𝟏𝟒

205 22 6
                                    

Dos años después


Desde aquel día no volví a ser el mismo.

Lo único que cambió es que ahora tengo un Rolls Royce.

Ahre.

Mentira, pero sí, me recibí y tengo mi estudio, hace poco pude comprarme un auto.

Pero sigo pasándola mal omg q sorpresa.

Y no solamente por el hecho de que Beomgyu me hizo más mierda de lo que me gustaría admitir.

Sino porque lo único que más quería en el mundo ya no estaba conmigo.

En el patio de mi casa, ahora propia, había una lápida donde descansaba lo que una vez tuve en mis brazos y cuidé como si fuera mi hijo.

Mi gatito se murió de viejo y yo casi me muero con él.

Pero ahora lo llevo a todos lados. Me tatué sus patitas de cuando era bebé en el brazo.

Porque cuando apenas lo tuve lo hice pisar temperas y guardé la hoja. Después le limpié las patitas y decidí que iba a llamarse bolas tristes.

Lo extraño y a Beomgyu también pero para ser honestos lo único que necesitaba ahora era escuchar los ronroneos de mi gatito.

--- No puedo creer que todavía no pueda seguir adelante. --- Hablé sólo como siempre. --- Pero posta no quiero a nadie más.

Apoyé mi cabeza contra el escritorio.

--- No puede ser que un año me hayas hecho tan miserable. --- Dije. --- Y es que, yo creo que si ahora mismo, te pararas enfrente mío... No haría más que llorar y correr a abrazarte.

Cuando me di cuenta de por dónde iba mi atrofiado cerebro, sorbí mi nariz y me acomodé la corbata.

Me puse derecho cuando escuché que tocaron la puerta de mi oficina. (All I want is nothing more, to hear you knocking at my door)

--- Adelante. --- Dije.

Aunque les parezca mentira, yo seguía siendo como los nenes chiquitos. De una forma u otra me ponía ansioso ante la idea de que fuera mi principe el que estuviera tocando.

Pero eso era, una ilusión pedorra.

Porque siempre terminaba siendo el gorreado de mi secretario o la boluda de la recepción.

--- Tomá, te traje los planos que me pediste para imprimir. --- Me dejó unos folios sobre la mesa.

--- Gracias. --- Respondí.

--- ¿Precisás algo más? --- Me dijo.

Sí, un corchazo en el medio de la frente.

--- Nono, está bien por ahora. --- Negué con la cabeza. --- Cualquier cosa yo te aviso.

Me saludó y se fue.

Suena patético decir que me derrumbé en el suelo después de eso. Pero no pude evitarlo, sigo siendo un desastre.

Me odio con todo lo que soy.

☆🌷 all i want ✦ soogyu 彡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora