¡No me toques! -Bajifuyu

12 - Una tranquila reunión

Respire lentamente por un par de minutos antes de entrar a la ducha e intentar deshacerme de las emociones abrumadoras que habían invadido mi cuerpo en cuestión de minutos. Desgraciadamente todo fue en vano. Comencé a llorar apenas el ruido del agua cayendo fue suficiente para disfrazar mis sollozos.

Sinceramente no entendía el porqué de mi llanto. Cada noche cerré esa puerta y cada mañana seguía cerrada. Baji es cuidadoso al estar cerca de mi, evita tener contacto físico conmigo, no me presiona y me da mi espacio. Debería aliviarme el saber que, aun teniendo la posibilidad de hacerme daño, no lo ha hecho, y hasta parece desagradarle la idea.

"Tal vez me recuerda un poco a Hiroki"

Quiero creer que Hiroki no fue un bastardo todos estos años, que no fui tan idiota para enamorarme de alguien como él. Puedo jurar que al inicio él no era así.

Cuando todo comenzó él era tierno y atento, se preocupaba por mi y velaba por mi seguridad. Hiroki me prometió el sol y la luna, una vida sin miedos u obstáculos. Me prometió a mi, un chico alegre y bromista, un mundo perfecto. Le creí cuando dijo que mis amigos no me hacían bien. Le creí cuando me aseguró que alejarnos de casa nos haría más felices. Le creí cuando me humillaba, cuando me golpeó por primera vez y dijo que era mi culpa... le creí cuando dijo que a ambos nos gustaba el sexo así, incluso si dolía.

Ese último día, el día que hui no fue la primera vez que cuestione nuestra relación. Llevaba meses y creo que incluso poco más de un año haciéndolo, pero de alguna forma él siempre lograba convencerme de que todo estaba bien, y que si no lo estaba, entonces todo mejoraría.

Finalmente corrí lejos y quiero creer que ahora soy capaz de darme cuenta sobre algunas cosas. Aun necesito ayuda para darme cuenta de otras tantas y se que lo que tuve con Hiroki aún no ha acabado por completo. No se si me está buscando o si simplemente se ha olvidado ya de mí.

Y ahora... Baji es amable y cuida de mí, me apoya y busca ayudarme, pero... ¿no fue así Hiroki en algún punto de nuestra historia? ¿Qué me asegura que Baji no se volverá en algún momento como él? No se cuanto tiempo Baji y yo estaremos coexistiendo en un mismo espacio, pero supongo que el miedo sigue ahí. El podría cambiar para mañana, o incluso en unos minutos.

- No pienses en eso Chifuyu- me dije a mi mismo al salir de la ducha - Vas a ir a esa pequeña y tranquila reunión y harás lo posible para pasarla bien.

Cubrí mi cuerpo con una toalla y entreabrí la puerta, al no ver a Baji cerca, corrí lo más rápido que pude a "mi habitación". Al llegar cerré la puerta con seguro y caminé directamente a la cama donde me recosté a pesar de aún estar desnudo. No duré demasiado en esa posición y comencé a vestirme con algunas de las nuevas prendas que habíamos comprado esta tarde. Eran holgadas, pero no tanto como las de Baji. Realmente no presté atención a lo que elegí.

Las primeras noches el de pelo largo se aseguro de darme algunos productos básicos de aseo personal que realmente agradecía. Al terminar de vestirme, camine directo al espejo del armario y me observe durante un par de minutos.

Mi cabello aun seguía algo húmedo y verlo ahora en su gran mayoría rubio era extraño. Durante mi adolescencia teñir mi cabello fue una de las cosas que eran comunes para mi. Pero cuando Hiroki llegó y dijo que a ambos nos gustaba más de negro, mi color natural, le crei. Verme ahora así era... casi irreal.

Por otro lado, mis ojos se veían un poco rojos por el llanto de recién. De ahí en más, seguía siendo el mismo de antes.

Cansado de mi reflejo, decidí que era momento de salir de la habitación y volver al sofá a esperar a Baji quien, por el ruido de la ducha, obviamente aun no estaba listo para irnos.