5. (MARTES) el lago

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Julia se despertó se asomó al balcón, y respiró profundamente, estaba enamorada, no se podía creer lo que le estaba pasando, lo acababa de conocer pero sus ojos azules ya le habían dejado enganchada, hacia un bueno día, el sol relucía en lo alto del cielo, los pájaros volaban y cantaban al ritmo de los sonidos de la calle, los coches, las personas, los músicos callejeros... Todo estaba en armonía, menos su corazón, que acaba de acordarse de Rafa, ¿Que es lo que iba ha hacer? No lo tenía del todo claro, pero lo que si sabia era que tenía un hambre tremendo, y que quería tomar un vaso de leche con mucho cola cao.
-¿Que tal habeis dormido?- Dijo Diego.
-Pues espero que bien, porque hoy vamos pasar el día en el lago de Garda, haremos senderismo por la zona, haremos un recorrido en barco por el lago, y mas tarde haréis actividades que han preparado unos monitores especializados, saldremos a las 12, coger todo lo que necesitéis, llevar ropa cómoda, volveremos sobre las 8 de la tarde. -Dijo Juan.

Los chicos se prepararon y fueron en autobús hasta la entrada del pueblo de Garda, allí les esperaban los monitores y... Víctor.
-Hola chicos, nosotros somos Giovanni, Valentina y Víctor.-Dijo el primero de ellos.
-Vamos a ser vuestros monitores. Vamos a estar todo el día con vosotros, y durante esta semana también volveremos a vernos, primero vamos a explicaros lo que vamos ha hacer.- Dijo la chica.
-Primero, haremos el paseo en barco por el lago, y cuando acabemos iremos a comer a una zona de picnic, sobre las 4 daremos una vuelta por el pueblo, y a las 5 y media empezaran las actividades, haremos una gyncana por el pueblo, jugaremos a juegos tradicionales como el pañuelo, o carreras de sacos, y a las ocho volveremos al hotel. ¿Alguna pregunta?- Dijo Víctor sin quitarle ojo a Julia.
-Si.- Respondió Lucia decidida.- ¿Cuantos años pensáis que tenemos?
Toda la clase rió por el comentario que había echo Lucía.
-¿7?-Respondió Víctor sonriendo. -Sabemos que quizás os parezcan juegos de niños, pero ya veréis que lo pasareis muy bien y os daréis cuenta que de vez en cuando, tenemos que recordar nuestra infancia.
-Venga, no perdamos mas tiempo. -Dijo Giovanni.
Los muchachos fueron camino al puerto, en el que cogerían el barco turístico para ver el lago.
-¿Que haces aquí?- Le dijo Julia sorprendida a Víctor.
-Hola, Buenos días.- Le respondió Víctor, en tono sarcástico.
-Perdón, Hola Víctor.
-Hola. Le he pedido a mi padre que me deje venir con vosotros como monitor, y aquí estoy.
-y ¿por qué lo has hecho?
-Para verte.
Este ultimo comentario hizo que las mejillas de Julia cambiaran de color al de los tomates.
-No es la primera vez que lo hago, alguna vez he trabajado como monitor.
- ¿También porque querías ver a alguna clienta de tu padre?-Dijo con tono pícaro.
-No.-Le respondió riendo.- Para ganarme un poco de dinero.
Julia sonrió y siguió caminando hacia delante. Mientras tanto Rafa hablaba con Jorge.
-No me lo puedo creer, esta en todas partes, ese, ese!! Seguro que es un acosador que la persigue porque esta obsesionado con ella, y Julia, la inocente no se da cuenta, como le haga algo, yo, yo..... le mato!
-tranquilízate!
-No puedo, es que la miro y....
-Pues no la mires ahora...
-¿por?
Cuando se giró vio a Julia y a Víctor cogidos de la mano, y muy apegados. Lo que le faltaba a Rafa, para explotar.
Subieron al barco que también era submarino, cada uno cogió un sitio y se sentó a escuchar las indicaciones de los monitores. El barco se puso en marcha, a Julia se le revolvió el estomago, nunca se había subido en un barco. Además la si situación no era muy buena, le había tocado sentarse entre Rafa, y Víctor, la peor de sus pesadillas.

-El Lago de Garda, o Lago de Benaco, es el mayor lago italiano y uno de los más afamados lagos turísticos del norte de Italia. Tiene una superficie de 368 km², con una longitud de 51,6 km y una anchura de 17,2 km. Es un lago glaciar que se formó al final de la última glaciación....- Explicaba Giovanni. - Y ahora bajaremos y podremos ver la fauna de este lago.

Mientras todos bajaban a la zona submarina del barco, Víctor disimuladamente se quedo al final de la fila, y cogió a Julia.
-¿Que haces?-Gritó Julia.
-Shhhh.
Cuando todos estaban abajo y nadie les podía ver ni escuchar, Víctor le explicó sus intenciones.
-Lo que van a explicar es muy aburrido, quédate aquí conmigo y así hablamos.
-Vale.- Dijo Julia nerviosa.
-Ven conmigo.
-¿A don...?

A Julia no le dio tiempo a acabar la frase, cuando se encontraba en la proa del barco, el paisaje era precioso, se acercó a la punta, y todo el aire le daba en la cara, habitaba un silencio, que solo rompían las aves que volaban sobre ellos, era como estar en el paraíso.
Abrió los brazos, y sintió como el viento frío recorría su cuerpo, entonces sintió el calor, un calor que recorría su espalda, y acabó posándose en su cintura. Víctor la tenía agarrada como en su película favorita, Titanic. Otra sensación, esta recorría su cuello y le apartaba el cabello. Sintió los labios de Víctor, en su cuello, subían para arriba, la mejilla, la barbilla y finalmente su boca. Sus labios se juntaron, como en los libros de Nicholas Sparks, que tantas veces había leído, y nunca pensó que llegaría a vivirlos; con dulzura y amor.
Sintió magia fluyendo por su boca, sus labios empapados de saliva, prohibían el paso, hasta que se dejo llevar y sus lenguas se rozaron.
-Me gustas, y mucho.- declaro Víctor.
-Tu a mi también.
Y volvieron a saltar chispas. Ambos estaban disfrutando este beso, pero lo que no sabían es que había alguien, que lo estaba sufriendo tanto que decidió escapar de aquel momento de la peor forma.

-Te quiero.- susurró por ultima vez.

-¿Qué ha sido ese ruido?- Gritó Julia alertada.

Va por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora