Lo Prometo [Robert Downey Jr]

¿Instinto o Reputación?

Un día antes de que llegase el día del "apadrinamiento" me gustaba salir al jardín a dibujar el hermoso atardecer, me gustaba como los rayos de sol se posaban en las nuves, las sombras de los arboles hacían juego con el color que transmitía el sol, y ver a los niños correr y preparar sus frases para el siguiente día era muy lindo. Pero en lo mas profundo de mi corazón yo también intentaba preparar mi buena presentación, pensaba en que decirle a las personas para cuando llegaran, aun sobrevivía en mi una pequeña gotita de esperanza a pesar de mis 12 años de falsas ilusiones.

Sandra: Dany- su voz me saco de mis pensamientos- En verdad se te da bien el dibujar, deberías conseguir algún trabajo de diseño o yo que se en vez de estar aquí esperanzada a que alguien quiera apadrinarte.

Dany: No necesito buscar trabajo, yo se que algún día alguien querrá adoptarme

Sandra: Jajaja por favor Dany no seas ridícula, a tu edad nadie querrá adoptarte, creo que ya eres lo suficiente grande como para seguir pensando así.

Dany: Pienso lo mismo de ti Sandra, creo que ya tienes suficiente edad como para andar hay por la vida rompiéndole a los demás sus sueños.

Sandra: Como sea, pero el día que alguien quiera responsabilizarse de una enferma como tu, créeme que ese día te are un gran favor.

Ella es Sandra, fue la primera chica que conocí cuando llegue a la casa-hogar, es 6 años mayor que yo, al principio solía ser conmigo la persona mas dulce que ninguna otra persona pueda conocer, me cuidaba, jugaba conmigo, me trataba como si fuese su hermana pequeña, pero un día cuando yo cumplí los 15 años llego un hombre del todo muy guapo, tenia mas o menos 24 años, de pelo castaño y ojos color azul y tenia un muy buen cuerpo y el estaba dispuesto a adoptar a alguien para curarle de su enfermedad. Yo me presente de lo mas formal que pude, eh de admitir que no pude evitar el examinarlo de pies a cabeza, y pude observar como Sandra me veía desde el otro extremo con cara de pocos amigos, el hombre era bastante amigable y me la pase platicando con el durante todo el día. Y antes de irse estaba a punto de decirle al Sr. Peter que me adoptaría pero Sandra se acerco a el y le dijo sobre mi enfermedad y que costaba bastante dinero, aparte le invento que si se convivía conmigo por un par de meses esa enfermedad se contagiaría y al final moriría. Aquel hombre se creyó cada una de las palabras de Sandra y yo de la furia que tenia la golpe en la cara haciendo que se le rompiera su nariz. Después de dos semanas me entere de que Sandra y aquel hombre salían juntos, y en verdad que eso me molesto mucho, por que me quito la oportunidad de por fin ser adoptada por alguien solo por que aquel hombre estaba guapo y era 3 años mayor que Sandra.

Desde ese día se ah vuelto mi mayor rival y se las ah arreglado para alejar a cualquier chico guapo que se acerque a mi. Y tanto me ah hecho sufrir que logro que nadie me adoptara, pero juro que algún día alguien lo ara. 

Al día siguiente todos los niños despertaron emocionados de que por fin allá llegado el día mas esperados de todos, posaban sus mejores prendas y practicaban una y otra vez como se presentarían ante los demás, yo no me quede atrás también pose mis mejores prendas era un hermoso vestido floreado corto y que hacia juego con los tenis que llevaba puestos. Y así se acercaron todas las personas y comenzaron a preguntarnos nuestros nombres, y cosas así, pero nadie se acerco a mi, hasta que se acerco un hombre de pelo negro y ojos obscuros y musculoso de una edad mas o menos de 35 años y estaba dispuesto a adoptar a alguien, por fin seria mi oportunidad de ser curada de mi enfermedad, el se llamaba Ethan, comenzamos a conversar y al parecer era un buen hombre con buenas intenciones asta que por fin llego la hora de que las personas decidieran a quien llevarse a casa.

Ethan: Sabes te has ganado mi corazón, eras una chica suertuda por que tu vendrás conmigo a casa.

Dany: Oh enserio muchas gracias- no resistí las ganas y lo abrace

Ethan: Ya veras que ese lindo corazoncito se va a curar- dijo giñendome el ojo

Sandra: ¿En verdad piensa adoptar a Daniela?

Ethan: Si ¿por que?, ¿hay algún problema?

Sandra: Ja! que si lo hay, claro que lo hay. El año pasado un hombre tan caballeroso como usted también intento llevársela pero ella solo lo quería para acostarse con el solo por que era muy guapo, aparte le contagio su terrible enfermedad al pobre hombre. Daniela obligaba al hombre a tener relaciones con ella y si no lo tenia ella lo demandaría por fraude, y ¿sabe que fue lo que le paso al hombre?

Ethan: No, no se

Sandra: Termino por suicidarse por que no soportaba a una chica como ella

Dany: No digas mentiras Sandra

Sandra: Hay Daniela yo se que no quieres que nadie sepa sobre esa terrible historia pero lo hago por salvar a los demás

Dany: Sr. Ethan por favor no le crea nada de lo que esta maldita le dice

Ethan: Lo siento Daniela, pero no quiero arriesgarme- se alejo lentamente de mi y comencé a escuchar como Sandra se reía a mis espaldas.

Sandra: Lo siento querida, pero nadie te quiere por ser una maldita enferma del corazón

Dany: Estúpida perra! te juro que algún día me las vas a pagar.

Me lance sobre ella y comencé a golpearla lo mas fuerte que pude en su maldita cara, todo mundo miraba asombrado lo que estaba pasando, y sabia que después de esto nadie querría adoptarme pero ya no importa, de todas formas todo mundo se cree de los estúpidos cuentos de Sandra. De repente sentí que alguien me separo y pude notar como la había dejado, le sangraba la boca, tenia el ojo hinchado y le había hecho varias rasguñadas en la cara y en cuellos, todo mundo me vio asustado al ver como había dejado a Sandra, llena de sangre y golpeada, y Ethan salio corriendo del lugar, yo solo escuche las criticas de las demás personas y salí corriendo del lugar y me encerré en mi cuarto, me arrincone en mi cama y mis lágrimas comenzaron a salir, había cometido el peor error del mundo, ahora mis actos tendrán una terrible consecuencia, pero que mas da ya no importa nada, ahora lo único que quiero es nunca haber tenido esta terrible enfermedad...