No Puedes Huir de Mi

Capítulo 12: "Nuestra Felicidad"

Aesop Carl

Es aburrido estar en el hospital, desde que desperté me dijeron que el ataque que me dio fue demasiado fuerte, casi me mata a mi y a mi bebé, así que me toca quedarme en el hospital los meses que me quedan, es más aburrido de lo que suena, Joseph se queda todo el día, me compra las tres comidas diarias, ya que no confía en la comida que dan aquí, y yo me quedé callado, debo estar lo más quieto posible, y en la noche se va, aunque veo que no le gusta estar solo, siempre que llega a la habitación me dice lo mucho que me extraña.

Con respecto a mi hermana, Joseph está muy enojado, yo no sé en que pensar, que mi propia hermana me causara esto y me dejara como si nada, Naib me confirmo todo cuando me visitó, él y Jack me visitan dos veces a la semana, es lindo, además a veces no me aburro tanto, cuando me dejaron escuchar el corazón de mi bebé, me sentí feliz, fue una noche así que Joseph se lo perdió, pero no le dije nada, eso es secreto entre el bebé y yo, cuando nos dijeron el sexo del bebé, nos pusimos felices, un varón... ahora tenemos que pensar en el nombre, aunque siendo honesto, no sé que nombre ponerle...

Joseph: Amor- le presté atención mientras tomaba juicioso mis medicamentos- sé que te vas a quedar aquí hasta que nuestro bebé nazca y quería pedirte dos cosas- pausé un momento y le presté atención- uno es que quiero decorar la habitación de nuestro hijo, y la segunda... ¿te casas conmigo?- sonreí, jamás me esperé este tipo de confesión.

Aesop: Claro que si- lo abracé- aunque te tardaste mucho, ¿ no crees?- escuché como se reía a carcajadas, y un movimiento hizo que miráramos mi estómago que ya está bien grande- ¿lo sentiste?- asintió con la cabeza y colocamos nuestras manos para sentirlo, pasaron unos segundos y....- una patada- y más después de esas, pero eran suaves- está pateando- algunas lágrimas salieron de mis ojos...

Joseph: Hola hijo- lo abracé y nos quedamos juntos, le hablábamos a nuestro niño y nos respondía con patadas, cuando no le gustaba pateaba fuerte que me dolía, pero no era nada grave, al final del día Joseph se fue, terminé de cenar y ya me dejaron en reposo, en otras palabras nos dicen "hora de dormir"

Desperté y eran las once, mi habitación estaba oscura, pero no tanto ya que la luz de la luna entra por la ventana, sentí las patadas de mi hijo y acaricié mi estómago, sentí como se acomodaba para sentir mis caricias, eres adorable bebé, me pregunto como a quién más te vas a parecer, no quiero que seas tan serio como tu padre, pero tampoco tan sensible como yo, quiero que tengas un poco de ambos, que seas honesto, respetuoso... un caballerito, eso quiero que seas, me acomodé mejor para dormir y abracé a mi bebé, hijo mío, te quiero mucho.

Joseph Desaulniers

Después de visitar a Aesop, regresé a casa, abrí el libro que usé para atormentar a las personas que maté y me propuse matar esta noche a Fiona, no quiero que mi futro esposo e hijo sufran por ella, Aesop está triste por eso, pero un día me dijo que era mejor que dejara de hablarle y verla, eso me hizo feliz, además, resulta que ella llegó una mañana un poco antes que yo, trataba de advertirle a Aesop y casi se le tira encima, las enfermeras la sostuvieron y cuando yo llegué me pidieron que me quedara en el cuarto con Aesop, después de un tiempo nos dijeron que, según los exámenes de ella, ya no tenía ninguna estabilidad mental, y Aesop firmó los papeles para mandarla al manicomio, aunque le dolió claro, pero hizo la decisión correcta.

Ahora, yo, esta noche, voy a hacer que desaparezca de nuestras vidas de una buena vez, sé que se encuentra en el cuarto piso, sala cinco, no sale mucho debido a que cuando lo hace, la meten enseguida a la sala acolchada, dicen de ella que siempre que sale le dan ataques esquizofrénicos, ahora es momento de irse...

Bien, al parecer está despierta, mira por la ventana con la esperanza de salir, pobre, no verá otro amanecer, vi que tenía una de las jeringas, y está llena una sustancia, será sobredosis entonces, hice que se dirigiera a esa zona y "coloqué" la aguja en su cuelo, el líquido entró por ahí y vi que habían cuatro bolsas de ese medicamento, esas cuatro bolsas entraron en su sistema, y al poco tiempo cayó al pip, su cuerpo se tensó totalmente y explotó, literalmente sus órganos se salieron de su cuerpo, nada mal.

Al día siguiente...

Al estar con Aesop y mi bebé en el hospital, nos dieron la noticia de la muerte de Fiona, Aesop no lloró, pero si sintió lástima, que por cierto le duró media hora, después de eso nos centramos en nuestro bebé, que por cierto, su nombre es Edgar.

Hasta el próximo capítulo....