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Narra ______ (g!p)
Me encontraba comiendo en un restaurante con los hermanos Hadid, Kendall y la novia de Anwar, Dua. No sé en que momento ellos dos comenzaron a salir, y peor aún no sé en que momento me enamoré de esa mujer tan hermosa. Bueno, en realidad si lo sé, ya que yo la conocí antes, pero al ser tímida Anwar se me adelantó y comenzó a alejarla de mi. Le doy muchas vueltas a todo este tema, pero solo llego a la conclusión que si Dua es feliz no debo hacer nada para cambiarlo.
Cuando terminamos de comer tenía antojo de un postre, así que le indiqué a la mesera que se acercara.
–¿Podría traerme un pay de chocolate, por favor?–le pedí a la linda castaña que nos estaba atendiendo–¿Alguien quiere algo más?
–Si, yo quiero, que sean dos–pidió Kendall, la mesera asintió anotando el pedido
–Yo también quiero uno, que sean tres–dijo Dua sonriendo, ella estaba sentada a mi lado y se veía demasiado linda
–No, ya comiste mucho hoy, cancele su orden, solo serían dos–interrumpió Anwar la petición de Dua.
La mesera asintió retirándose del lugar, vi a Dua encogerse en su lugar con una mueca y jugar con sus manos en su regazo.
Apreté la mandíbula desviando la mirada para que nadie pudiera ver mi mala cara. Acomodé mi traje golpeando los dedos en la mesa a un ritmo sin sentido.
–Y...______–habló Bella para interrumpir el incómodo momento–Escuché que te vieron saliendo mucho con Anastasia, la amiga de Kylie ¿Ella y tu tienen algo?
–No, solo somos amigas–respondí
–¿Enserio? Que lástima, creo que harían linda pareja–comentó Kendall con un tierno puchero
–La verdad por el momento no quiero salir oficialmente con nadie. Me concentro en mi trabajo–dije mirando la hora en mi reloj de muñeca
–Con razón tienes más dinero que todas las hermanas Kardashian juntas–bromeó Gigi riendo, reí con ella y la mesera llegó con los pedidos
–Aquí tienen señoritas, si necesitan algo más con gusto los atenderé–dijo sonriendo amablemente. Agradecí y ella se fue
–Pero, al parecer chicas nunca te hacen faltan–dijo Kendall tomando la servilleta en mi plato y mostrando un número escrito, era el número de la linda mesera
Rodé los ojos con una pequeña sonrisa y tomé la cuchara. Noté que Dua se mantenía en silencio y es algo que realmente me dolía, verla así de decaída me provocaba un malestar en el estómago.
Anwar estaba distraído en su teléfono y puse mi mano en el muslo de Dua para llamar su atención, ella volteó a mirarme y yo levanté la cuchara para darle un pedazo de pay. Negó con la cabeza, pero insistí acercándole más el pay, Dua por fin cedió sonriendo y abriendo un poco la boca aceptando la comida. Sonreí guiñando un ojo a lo que ella se ruborizó un poco.
