C A P Í T U L O 15

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Ninguno de los dos emitió ningún sonido durante los siguientes tres minutos. Jungkook lo analizaba de arriba a abajo, no podía creer que lo tuviera delante, estaba igual que la última vez que le vio.

A pesar del silencio presente, en la cabeza de Jungkook había mucho ruido. ¿Por donde debería empezar? Tenía tantas preguntas, ¿cómo iba a seguir vivo si se habían llevado su cadáver? Él mismo lo había visto.

Jimin adelantó su pie derecho para acercarse un poco más a su amigo. Pero, en ese mismo instante, un ruido interrumpió el reencuentro, alguien estaba subiendo de manera acelerada por las escaleras. Al oír esto, Jimin se volvió a esconder bajo la capucha y corrió al borde del edificio subiéndose en un pequeño muro.

Jungkook observaba alerta sus pasos. El ruido procedente de las escaleras sonaba cada vez más cercano, es por ello que Jungkook miró hacia aquella entrada al darse cuenta de esto, segundos después, volvió a girar su cabeza y a dirigir la mirada a su compañero, de inmediato supo que su intención era saltar. Jungkook reaccionó corriendo hacia él, no lo iba a dejar escapar, esta vez, no le volvería a perder.

Al mismo tiempo que Jungkook se impulsaba para subirse al muro, la puerta se abrió.

— ¡Jungkook!— El nombrado giró su cabeza para ver de quién se trataba desde lo alto del muro. Tras dicha puerta estaba Jin, que al ver dónde se encontraba Jungkook no esperó ni un segundo para empezar a correr hacia él. — ¿Qué coño haces ahí arriba? ¡¿Te has vuelto loco?!— Gritó de forma desesperada y se llevó las manos a la cabeza mientras se aproximaba a gran velocidad.

Jungkook, extrañado de que no reaccionara al ver con quién se encontraba, miró hacia su izquierda y, para su sorpresa, Jimin ya no se encontraba ahí. El corazón de Jungkook se paró tras darse cuenta de esto, con sus ojos asustados miró a su alrededor buscando al desaparecido. Llevó sus ojos hacia abajo, solo había un vacío. ¿Dónde se había metido?

Un tirón de su brazo derecho que le tiró inmediatamente al suelo, le trajo devuelta a la realidad. Se llevó un golpe en el costado y en el hombro al caer, tras esto, Jin se montó encima de él, impidiendo de este modo que pudiera levantarse o ni siquiera moverse. — ¿Estabas intentando...?— Gritó con las primeras lágrima saliendo por sus ojos.

— N-No es lo que piensas.— Tartamudeó Jungkook.

— No tengo duda de lo que acabo de ver, ¿cómo se te ocurriría intentar hacer eso?— Jin estaba asustado, no sabía cómo actuar, qué hacer. Acababa de pillar a Jungkook en el borde de la azotea de un edificio y eso todos saben lo que significaba.

Después de cinco minutos en los que Jin recuperó el aire, se levantó dejando a Jungkook libre. Pero, en ningún momento apartó su mirada de él, no después de ver lo que iba a hacer. — Entiendo que no es el mejor momento de tu vida y que estés cansado pero... ¡esto no es la solución para nada!—

Jungkook se incorporó y limpio la suciedad de su hombro izquierdo con su mano— Jin. — Jin le miró atento. — Jimin está vivo.—

La respuesta de este no fue la que se esperaba, su gran amigo había empezado a reírse .— Me estás tomando por loco.—

— No te estoy mintiendo, acabo de verle, estaba aquí.

— ¿Sí? ¿Y dónde está ahora si se puede saber. Jiiiimin ven a saludar, no seas tímido.— Se rió irónicamente. A Jungkook le estaba molestando mucho el comportamiento que estaba teniendo. Entendía que no se lo creyera pero, no lo veía como un tema con el que se pudiera bromear. — Le echas de menos pero tienes que aceptar la realidad— Continuó Jin con un tono más serio.

— Acabo de verle. — Gritó el más pequeño.

Jin, que ya se había dado la vuelta para dirigirse a la puerta, se giró bruscamente y caminó enfadado hacia él. — Jimin está muerto.— Recalcó sin piedad. Jungkook se quedó atónito ante esta respuesta. Nunca había visto a Jin comportarse de esta manera. — Y ahora métete por esa puerta y vete a casa.— Ordenó.

Jungkook todavía estaba en shock, pero obedeció lo que le dijo. Ambos bajaron juntos por el ascensor sin intercambiar ningún tipo de palabra. Una vez llegaron al piso donde vivía Jungkook, entraron. No tuvieron ni que abrir la puerta ya que él mismo no la había cerrado al salir.

Nada más entrar, ambos se sentaron en el sillón. — Mira... Siento la actitud que tomé antes, estaba asustado, no me pude creer que te viera... apunto de... saltar...— Se justificó el más alto.

Jungkook no le escuchó ya que estaba ocupado pensando en dónde se podría haber metido Jimin.

— ¿Acaso me estás escuchando?— Cuestionó Jin arqueando la ceja mientras chasqueaba los dedos para llamar su atención.

— Perdón, no puedo concentrarme... no después de lo que he visto.

— Oh venga ya Jungkook, ¿vas a seguir con eso? — Protestó mientras dejaba caer todo su cuerpo en el sofá.

— No es una broma.

— ¿En vez de seguir avanzando, quieres retroceder?

— Ni siquiera te estás esforzando para escucharme.

— Cómo pretendes que te voy a hacer caso si está diciendo tal barbaridad. Jimin está muerto.— La voz comprensiva se había esfumado y el ambiente comenzó a tensarse.

— No lo digas así

—¿Y cómo quieres que lo diga? ¿Diciendo que se ha ido al cielo?

— ¿Por qué estás siendo tan frío? No te reconozco.

— Porque estoy aburrido de este tema ya

— Estás aburrido de la muerte de mi amigo. — Recalcó con seriedad.

— Es que cada vez que avanzamos siempre haces que se estropee. Primero apoyas al asesino y ahora dices qué el cadáver ha cobrado vida. — Resopló Jin perdiendo la paciencia.

Jungkook, no parpadeó durante la conversación. Estaba asombrado de la actitud que tenía, especialmente, de su poca empatía . — ¿Dónde estabas esa noche?

— ¿Qué?

— Contesta.

— No me puedo creer que— Jungkook no se molestó en responderle, solo le miraba con ojos amenazantes. — Estás perdiendo la maldita cabeza.— Y tras decir esto, se levantó y se fue, no sin antes cerrar de un portazo.


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Jungkook no sabía cómo, pero siempre acababa en el mismo sitio. Una vez más, estaba sentado en un nuevo juicio, Tenía una sensación rara en el cuerpo, pero no eran nervios, ya no se ponía nerviosa de tantas veces que había ido. Por lo tanto, probablemente su malestar era del cansancio, de no haber dormido la noche anterior, debido a su inesperado encuentro y la batalla con Jin.

— Damos paso a una nueva sesión.— El juez, golpeó el mazo contra la mesa y se sentó mientras colocaba de manera correcta un tocho de folios.— En el día de hoy, tenemos nueva pruebas. — La sala entera se cubrió de murmullos. Jungkook pudo notar que Jin se tensaba al verle tragar saliva, pero no perdió la compostura.— Tras una segunda revisión de las pruebas. Hemos encontrado unos pequeños restos de sangre en el coche de Jungkook.— En ese mismo instante, todas los ojos se posicionaron sobre el acusado.

Inmediatamente, el abogado de Taehyung intervino. — ¿Lo ve, señoría? Todo este tiempo mi cliente era inocente. Este individuo. — Apuntó con su dedo hacia Jungkook. — Siempre fue el culpable, y le dió igual que acusaran a un pobre inocente que encima acababa de perder a su hermano.— Durante esto, Taehyung se encontraba con la cabeza cabizbaja, no se habia inmutado en ningún momento.— Por eso mismo se nota que tiene sangre fría, si pudo hacer eso pudo matar a ese pobre chico también.

Jungkook se clavaba las uñas en la piel para intentar no saltar, a la vez que, en su cabeza contaba hasta 10 como le habían dicho. Pero, pareció no funcionar esta vez porque apoyó fuertemente sus dos manos sobre la mesa, llamando la atención de todos los presentes, y se levantó quedándose apoyado en estas. — Yo no maté a Jimin. — Tuvo una pequeña pausa.— Jimin está vivo.

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⏰ Última actualización: Oct 26, 2023 ⏰

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Traidor ² | VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora