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Las palabras dichas por el joven entrenador de Pueblo Paleta dejaron nublado la mente del ojiiazul.

Parpadeo la varias veces para salir de su trance.

—¿Qué dijiste?— Pregunto para saber si había escuchado bien.

—Lo que escuchaste, tú me gustas— Bajo la mirada con una sonrisa nerviosa, al decir eso.

—No, creo que te estás confundiendo— Solo atinó a decir eso con un tono nervioso.

—Estoy seguro de lo que digo, me gustas desde hace tiempo— Afirmó seguro de sus palabras.

El de Pueblo Paleta se acercó al menor, haciendo que la espalda del otro chocará contra el tronco del árbol.

Las miradas de ambos chocaron, un brillo único había en ambas miradas. Sus cuerpos temblaban.

Ninguno sabía que decir, las palabras parecían no querer salir. Sus latidos eran acelerados.

Había una corta distancia entre los labios de cada uno. Aún son muy jóvenes, pero saben bien lo que quieren.

La distancia era cada vez menos, sus labios casi rosabam entre ellos. Hasta que sucedió.

Sus labios se unieron en un tierno y inexperto bebeso, un beso que ya ambos deseaban desde hace tiempo.

Al sentir la falta de aire, sus labios se separon. Volvieron a conectar sus miradas, pero ahora una sonrisa era dibujada en sus labios.

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—Fue lindo verlos otra vez— Decía Dawn con una sonrisa.

—Y a mi me alegro por fin conocerte, Goh— Ahora hablo la chica de Hoenn.

—Digo lo mismo, May— Abrazó a la castaña ñ.

—Si no abordamos el barco ahora nos deja— Ash agarró la mano de Goh para arrastrarlo al barco. —¡Adiós chicas!—

—Bien hecho May, misión complidad— Una alegre sonrisa se dibujó en los labios de Dawn. Grito. —¡Me saludan a Chloe!—.

—El Equipo Rocket ayudó mucho— Argumento May.

En el barco, la pareja recién formada se encontraba con sus pokemons en el comedor del barco.

—¿Le diremos a los otros cuando lleguemos?— Pregunto el de piel morena.

—Si no te sientes listo, podemos esperar— Ánimo con una ladina sonrisa.

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—¡Llegamos!— Gritaron ambos chicos, ingresando a las instalaciones del laboratorio Cerise.

—Bienvenidos Ash y Goh— Chloe fue la primera en recibirlos. —¿Cómo estuvo el viaje?—

Ash y Goh se miraron entre sí, asintieron al saber lo que pensaba el otro.

—Chloe, tenemos que contarte algo— Hablaron al unísono.

Próximo capítulo, el final.

Tu Carta, Tu CulpaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora