Capitulo 21♥

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-Estate quieta -Me dijo Dani poniéndose en medio mía, para no dejarme coger las maletas

-Dani, deja que coja mi maleta.

-No -Rió

-El taxista está esperando a que saquemos las maletas, y tiene que estar hasta las narices, Dani

-Si te estuvieras quieta, quizás tardaríamos menos -Se volvió un poco, mirándome y riendo.

Me crucé de brazos y lo miré.

-Ya estás tardando en sacar las maletas.

-No me digas ahora que me estás metiendo prisa -Se dio la vuelta, dejando su maleta en el suelo, me miró e imitó mis gestos, se cruzó de brazos y puso una cara seria.

-Oye, tengo un poco de prisa, ¿queréis sacar las maletas ya? -Dijo el taxista

-¡Sí, ya va! -Dijo Dani, sacando rápido las maletas. Fue y pagó al taxista, yo cogí mi maleta, y esperé a Dani en la sombra de un árbol. Dani cogió su maleta, y una pequeña mochila. Me miró de arriba a abajo, y se fijó en la maleta.

-Chica mala -Me dijo

-Bueno, y ahora ¿qué? ¿otro taxi?-Dije

-No, vamos en el de san Fernando.

-¿San Fernando?

-Un ratito a pie, y otro andando -Dani me sacó la lengua y me dio un beso corto, y empezó a andar.- Es por allí -Dijo señalando a la derecha, había una cuesta enorme. Yo me quedé plantada, sonriendo como una tonta.

-Todo eso -Dije con pesadez y vi que él asintió.

-No es tanto, ya verás. -Suspiré- Anda, venga, poquito a poco. -Dijo haciéndome un gesto con la mano para que le siguiera.

Al final, él tenia razón. No fue tanto, tardamos media hora más o menos en llegar hasta arriba del todo.

-¿Y ahora?

-¿Ves aquello de allí? ¿Aquella casita, blanca? -Dijo Dani poniéndose a mi lado, y señalando al frente. Era un grupo de casas, parecían casas viejas, pero rústicas. Algo raro.

-Sí, creo que sé cuál dices.

-Pues está cerquita, ¿no?

Asentí. Una vez que llegamos a la casa, Dani soltó las maletas y abrió la puerta.

-Las señoritas primero -Dijo haciendo un gesto con la mano. Sonreí y pasé con mi maleta en la mano. Madre qué casa. Era el recibidor, en medio una mesa de cristal, con unas cuantas macetas, llenas de flores, de colores, preciosas. Al fondo una puerta, amplia que llevaba al jardín, me asomé y el suelo era de piedra, había una fuente pequeña, en el centro del jardín, pero elegante. Me giré y vi a Dani subir unas escaleras. La casa sólo tenía dos pisos. Había una puerta, que llevaba al salón y a la cocina. Es realmente preciosa la casa.

-¡Laura! -Escuché a Dani.

Subí las escaleras de dos en dos y me asomé a la habitación. Sólo había una, pero muy grand-e. Había una cama de dos. De madera y con un velo trasparente. Dani estaba en la cama, tumbado mirándome. A mi izquierda estaban sus maletas, y no sé cómo, la mía también. Miré a Dani.

-No pierdes el tiempo, ¿eh? -Le dije sonriendo. Él negó, devolviéndome la sonrisa y dio unas palmadas en el lado libre de la cama, para que fuera con él. Me acerqué y me senté. Daní me cogió del brazo y me tumbó, acercándome a él. Apoyé mi cabeza en su pecho, Dani me acariciaba el pelo.

-Eh.. Hoy te quiero llevar a un sitio.

-¿Qué sitio?

-Ah..

-Venga, Dani, dímelo. -Le besé el cuello. Noté que sonrió.

-A un restaurante, quiero llevarte a cenar.

-Entonces.. ¿El vestido era para eso?

Él asintió.

-Voy a arreglarme

-¿Pero tan pronto?

-Tiene razón.. -Él me besó la cabeza. Estuvimos un rato mirando el techo, sin hablar, sólo se escuchaban nuestras respiraciones. Nada más.

A la hora de comer, nos bajamos a la cocina, y la estrenamos, según él, pues nosotros éramos los primeros que habitaban esa casa. No nos complicamos la vida, así que preparamos una tortilla francesa para cada uno, y listo. Tampoco teníamos mucha hambre de todos modos.

Ya eran las 6 y doce minutos de la tarde, y a las nueve iríamos al restaurante. Me duché con agua caliente, Dani mientras, sacaba su ropa de su maleta y la colocaba en el armario. Íbamos a compartir armario y cama. Por una parte, me era normal, pero por otra, era raro. Pero raro en el sentido bien.. No sé, algo difícil de explicar. Cuando salí de la ducha, eran las 6 y media pasadas, no había nadie en la habitación, y me fijé que Dani había colocado su maleta, en un hueco que había entre el armario y la pared. Abrí la puerta del armario, y allí estaba su ropa, bien colocada. Había dejado espacio, para que pusiera la mía también. Me até bien la toalla para que no se cayera, coloqué mi maleta encima de la cama, y empecé a sacar cosas. Saqué el vestido, y lo colgué del pomo de la puerta, de la habitación. Ni una arruga. Saqué las demás cosas, la ropa, doblada, y metida en el armario. En ese momento me acordé de la plancha del pelo. Mierda, mierda y más mierda. Me la dejé en casa. Mi maldita cabeza.

En ese justo momento, hicieron intento de abrir la puerta.

-¡¡NO!! -Grité y me abalancé sobre la puerta del cuarto cerrándola.

-Eh.. ¿Laura? -Escuché a Dani

-Es que acabo de salir de la ducha, y sólo estoy tapada con una toalla, y me da un poco de vergüenza...

-Nada, nada, tranquila -Empezó a bajar las escaleras.

-¡Dani! -Grité, sin abrir la puerta

-¿Qué pasa? ¿Te caíste?

-No.. Quería saber, si tu hermana te dio la plancha del pelo.

-Ah, sí, se me olvidó decírtelo. Está en la bolsa que hay dentro de mi maleta.

-Vale, gracias.

-De nada, tonta.

-Yo también te quiero. -Le dije

-Lo sé -Y escuché cómo bajaba las escaleras. Fui hacia su maleta, y saqué la plancha del pelo, la puse encima de la cama. Terminé de sacar la demás ropa, ya eran las 7 y veintidós minutos. Oush, qué tarde.

El pelo ya lo tenía seco, así que sólo tenía que planchármelo. Tardé poco en hacerlo, me vestí, y maquillé. Tardé a penas una hora y poco más. Dani todavía tenía que vestirse. Madre mía, he tardado mucho.

Ropa de Laura

Bajé las escaleras, y no se oía ni una mosca.

-¿Dani? -Bajé, y no había nadie en la entrada. Fui al salón, y tampoco. Me dio por ir al jardín, y allí estaba. Se giró y me miró. Estuvimos un rato mirándonos, él me sonreía y yo a él. Iba de pajarita, elegante. Demasiado perfecto para alguien como yo. Iba de negro, con una camisa blanca, y unos zapatos brillantes negros, muy elegante y muy guapo. Demasiada perfección.

Ropa de Dani

-Estás... preciosa -Dijo acercándose a mí, con una sonrisa. Ése tipo de sonrisas suyas que me podían.

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Habréis visto que pone "ropa de Laura" o "Ropa de Dani" ¿verdad? Bueno, no puse aquí los links. Es un link que está puesto en mi blog, para que vean la ropa. Aquí les dejo mi blog, y si quieren, se pasan por allí. 

http://miburbujitaprivada.blogspot.com.es/

Gracias por leer<3. 

~Mi burbujita privada♥~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora