MEAN WHILE

Vivieron felicidades para siempre

Al ponerme el traje me veo al espejo y los ojos azules me ven felices, están encantados de estar donde el final de todos los desafortunados eventos ha llegado, creo que yo igual.

El aire entra por la ventana y el aroma a mar entra a la habitación, al ver afuera solo veo a todos los invitados llegar y me siento nervioso, pero no debería porque estarlo, estoy totalmente seguro de lo que voy a hacer.

—Hola hermano —dice Niccolo entrando a la habitación y sonriendo, lleva puesto un traje negro.—Te sienta el azul.

—¿No crees que es demasiado?

—Creo que es perfecto, necesitas tal vez un trago antes de comenzar.

—Eso seria de ayuda, gracias —le digo aceptando el vaso que me pasa.

—Tu madre esta emocionada y muy nerviosa —dice mi amigo sentándose en la cama. —Aunque está maravillada con Amy, al parecer todo el mundo la adora.

—Es difícil no hacerlo.

—Ya, creo que la ceremonia está por comenzar, te dejo y espero no te arrepientas —dice Niccolo sonriendo y sale de la habitación.

Respiro profundo muchas veces y me vuelvo a acomodar el traje, es azul claro y me gusta pensar que hará juego con Amy. Ahora mismo, a unos minutos de casarnos, veo mi vida en retrospectiva y me doy cuenta que jamás podría hacer esto con nadie más, ni Gianna ni Nicoletta,  nadie es suficiente, ninguna lo fue, solo mi bella Sting.

Inevitablemente pienso en mi padre y me doy cuenta que su muerte si trajo algo bueno, no solo amargura y tristeza, supe superar mis errores, porque aunque sé que amar a Amy es el sentimiento más puro jamás, enamorarme fue un error, pero ha sido el mejor que he cometido.

No importa como surgió, porque ni siquiera yo soy consiste de ello, simplemente paso y no hay manera alguna de cambiarlo, por lo que camino con seguridad al altar y espero por mi vida entera, por mi nueva vida llena de amor y de Amy.