. Besó sus dedos haciendo que una dulce risa brote de los labios del pequeño.
—¿Qué desea el cachorro más hermoso? ¿No dejarás que papi estudie? —hizo cosquillas levemente en su barriguita haciendo que Chimon cierre los ojos de la misma forma que él cuando reía. —Mañana serás un buen mini Alfa y te quedarás con New hasta que papi regrese.
Su madre le había dicho que New era un Omega en quien podía confiar para cuidar al pequeño Chimon, ya que la Omega se aseguró de investigar a fondo al niñero. Así que Gun estaba un poco tranquilo de saber que su hijo quedaría en buenas manos mientras él no estaba.
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La mañana siguiente New llegó a las siete de la mañana. A Gun le costó mucho despedirse de su hijo, esa mañana en especial, Chimon se había despertado tan sensible a su padre, que se negaba a dejarlo si quiera levantar de la cama. En el camino secó las lágrimas que caían por sus regordetas mejillas.
Gun siempre tuvo buenas calificaciones, en la escuela, en la secundaria y ahora en la Universidad, por lo que no le sorprendió haber sacado diez en la exposición de la cual no estudió completamente gracias a su inquieto cachorro que quería mimos. Lo que realmente hizo preocupar a Gun fue la llamada que recibió de New a las once de la mañana, faltando una hora para terminar sus clases.
—Gun. El... el padre de Chimon está aquí.
Maldición.
¿Tay era un jodido adivino? ¿O qué?
—Estoy yendo.
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•Explicación.
La conexión entre un Alfa y su cachorro consiste en que sus lobos internos se conectan por decirlo "espiritualmente". Es algo que ayuda mucho en el fortalecimiento y crecimiento del cachorro. Lo que se ve externamente es que los colores de ojos de ambos cambian según su lobo, en este caso Off y Chimon comparten el color gris en sus iris y su olor se intensifica. No importa la distancia, un Alfa siempre podrá conectarse con su cría, y su cría con él, a menos que uno de sus lobos no quiera tal acción, entonces la conexión no se establecerá.
Tanto el Alfa como la cría pueden ver a través de sus ojos. Sí, Off pudo ver a Gun. El verdadero problema para ambos es la distancia. Luego de la conexión Alfa y cachorro adoptan sensibilidad en sus lobos, lo que hace que deseen estar juntos y consolarse físicamente. Por eso es que a Chimon le duele tanto luego que la conexión se rompe y Gun no puede hacer nada para consolarlo, y seguramente Off también sufre luego de eso.
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I still want you // OFFGUN💚
FanfictionLuego de un año su Alfa despierta del coma, Gun se prepara para que este lo encuentre a él y a su cachorro. ➥ Está historia es solo una adaptación todos los derechos son para la autora @kookminssi_ ➥ Si no te gustan este tipo de historias no la lea...