Hate you, but, I love you. ❪ RanLey ❫ ©

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ㅤㅤㅤㅤㅤ𝗥𝗘𝗧𝗢 𝗗𝗘 𝗡𝗔𝗛𝗢𝗬𝗔. 𝗗𝗜𝗔 5 𝗬 6

Pasajeros con destino a New York, favor de abordar por la puerta 5. Pasajeros con destino a New York, favor de abordar por la puerta 5.

Eran las palabras que sonaban a través de las bocinas alrededor del aeropuerto. El gemelo había tomado ya su maleta de mano a la par del Haitani quienes se encaminaban a la puerta antes mencionada.

─ Sigo sin entender cómo demonios conseguiste un pasaporte para mi tan pronto. ─ Exclamó Nahoya.

─ No lo sepas y mejor sigue caminando. ─ Respondió con calma Ran, mientras se formaban en la fila para ingresar al avión.

Una vez dentro buscaron los asientos correspondientes tomando asiento en los mismos; Nahoya escogió el lado de la ventana y Ran el lado del pasillo. Si fuera por Ran hubiera alquilado el avión entero pero sabía que Nahoya se negaría a eso por lo que se tuvo que conformar con comprar boletos en primera clase. Nahoya miraba a través del cristal; nunca había subido a un avión antes así que la experiencia le emocionaba mucho y por parte de Ran contestaba a algunos mensajes que tenía pendientes.

─ ¿Estás emocionado? ─ Preguntó el mayor al gemelo, mientras este con sonrisa asentía.

─ No todos los días uno sube a un avión, además ya te dije que nunca había estado en uno. ─ Replicó el gemelo mientras Ran mostraba media sonrisa.

─ Apuesto a que te emocionarás más una vez estemos en las alturas. ─ Agregó, y el gemelo de hombros se encogió.

Algunos minutos más tarde fue que se dió inicio a las instrucciones de despeje y, en cuanto el avión despegó, Nahoya miraba con entusiasmo las nubes pasar así como aprovechaba para tomar fotos en todo momento.

En el transcurso del día se mantuvieron entretenidos con las pantallas al frente suyo así como también tuvieron un almuerzo bastante decente; nada de qué sorprenderse al estar en primera clase. Tan pronto anocheció las azafatas les dieron cobijas y almohadas las cuáles acomodaron en sus lugares e inclinaron sus asientos para dormir mejor.

─ Será mejor que duermas pronto, llegaremos en varias horas más. ─ Mencionó el Haitani, mientras Nahoya se cubría con la cobija.

─ No puedo hacerlo si me estás viendo, voltéate. ─Recriminó, a lo que Ran rodando los ojos hizo caso, dándole la espalda a este.

Ambos durmieron gran parte del trayecto, para cuando despertaron solo les faltaba una hora antes de aterrizar, por lo que acomodaron sus cosas y se alistaron mejor. Aterrizaron en el aeropuerto de New York, Nahoya estaba que moría de nervios, sobre todo porque a duras penas conocía el lenguaje, al menos lo básico que había aprendido en la escuela.

─ Tranquilo, yo me encargo de todo. ─ Replicaba el Haitani mientras caminaban al apartado en donde recoger sus maletas. Miraban como la banda daba la vuelta y varias maletas desfilaban frente a ellos, hasta que lograron dar con estas. Ran tomó ambas cargando sin queja alguna ambas.

─ Puedo cargar la mía. ─ Recriminó Nahoya mientras Ran volteaba a darle un guiño. ─ Yo también, vamos. ─

Nahoya soltó un suspiro, en tanto el Haitani caminaba con dirección a la central de automóviles del aeropuerto donde rentó uno por los dos días que estarían ahí. Subió las maletas con calma a la cajuela mientras Nahoya miraba su alrededor, y enseguida se subía al lugar del copiloto. Ran subió del lado del conductor y arrancó el auto por la calles de New York. Era de noche, y a pesar de eso se sabe que la ciudad es de esas en donde nunca se duerme así que todavía se notaba la presencia de varias personas por las calles y Nahoya miraba sorprendido todo lo construido; sin duda era como un Tokyo pero con mayor vida.