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04: Memoria

- Emma? - El pelinegro seguía en shock mientras veía a la rubia si poder creerlo, era ella ni más ni menos solo que un poco más grande.

- Quien eres y porque sabes mi nombre.

- Esto debe ser una puta broma

La rubia seguia incrédula por nombrar el nombre de ella, aquel desconocido sabía algo pero antes de hablar fue abrazado repentinamente.

- Cuando Mikey te llevo al hospital no lo podía creer, estabas fria, pálida,  sin vida, no sabía que hacer, pero volviste con nosotros.

De repente el abrazo se rompió.

- Mi nombre es Emma Sano, quien es usted, hable ahora o llamaré a Sanzu y te cortará la puta lengua - la mirada era filosa ,sabia que la joven no iba de broma peor escuchó el nombre de Sanzu, era el, el subcapitan de la quinta división de la Toman.

- Ryugüji Ken , me dicen Draken.

- Como sabes mi nombre?

- No eres ella, verdad? Pero te llamas igual y eres igual a ella,  que mierda hizo Mikey - el pelinegro río para sus adentros, la locura que hizo su amigo era impresionante,  aunque ya no lo veía desde hace doce años todavía podía confiar en la inexistente cordura que tenia.

- Como sabes de mí hermano, espera, eres Draken? el subcapitan de la Toman! - La rubia estaba asombrada,  el mundo era pequeño.- Antes de que empieces a decir tonterías, Mikey dijo que era parecida a su hermana y decidió darme un hogar, no hizo nada para que me parezca a ella.

- Con que es así, yo amaba a Emma, perdón por lo reciente fue algo fuerte ver a alguien igual a ella y que se llame igual.

- No es tu culpa - la rubia se estaba por retirar pero Draken la detuvo.

- Creo que si eres Emma, esto te pertenece, sígueme.

El pelinegro la llevo al cuarto para darle un pequeño oso, era muy tierno, sintió las lágrimas salir pero las reprimió, estaba feliz por alguna extraña razón.

- Gracias Draken-Kun.

Antes de poder seguir se escucharon los gritos de Sanzu, entrando frenéticamente.

- Mi reina!

- Que pasa?

- Como no me di cuenta antes, este lugar es de Draken e Inupi , el jefe me matará!

- Draken puedes venir con nosotros?

La rubia tenía una idea, no muy segura, pero quería que su hermano y su antiguo amigo puedan tener una plática.

- Que planeas?

- Es una sorpresa Sanzu, llévanos al auto por favor.

- Pero mi rey...

- Es una orden Sanzu.

- A sus órdenes

Se había dirigido al auto no sin antes despedirse de Seishu que entendió la situación no sin antes alterarse por no poder reconocer a Sanzu.
El silencio era incómodo para los tres, sabiendo que iba a ser un poco largo el viaje , decidió hablar.

- Es difícil ser ella? - Draken pregunto con nostalgia en sus palabras.

- Es... un sueño, puedo recibir afecto que nunca tuve aunque me aprovecho de la situación tal parece.

- Mi reina, usted es la nueva luz del Rey, por favor no se menosprecie. - Hablo Sanzu mientras conducía.

- Tiene razón, Seguramente el está bien sabiendo que ella descansa en paz y no se atormenta.

El viaje transcurrió pacíficamente hasta llegar  a la mansión, era alejada de la ciudad pero era para mayor seguridad del jefe y de los altos mandos.
Bajaron del auto y entraron a la mansión, no sin antes acatar el plan de la rubia.

- Draken

La rubia lo agarró del brazo mientras daba una mirada de paz, tenia que hacer algo para no recibir un regaño por traer alguien así sin más a la mansión.
Toco tres veces la puerta hasta escuchar un adelante.

- Hermano...

- Emma.. que está pasando- el Albino seguia de espaldas.

- Mikey te presento al hombre que me ayudó, quería saber si se lo podía recompensar con algo.

- Claro! Déjame ver-

Manjiro estaba petrificado al ver a su hermana con su antiguo amigo, agarrada del brazo pensó.

- Mikey

- Draken , que estas haciendo aquí?

- Me encontré de casualidad en el taller con Emma y me dijo  que quería recompensarme por ayudar.

- Con que es eso.

- Emma retírate.

-Pero mikey yo también quiero-

- Retírate. 

El ambiente tenso asustó a la rubia por lo que se fue rápidamente acompañada de Sanzu quien se veía triste por la joven.

-No tienes que ser duro con ella.

- Ken-chin  porque la seguiste.

- Porque se parece a ella y me dijo que quería que tu hablaras conmigo.

- Cuando los vi entrar recordé nuestra juventud, quería ser tío de sus pequeños pero ahora se que es imposible, fue un lindo recuerdo pero sabes que somos de mundos diferentes. 

- Tienes razón pero... al menos deja que los otros la conozcan.

- Esta bien, pero quiero estar con ella.

- Mikey, volverás con nosotros?

- si.

Una decisión apresurada de Manjiro pero para bien.

La Suplente - Tokyo Revengers || Finalizado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora