Quienes han perdido por completo toda su luminiscencia, quienes viven en las más oscuras tinieblas de su negra alma, que jamás volverá a ver la luz del sol. Son los apagados, su existencia se basa en ella misma, en existir, no cumplen ningún tipo de propósito. No sueñan, no sienten, no evolucionan, simplemente están ahí, respirando.