Fueron a donde estaban todos reunidos
—¡Sólo falta media hora para la medianoche, así que no hay tiempo que perder! Los profesores de Hogwarts y la Orden del Fénix hemos acordado un plan. Los profesores Flitwick, Sprout y McGonagall subirán con tres grupos de combatientes a las tres torres más altas (Ravenclaw, Astronomía y Gryffindor), donde tendrán una buena panorámica general y una posición excelente para lanzar hechizos. Entretanto, Remus —señaló a Lupin—, Arthur —señaló al señor Weasley— y yo iremos cada uno con un grupo a los jardines. Pero necesitamos que alguien organice la defensa de las entradas de los pasadizos que comunican el colegio con el exterior...
—Eso parece un trabajo hecho a medida para nosotros —dijo Fred señalándose a sí mismo a Pansy y a George, y Kingsley mostró su aprobación con una cabezada.
—¡Muy bien! ¡Que los líderes suban a la tarima, y dividiremos a nuestras tropas!- los tres fueron a los pasadizos. Luchaban contra los Mortifagos que atacaban al colegio. Percy se había unido a ellos. Y mientras luchaban también apareció el trio de oro salían disparados chorros de luz en todas las direcciones, y el tipo que peleaba con Percy se retiró a toda prisa; le resbaló la capucha y los chicos vieron una protuberante frente y una negra melena con mechones plateados...
—¡Hola, señor ministro! —gritó Percy, y le lanzó un certero embrujo a Thicknesse, que soltó la varita mágica y se palpó la parte delantera de la túnica, al parecer aquejado de fuertes dolores—. ¿Le he comentado que he dimitido?
—¡Bromeas, Perce! —gritó Fred al mismo tiempo que el mortífago con quien peleaba se derrumbaba bajo el peso de tres hechizos aturdidores. Thicknesse había caído al suelo y le salían púas por todo el cuerpo; era como si se estuviera transformando en una especie de erizo de mar. miró a Percy con cara de regocijo- —. ¡Sí, Perce, estás bromeando! Creo que es la primera vez que te oigo explicar chistes desde que...-Fred apagó su voz observando un rayo de luz verde aproximándose a la pelinegra que reía por lo bajo. Su reacción fue rápida, dando un par de pasos hacia su costado y se colocó frente a ella, sonriéndole. ella solo sintió un golpe seco contra el pavimento y vio la cara pálida y pecosa que estaba observándola con una gran sonrisa y los ojos cubiertos de lágrimas, desconcertada escucho en un susurro ausente y rápido un te amo, y luego observo como Fred caía inconsciente hacia ella. no reaccionó, ella quería levantarse del suelo y acercarse a Fred, abrazarlo y escuchar su risa dándole a entender que fue una broma para liberar la tensión. Percy corrió hacia el cuerpo inerte en el suelo, ella movió un poco la cabeza y lo observo, sus ojos estaban en dirección hacia ella, pero no la miraban, ni tenían el brillo tan característicos de ellos, su sonrisa de momentos antes no se había desvanecido, aún permanecía el fantasma de su última risa grabado en el rostro. su varita estaba a los pies de Pansy, sus ojos se nublaron. Sentía como si cayera al mar y no pudiera nadar, como si el agua no le permitiera respirar, sentía que su corazón dejara de latir. veía todo en cámara lenta, se levantó con torpeza caminando a donde Percy zarandeaba a su hermano, Ron estaba arrodillado a su lado, Pansy grito, desplomandose al lado del chico, llorando sin poder contenerse. Le susurraba que lo amaba, intentó con todas sus fuerzas hacer el hechizo "ridiculous" creyendo que de alguna manera, un boggart andaba por ahí, pero todo fue imposible. Sintió un par de manos separarla con calma del cuerpo de Fred, al que ella quería seguirse aferrando. Luego. Observó a lo lejos al mortifago que había lanzado el hechizo, que había matado su felicidad . Y corrió hacia él, esquivando los duelos. Lanzando hechizos a quien se atravesara y cuando llego a el. La vista se le nublo, y regresó observándose en el suelo. Jadeando de dolor, y rogando por su vida, Percy la miraba a una distancia corta, con los ojos enrojecidos, Pansy le sonrió con dolor y luego miró al mortifago. Pansy levantó su varita y un último destello de luz verde apagó el último suspiro de Augustus Rookwood. Y a cada paso que daba un mortifago terminaba retorciéndose, intentando que el dolor que sentía en su alma lo sintieran ellos en el cuerpo entero. Antes de que la batalla final desapareciera, fue a parar a un río lejano, en el que ella y Fred habían patinado meses atrás, en una cabaña que construyeron ese mismo día, como su casa de fin de semana. Pasó desapercibida en el funeral, pasando como una dulce muggle de un pueblo lejano. Así pasó un año, en el que fue consumida por el dolor, en los que cada noche las pesadillas la invadía. Imaginando a los Weasley culpándola de todo, a George deseándole la muerte. Y recordando la imagen de su alma gemela sin vida. Al anochecer del 24, Pansy se quedó en el techo de la cabaña, observando en dirección a la constelación de Orión. Recordando cada una de las veces en las que trazó esa misma constelación en las pecas de su querido pelirrojo. Las lágrimas, como cada día se apoderaban de ella comenzó a sollozar y luego a gritar con el alma cada vez más rota. Sentía su garganta seca, su cuerpo débil y al final sintió como caía sobre la espesa capa de nieve blanca.

ESTÁS LEYENDO
La presencia de las Hadas
Fiksi Penggemar...Pansy con la garganta hecha un nudo y las piernas temblando ni siquiera pudo dar un paso antes de que estas le fallaran y tropezara casi cayendo al suelo. Pero antes de que eso pasara, dos pares de manos pálidas sostuvieron sus caderas, por ambos...