𝚃𝚑𝚒𝚜 𝙸𝚜 𝙱𝚊𝚍 - 𝚆𝚊𝚔𝚊𝚜𝚊 𝙸𝚖𝚊𝚞𝚜𝚑𝚒

Dudas

Mi pulso se había acelerado, mi respiración estaba agitada, Wakasa entro luego de ver salir a Alía de la habitación, su mirada era preocupada hasta que vio que físicamente estaba bien, camino a pasos lentos acortando la distancia entre nuestros cuerpos.

Sostuvo mi barbilla haciendo que lo mirara a los ojos, no podía hacer eso, no lo podía mirar directamente a los ojos, acaba de engañarlo, no había estado en mis planes pero tampoco lo había evitado.

-______, mírame -el tono demandante erizo mi piel, mi cuerpo por inercia iba a obedecer, solo unos segundos uní mi mirada con la suya, rápidamente la desvíe. -______, no quiero repetirlo de nuevo.

Sentí mi cuerpo temblar antes de obedecer, en sus ojos pude notar tranquilidad, la sensación de arrepentimiento no dejaba mi cuerpo, en vez de disminuir aumentaba. Reuní todo el valor que pude para mirarlo, un escalofrío recorrió mi cuerpo apenas lo observe mirarme fijamente.

-Lo ví todo -claramente todo estaba por irse a la mierda, el me diría que soy una maldita infiel, mi intento de bajar la cabeza para mirar al suelo se vio interrumpido por la presión ejercida en mi mandíbula.

-Esta bien -la sensación de mis ojos llenándose de lágrimas apareció, ¿aquí terminaría todo? -______, el tiempo a tu lado fue más que perfecto, sobre todo cuando comenzamos a convivir de una forma distinta...

Moví la cabeza negando, ahora las lágrimas calientes recorrían mi rostro, cerré los ojos con fuerza negandome a mirarlo.

-Eres joven... aún puedes decidir que te gusta, tengo presente que puedo ser algo pasajero por mucho que te a... quiera -rapidamente me abrace a su cuerpo, recargue mi rostro en su pecho, sabía que lo mojaba con mis lágrimas pero no me importaba, tan solo quería que dejara de insinuar que lo mejor era que dejáramos todo.

-Puedes decidir, tomes la decisión que tomes tendrás mi apoyo, tal vez sea egoísmo quererte solo para mí, realmente quiero que seas solo mía, no sería capaz de compartirte, por eso quiero saber que te haría feliz, si Alía despertó sentimientos nuevos en ti eres completamente libre de correr a sus brazos.

-No... no quiero a otra persona que seas tú -aquellas palabras sonaron como si esto fuera una despedida, lo decía con sinceridad, en ningún momento mentí, mi corazón y mente tenían claro que la situación con Alía me había confundido pero que siempre sería Wakasa, siempre había sido el.

-¿Estás segura? Una vez que respondas con toda sinceridad las cosas cambiarán, solo quiero la verdad _______.

¿Por qué tenía tantas dudas? Lo quiero a el, ¿por qué mierda no lo entiende? Tal vez... ¿quería un pretexto para dejarme?

-Se lo que piensas, no quiero dejarte, quiero que seas feliz y honestamente no creo poder hacerlo, mereces a alguien mejor.

Levanté el rostro con coraje, no solo me cuestionaba sino que también se menospreciaba, me separé de su cuerpo, lo observe mirarme con confusión. Mi paciencia había llegado a un límite, tan solo quería que entendiera todo.

-Deja tus mierdas Wakasa, entiende de una puta vez que te quiero a ti, no quiero a nadie más, -las lágrimas querían salir pero no podía dejarlas, tenía que contenerlas. -DEJA TUS MALDITAS DUDAS, NO PORQUE ME LLEVES DOCE AÑOS SIGNIFICA QUE ME IRÉ CON ALGUIEN MAS JOVEN O CON CUALQUIER OTRA PERSONA, SI QUISIERA ESO LO HUBIERA HECHO ANTES DE QUE ME FOLLARAS, NI SIQUIERA HUBIERA PENSADO EN TI CUANDO ME TOCABA ¡DEJA DE SER TAN INGENUO! -sus ojos se abrieron, nunca había tenido la valentía de hablarle así.

Camino hasta mi con la intención de tomar mi cintura pero retrocedí dándole a entender que no quería ser tocada por el.

-No dejaré que me vuelvas a tocar hasta que lo entiendas -con mi dedo lo señale.

-Lo entendí -siguió caminado hasta mi, pensé que se detendría pero no lo hice, por mi parte solo seguí retrocediendo.

La fría pared hizo contacto con mi espalda siendo cubierta por una delgada blusa de algodón. Llevo meses sin sentirlo, mi cuerpo no puede evitar reaccionar cuando lo tengo a punto de acorralarme. Justo en estos momentos deseaba tener una buena fuerza de voluntad.

-Dejame demostrártelo -sus labios se acercaron a los míos, abrí los labios en anticipación, cerré los ojos esperando su beso pero no pasó, al abrirlos lo mire perdido en mis labios. -Es complicado pensar que puedo ser suficiente para alguien de tu edad, hace unos meses tenía la seguridad de que estabas bien conmigo, comencé a cuestionarmelo cuando ocurrió el accidente, hasta hace un mes no podía evitar pensar que sería de mi si te perdía y luego ésto... -sus labios se juntaron con los míos.

El beso contenía sinceridad, no lo había pensado de esa manera, aún si le daba vueltas en mi mente podía comprender que sus dudas tenían buenos fundamentos.

Mi boca se abrió en medio del beso pidiendo la lengua de Wakasa en el interior de mi cavidad bucal, como era de esperarse subió de intensidad, sus manos bajaron a mis nalgas apretandolas, una jadeos salió de mi boca, sus manos sostuvieron un poco más abajo levantando mi cuerpo, enrolle mis piernas en sus caderas, podía sentir como se ponía duro contra mi entrepierna.