VII

74 7 0
                                    

Estaba anocheciendo, el clima era estupendo ya que pronto comenzaría la primavera y el viento se sentía muy bien en la piel mientras caminaba hacia mi casa con la ayuda de mi GPS después de esa extraña tarde con el chico misterioso en el que he descubierto que realmente es Jeno.

Luego recordé que no leí ni un poco del manga que había escogido y que con tanto esfuerzo bajé del estante, conmigo incluido haciéndome pasar por un acontecimiento vergonzoso, y todo por culpa de la distracción que esa persona causaba en mi últimamente, si, era guapo, todos lo sabemos, pero no entiendo si me produce más curiosidad que sea una persona totalmente distinta cada que estoy con él a solas o el hecho de haber escuchado todos esos comentarios del dúo diabólico en la escuela y que con mucho entusiasmo mis amigos me advierten de ellos. Y al pensarlo con más detenimiento mientas paseo por las calles, hizo que me preguntara si es que los demás se equivocaban sobre ellos al juzgarlos de esa forma (al menos a Jeno) o si realmente eran lo que se dice en los pasillos, y solo me estoy dejando engañar por el simple hecho de que han mostrado cierto grado de simpatía hacia mi persona desde que llegué.

Perdido en mis pensamientos noté que ya estaba frente a la puerta de mi casa y comencé a buscar mis llaves, abrí la puerta del frente, dejé mi chaqueta y mis zapatos en la entrada para saludar a mi madre que ya había llegado a casa y estaba en la sala viendo la televisión.

- ¡Hijo! Estaba a punto de llamar a la policía... ¿estas bien?

- Estoy bien, solo estaba en una librería que encontré por internet.

- Na Jaemin...

Le besé la mejilla y me senté a su lado mientras ella posaba su brazo en mi para abrazarme mientras seguía viendo la televisión, pero siguió dándome un discurso.

- Te llamé y no contestabas. Tu hermana me dijo que no te había visto.

- Ooh, pero mi celular no sonó en ningún momento ma. Y esa despistada de Haneulie no vería ni a un dinosaurio si se le pasara por delante.

Reí con mi madre que asintió, todos sabemos que mi hermana vive en su propio mundo.

Saqué mi móvil del bolsillo y ahí estaba la evidencia, claro que nunca lo escucharía si el aparato estaba apagado. Esto debió ser culpa de Jeno y sus infinitos mensajes que agotaron la inexistente batería de mi celular que rara vez suelo cargar.

Después de ver unos episodios de la serie dramática de mi mamá que debo admitir que me encanta, subí a mi habitación para darme una ducha y cargar mi celular antes de cenar. Conecté el cable del cargador y encendí el móvil, pero enseguida comenzó a vibrar con millones de notificaciones de todo tipo que habían estado llegando durante todo el tiempo en que estuvo muerto.

Jeno: Lo de guardar el secreto va enserio... [18:10]

Haneul: Oye, ma está preguntando en donde te metiste, y la verdad yo también tengo curiosidad porque vi a tus amiguitos, pero sin ti... [18:20]

Hyuck: ¡¡¡Amigo no sabes a quien vi como un simple mortal!!! [19:00]

Ay no... Hanie realmente me vio y si mi hermana tiene curiosidad entrará a mi habitación en cualquier momento y así fue. La puerta se abrió hasta atrás a los minutos de haber abierto la puerta de mi cuarto, y allí estaba ella parada en el umbral de mi puerta con ansias de saber en dónde me había metido después del instituto.

- Claro, pasa, adelante... siéntete con en tu habitación.

Voltee los ojos mientras movía mi cabeza en desaprobación por la exagerada reacción de mi hermana.

Dulce Trofeo | Nomin | NorenminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora