Segundo fic conmemorativo por mis 100 seguidores
Descargó de responsabilidad, todos los derechos de los personajes e imágenes ocupadas a lo largo de este fic, pertenecen a sus respectivos autores.
No doy mi autorización de que esté o cualquier otro...
Por las calles de orario se podía ver a nuestro protagonista con la mirada perdida y aparentemente caminando sin rumbo pero para saber el por qué actualmente esta así el peliblanco tenemos que ver lo que pasó hace algunos minutos o tal vez horas.
Flashback
Bell: -terminando una serie de estiramientos- ¡Bien! Hoy iré con la Diosa Hestia para pedirle que me deje entrar a su familia -con una resolución en su mirada- tengo que hacer que me acepte después de todo es mi última opción que me queda
Con una determinación, Bell salió de su cabaña en dirección a la iglesia donde se decía que ahí residía la Diosa que era la última esperanza para que Bell pudiera comenzar con su sueño de converise en un héroe.
El peliblanco no tardó mucho en llegar a las ruinas dónde actualmente radicaba la diosa del hogar, a Bell poco le importaba si Hestia vivía en una gran mansión o en este caso una iglesia en ruinas, tampoco le importaba si eran ricos o pobres, lo único que le importaba al último descendiente de la familia Zeus, era ser aceptado por Hestia y así comenzar con su seño de volverse un héroe.
Con una gran voluntad Bell tocó la puerta de la iglesia en ruinas esperando ser recibido por su última esperanza.
Bell tuvo que tocar con cuidado un par de veces más, antes de escuchar una voz de fondo junto con pequeñas y rápidas pisadas, para después la puerta fuera abierta revelando la apariencia de la deidad.
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Bell se sorprendió, ya que a primera vista creyó que era una simple niña, pero inmediatamente sintió el aura divina que caracterizaba a la mayoría de los dioses y permitiendo identificarlos.
Antes de que Bell pudiera expresar el motivo por el cual estaba aquí, la pequeña deidad habló primero.
Hestia: ¿Que quieres? -con un tono impaciente- Bell: -algo desconcertado por el tono de voz proveniente de la diosa- Ehmml... bueno yo...-no pudo terminar por qué fue interrumpido- Hestia: ¡Apúrate! Tengo mejores cosas que hacer que estar esperando que órdenes tus ideas Bell: Lo siento mucho -inclinandose-...Mi nombré es Bell Cranel y quería pedirle ¡Que me dejará unirme a si familia Hestia Sama! -pegando su cabeza al suelo-
Hubo unos momentos en silencio, así que Bell despegó la cabeza del suelo para esperar la respuesta de la deidad.
Hestia: ¿Es una broma por parte de Loki verdad? Bell: ¿Eh? Hestia: -suspirando- Si es una broma o no la respuesta es NO Bell: ¿¡Que!? ¿¡Por qué!? Hestia: Todavía tienes el descaro de preguntar, solo mírate, eres carne de cañon en el mejor de los casos, no quiero tener que pasar la vergüenza de saber que un dependiente mío fue tan patéticamente débil y murió en calabozo, además ya tengo dos dependientes y serías una carga para ellos así que deja de hacer perder mi tiempo y lárgate niño -cerrando la puerta bruscamente-
Bell se quedó hecho piedra, las palabras de la diosa del hogar repitiéndose en bucle en su mente, mientras lágrimas brotaban los orbes rubí del joven albino.
Sin saber cuánto tiempo paso en la entrada de la iglesia Bell con sus esperanzas hechas pedazos empezó a caminar sin rumbo por Orario.
Fin de flashback
Bell estaba pensando en que hacer, que pensaría su madre Alfia al verlo en ese estado tan patético.
Mientras el peliblanco divagaba que hacer con su vida, por uno de los callejones escucho un grito de auxilio.
A pesar de que tenía sus esperanza rota, el sentido heroico de Bell se encendió como si fuera una llama incontrolable y sin pensar sus piernas se movieron solas y corrió a aquel callejón.
Una vez llegó al lugar donde provenían los pedidos de socorro, Bell vio como dos chicos aproximadamente un par de años mayores que el tratando de quitarle un bolso a un señor bastante mayor.
Sin pensarlo dos veces Bell corrió y dió un golpe sólido a la mandíbula de uno de los chicos, a pesar de no tener falna, las habilidades y fuerza de Bell podrían comprarse con un aventurero de nível 2 y la experiencia en combate con un aventurero de nivel 3 a finales de camino, así que al golpear con la guardia baja y ser aparentemente un aventurero de nivel 1 el chico que recibió el golpe fue empujado unos cuantos metros y cayó inconsciente.
El otro chico tardó en registrar lo que le había pasado a su compañero por la abrupta intervención de Bell, una vez que vio a su compañero caer inconsciente, el "matón" restante vio como una amenaza al peliblanco así que sacó su daga con la intención de matar al último descendiente de la familia Zeus.
Al ver el arma de su oponente Bell se puso serio y adoptó una posición defensiva, su oponente no tardó en atacar con la intención de matar pero Bell esquivo con relativa facilidad ya que su agresor carecía de cualquier grado de técnica.
Al ver una apertura en el ataque de su oponente, Bell tomó la muñeca de su contrincante y con la otra mano golpeó con la palma abierta la articulación del codo dislocandolo.
Antes de su rival pudiera gritar de dolor, Bell desarmó con la mano que sujetaba la muñeca de la mano que poseía la daga y golpeó en la sien con el mango de dicha arma dejando al "matón" totalmente inconsciente.
Bell: -mirando al anciano- ¿Se encuentra bien señor- Señor: Ohhh muchas gracias jovencito Bell: No se preocupe, me alegra haber llegado a tiempo Señor: Usted es mi héroe, gracias a usted aún conservo el poco dinero que me queda Bell: -sonriendo tristemente- No creo que sea un héroe señor, después de todo fui rechazado por todas la familias, pero eso no evita que deje de ayudar, si necesita algo más no dude en pedirlo -sonriendo-
La sonrisa de Bell se desvaneció cuando el anciano, como pudo le dió un fuerte golpe en la cabeza.
Bell: ¡Auch! -sobándose- ¿Por qué hizo éso? Señor: Estos jóvenes de ahora, creen que no pueden hacer nada sin la falna de un Dios, dime niño ¿Los héroes de antaño necesitaron de un Dios? Bell: No... pero tenían algo que los ayudaba, Albert tenía el espíritu del viento Aria, Argonaut tenía sus espadas y Hepimeteo tenía el fuego sagrado Señor: -suspirando- Niño tonto, ellos ya eran especiales antes de tener ese equipo sagrado o en el caso de Albert la bendición de un espíritu, ellos comenzaron sus aventuras antes de tener lo que lo hicieron reconocidos Bell: -suspirando- Pero yo no creo tener algo especial
El señor algo desesperado volvió a golpear a Bell en la cabeza.
Señor: No solo eres tonto, eres estúpido, niño, salvaste a alguien sin conocerlo y sin pedir nada a cambió, te pusiste en peligro y luchaste con dos aventureros sin tener una falna y los veniste, si eso no es ser especial entonces el mundo se ha vuelto loco
Bell abrió los ojos con sorpresa y un brillo de esperanza lleno su mirada tal vez si sueño todavía podía volverse realidad.
Señor: -suspirando- Mira niño, como muestra de mi agradecimiento te daré algo muy especial
Bell iba a negarse pero con una simple mirada del anciano se calló.
Señor: -dandole un trozo de papel- Este es un mapa del piso 5 del calabozo en el hay una zona inexplorada totalmente desconocida por el gremio y por cualquier otra familia que haya explorado el calabozo, si sigues correctamente te llevará a una espada clavada en una piedra, esa espada es especial, si eres digno de ella podrás sacarla y su poder estará a tu disposición
Bell veía con asombro el mapa y cuando trato de decir algo se dió cuenta que aquél anciano se había ido y en su lugar había unas cuantas mariposas.
Y con esto acaba el capítulo y la última actualización del año.
No festejo estás fiestas pero les deseó un próspero año nuevo y un exelente 2022
