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Ha pasado una semana desde el suceso de la carta que Goh encontró, también una semana desde que ni Chloe ni Ash saben que hacer para saber que le ocurría a Goh.

—Ash, papá los necesita a ti y Goh— Chloe llegó corriendo al parque Cerise, en donde Ash se encontraba entrenando a sus Pokémons.

—Bien, ya voy; todos regresen— Guardo a sus Pokémons en sus pokebolas, y con Pikachu sobre su hombro, se retiró.

Ya en la sala de investigaciones se percató de las imágenes en los monitores y también de que Goh no estaba.

—Profesor, ¿Mandó a llamar?— Habló para que se dieran cuenta de su presencia.

—Si Ash, ¿Pero y Goh?— Frunció el ceño al ver que Goh no venía junto con Ash y Pikachu.

—Papá, no encuentro a Goh en ningún lado— Chloe llegó con una mueca se de preocupación.

Al escuchar eso, la expresión facial de Ash cambió a una de preocupación. Sacó su smarthrotom.

—Rotom, llama a Goh— Dio la indicación al aparato.

Su smartphone seguía llamando a Goh, pero al parecer dicha llamasada no será contestada.

—Nada; iré a buscarlo— Sin decir nada más, el joven chico salió de las instalaciones Cerise.

—Papá, yo también lo iré a buscar— Chloe no espero una respuesta y también salió corriendo.

|•|•|•|•|•|

Mientras tanto en otra parte de Ciudad Carmín, cierto jovencito caminaba por el bosque junto a su Cinderace.

El Pokémon de tipo fuego miraba con preocupación a su entrenador, no le gustaba verlo tan decaído.

—Ni sé porque me afecta tanto, ni que fueramos los mejores amigos— Murmuraba el de ojos azules con la mirada baja.

Las lagrimas no tardaron en hacer presencia en el rostro del menor, Cinderace se preocupó más y abrazo a su compañero.

—¿Qué hace un torpe aquí solo?— Se escuchó una voz femenina.

Cinderace se puso en modo de defensa, dispuesto a proteger a su entrenador.

—¿Quién anda ahí?— Pregunto con algo de temor.

Tres sombras aparecieron frente a él; dejándose al descubierto, era el Equipo Rocket.

—¿Y el otro torpe con Pikachu donde está?— Pregunto James con un tono soberbio.

—Si, ¿Dónde dejaste a tu amigo igual de torpe?— Pregunto el Pokémon parlanchín.

Goh enfureció al ver a esos tres, no estaba de humor como para lidiar con esos dolores de cabeza.

—Escuchen Equipo Rocket, no estoy de humor para ustedes así que de buena forma les pido que se pierdan— Grito con euforia.

—¡Cinderace, usa balón igneo!—

La fuerza del ataqué fue tan fuerte que de un solo ataqué mandó a volar al Equipo Rocket.

Después de eso, nuevamente las lágrimas brotaron de los ojos del Moreno al recordar nuevamente todo.

—¡Goh!—

Al escuchar su nombre, volteó para encontrarse a Chloe corre hscia su dirección.

—¿Chloe?—

Tu Carta, Tu CulpaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora