SILENCE [FINALIZADO]

12

Tu:

-Taehyung, la siguiente semana tenemos la exposición, y aún no
hemos terminado el proyecto

-¿Qué hacemos?

10:34 ✅✅

Taetae 🙂:

-¿Qué te parece si vienes mañana?

-Pero, primero tengo que avisarle
a mi padre

10:56 ✅✅

Tu:

-Okay 👌

-Me vas avisando entonces.

-Adiós 👋

10:56 ✅✅

Una sonrisa se formó en el rostro del mayor una vez vio que Taehyung le había respondido. Fue algo inconsciente, pero no tan raro. El solía ser así, o eso creía.

No dudó en nuevamente abrir el chat con el menor y releyó los mensajes.

-Taehyung es increíblemente tierno- rió pataleando levemente sobre su cama. -O sea, un buen amigo- recalcó hablándose a sí mismo, RECALCANDO.

-¿Qué balbuceas, Hoseok? Me empiezas a asustar- Yoongi entró a la habitación pasando por al lado del menor y se sentó en la silla que estaba al lado de su escritorio.

Hoseok se incorporó instantáneamente y se encogió de brazos.

-Hyung, no pensé que vendrías tan rápido- comentó

-Ya ves que si. Y ¿bien? ¿De qué tanto murmurabas?

-¿Yo? De nada

-Ya, claro. Si te he visto peor que una persona enamorada, pataleando y hablando solo.

-No te inventes hyung, que solo estaba cantando.

-Ya, mientes fatal amigo, ni lo intentes.

-¡Está bien! Hablaba sobre mi compañero de trabajo.

-¿Taeyongu?

-Taehyung.

-Lo que sea, ¿qué hablabas de él?

-Nada interesante, le estaba preguntando que cuando haríamos el proyecto, que es la siguiente semana.

-¿Y? ¿Por eso pataleabas como enamorado?

-¿Qué tiene de malo? Y no pataleaba como enamorado, solo...fue inconsciente

-Te creeré por el momento, ¿bien?

-Hyung~, no me digas eso~- berrincheó corriendo hacia este.

-¡Hoseok~!- exclamó en "repugnancia" cuando éste quiso abrazarlo.

Llevaba ya 5 minutos meditando cuándo ir a preguntarle a su padre si Hoseok podía ir mañana a hacer el trabajo, pero no encontraba ocasión. Su padre ya le había dicho que no quería verlo, y eso era lo que le retenía a preguntarle.

Bajó las pocas escaleras que le faltaban y respiró profundamente para después interrumpir el descanso del adulto, quien miraba tranquilamente la televisión.

-Pa...tengo que decirte algo- susurró nervioso jugando con sus manos.

Este desvió la mirada del aparato tecnológico y la puso en silencio, tomándole total atención a su hijo.

-¿Qué quieres, Kim?

-Eh b-bueno...espero que esto no te moleste pa...pero, el profesor no me dejó que hiciera el trabajo solo. Por lo que...tengo que hacerlo si o si con Jung.

Solo vio su gran figura levantarse del sofá abruptamente y se encogió instintivamente.

-Te dije que me importaba una mierda si no te dejaba, que solo quería que aprobaras la evaluación y que no lo hicieras con el.

-Pe-pero pa, puedo suspender la evaluación por no hacerlo junto a él.

-¡Que me da igual! Agradece que al menos te dejo asistir a esas clases de mierda.  Así que lo menos que puedes hacer ahora es obedecer a mis condiciones.

Lágrimas empezaron a inundar los ojos del menor.

Nuevamente el miedo se apoderó de su cuerpo.

-Lo agradezco pa, pero tengo que hacerlo con el...

El señor Kim agarró las mejillas del menor y sobrepuso algo de fuerza, lastimando levemente a Tae.

-No vuelvas a decirme eso, cállate de una vez. No vendrá y punto.

Tragó saliva.

-No puedo hacerlo sin el, puedo perder la evaluación- repitió. Por más de que quisiera callarse, su padre tenía que entender qué és lo que podía pasar.

Pero, muy mala decisión cuando de repente su padre lo agarró de sus cabellos y jaló de estos.

-¡Te he dicho que no!- gritó, había llegado al extremo de su paciencia.

Y Taehyung sabía que significaba eso, otra vez.

-¡Padre!- exclamó empujándolo y al darse cuenta de lo que había hecho huyó escaleras arriba. -¡E-espera, no era mi intención!

-¡Maldito hijo de puta!

Cuando estuvo a punto de cerrar la puerta alguien se abalanzó sobre esta para que no pudiera hacerlo y se acurrucó en una esquina de la habitación.

-Sabía que tendría que haberme desecho de ti hace ya tiempo, maldito bastardo.- escupió levantando el mentón del joven y no duró más de 10 segundos hasta que empezó a golpearlo brutalmente. -¡Sabía que tendría que haberte llevado con esa vieja hace años. Bajo la puta tierra! ¡Solo haces que me enfade! ¡MUÉRETE DE UNA VEZ! ¡NADIE TE ESCUCHA, KIM. LLORIQUEA Y GRITA TODO LO QUE QUIERAS!

Súplicas desgarradoras, gritos y los continuos golpes brutales era lo único que se escuchaba en aquella casa.

Un joven chico siendo golpeado por su propio padre.