🔸17🔸

2.1K 306 50
                                    

No quiero ir a trabajar. No tengo ganas. He dormido poco, estoy cansado y tengo el ánimo por el suelo. Chan se enojó conmigo cuando le dije que estoy así por una pelea con Jungkook. Sé que me está haciendo el favor de guardar mi secreto y a cambio debería esforzarme mucho más en mi trabajo, pero ¿qué caso tiene si quizás mi relación con Jungkook ya se acabó? Ya no hay secreto que guardar. 

Me quedo en la cama por hoy. Mi padre se quiso quedar a hacerme compañía anoche pero no lo dejé porque con cada cosa que me dice siento que está más del lado de Jungkook que mío. 

Solo quiero estar solo y no ver a nadie. 

Sin embargo, cuando suena el timbre de mi apartamento, me levanto corriendo a abrir.

¿Es Jungkook? ¿Vino a verme para intentar arreglar todo como la última vez que peleamos? En el fondo de mi corazón espero que así sea.

No obstante, cuando abro la puerta me encuentro con Jun. No era lo que esperaba…

— ¿Qué haces aquí? — pregunto.

— Chan me llamó. Dijo que te escuchó mal y que peleaste con Jungkook — responde y entra al departamento. — Debe haber sido grave para que no quieras ir a trabajar.

— No quiero hablar de eso ahora— le pido. No quiero tener que revivir todo de nuevo. — Quisiera estar solo ahora, por favor.

— ¿Qué te pasó en el dedo? — pregunta cambiando de tema al ver el vendaje improvisado que me hice anoche. Mi padre quiso revisarme pero no lo dejé y no lo he tocado desde entonces. 

— Nada, me corté con un cuchillo. No pasa nada. 

— No pasa nada un comino. Siéntate — me ordena. 

Va al baño y regresa con el botiquín de primeros auxilios. Lo pone sobre la mesita en mi sala y se sienta en el sillón.

— En serio, no es nada — insisto. 

— Ven aquí — me dice serio. Obedezco porque me intimida cuando se pone así.

Me siento a su lado. Me toma la mano y empieza a quitar el vendaje con mucha delicadeza. Aunque igual me duele.

— ¿Qué te pusiste? ¿Cómo siete banditas? — se queja.

— Es que sangraba mucho…

— ¿Lo desinfectaste? 

— Uh, no, solo hice presión. ¡Ouch! — me quejo cuando quita la bandita final y deja al descubierto la herida. 

El corte se ve horrible pero al menos ya no sangra.

— Vaya, ¿quisiste amputarte el dedo y te arrepentiste a mitad de camino? — me regaña. Lo dijo como chiste pero en realidad está enojado. — Jimin, esto es profundo y se ve muy mal. ¿Cómo no lo vas a desinfectar? Ni siquiera lo has lavado.

Me levanta y me lleva de un tirón al baño. Abre la canilla y pone mi dedo bajo el agua fría.

— Uh, arde… — le digo. 

— Te la aguantas — me calla y limpia mi herida con mucho cuidado. 

— ¿Por qué estás tan enojado por un corte? 

— ¿Crees que esto es lo que me enoja? — me mira serio.

Termina con el lavado, me seca y me lleva de regreso a la sala. Usa las cosas del botiquín para desinfectar mi dedo. Me duele y yo estoy al borde de las lágrimas pero no por esto, sino por todo. Por Jungkook, porque me imagino todo lo que Jun me va a decir. Porque estoy cansado y se siente bien dejar que alguien me cuide así.

Chico popular - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora