Respawning... [Kenma x reader]

Capítulo 13

[Nota: si a alguien le da un ataque de diabetes o algo pues lo siento JAJAJAJAJAJA
Es demasiado empalagoso halp ufenoksadml]

NARRA KENMA

Tras terminar la última clase de hoy suspiro pesadamente y salgo del edificio. Llevamos solo un par de semanas, pero ya estoy cansado.

Abro el móvil y veo un mensaje de (t/n) diciendo que vendrá a casa después, que tiene cosas que hacer así que mejor que vaya yo primero. Le contesto diciendo que vale y que haré la comida, que si le apetece algo. Mientras espero a que vea el mensaje echo a andar en dirección a nuestro piso. Al llegar me sigue sin contestar por lo que decido esperar un rato más mientras estoy en redes sociales a ver qué se explica la gente. Como sigue sin contestar suspiro resignadamente y me levanto para preparar algo.

-A ver Kenma, piensa. ¿Qué le gustaría a (t/n)?- abro la nevera y un par de armarios en busca de respuesta. Al ver los espaguetis me decanto por ellos así que pongo agua a hervir en una olla. Cuando ya está echo la pasta, aceite y sal. Mientras se hacen le envío otro mensaje a (t/n). Cuando están listos los cuelo y los dejo en el colador. Miro la hora y veo que hace más de una hora que mi novia debería haber salido de clase así que la llamo.

-¿Diga?- dice nada más contestar.

-Soy yo, Kenma- le respondo simplemente.

-Ah, ostia- murmura en castellano-. Ya voy para casa, no tardaré.

-Está bien- no me da tiempo a decir nada más ya que cuelga. Algo frustrado me siento de nuevo en el sofá y busco algún juego tonto para pasar el rato. Casi veinte minutos después llega a casa. Deja su bolsa en la entrada y se acerca a mí.

-Joder, perdona por tardar tanto. Se me ha pasado la hora completamente. Lo siento- suspira pesadamente.

-No te preocupes, da igual- me encojo de hombros y me levanto de donde estoy-. He hecho espaguetis para comer. ¿Te apetece?- inquiero mientras vamos a la cocina.

-Pues no mucho, la verdad. Bueno, en sí no me apetece absolutamente nada, así que da un poco igual- asiento y nos servimos cada uno un plato. A los míos les echo tomate y queso, pero ella prefiere dejarlos solos. Nos sentamos ambos a la mesa y empezamos a comer en silencio. Es ahí cuando me doy cuenta de que algo no va bien. Normalmente me explica lo que ha hecho en clase o algo por el estilo, pero hoy se limita a intentar comer.

-¿Cómo te ha ido hoy?- le pregunto suavemente.

-Ah, eso. Bien- intenta restarle importancia encogiéndose de hombros.

-¿Por qué has tardado tanto en venir?- inquiero de nuevo.

-Tenía que acabar una cosa, pero nada importante. No te preocupes por eso, ¿sí?- asiento sin estar del todo convencido de sus palabras puesto que no te quedas una hora larga en la uni después de clase por algo que no es importante. Pero si no me lo quiere decir no le puedo hacer nada. No tengo derecho a obligarle.

No mucho después respira profundamente y se levanta para dejar el plato en la encimera. No se ha acabado los espaguetis y no tiene pinta de que vaya a querer comer nada más. Sale de la cocina sin decir nada de nada y se va a algún lado. Yo termino de comer y voy al cuarto de baño para ducharme a ver si se me aclaran un poco las ideas.

A ver, no pasa nada. Debe de haber tenido un mal día y no le apetece hablar de ello. No pasa nada. Si de eso luego le preguntas otra vez, pero si no te lo quiere decir no pasa nada. Tú limítate a estar para lo que ella necesite y ya. Hay que evitar que vuelva a entrar en crisis.

Me quedo pensando en ello mientras dejo que el agua caliente recorra mi cuerpo entero, relajándome. Un rato después salgo de la ducha por lo que me seco y me peino antes de salir. Al hacerlo paso por delante del estudio, donde se oyen las teclas de un teclado. La puerta no está cerrada del todo así que puedo ver a (t/n) sentada en su silla haciendo algo en el ordenador, aunque no termino de descifrar el qué. Tiene los cascos puestos así que decido no molestarla y simplemente irme a jugar al comedor.