Mátame Lento // Choni

6

Toni tomó su teléfono y lo dejó en su mesa de noche.

-Cariño. - Habló, con una sonrisa. - ¿Crees que voy a cambiar a Betty por una sola noche de ego contigo?

-No será solo una noche. - Dijo Cheryl, colocándose sobre su esposa, apoyándose sobre sus rodillas y manos, quedando cara a cara. - No te voy a permitir que repitas lo de este mes.

-¿O qué? - Toni frunció el ceño, solo milímetros separaban sus bocas. - ¿Se van a dar cuenta que quién me arranca gemidos no eres tú? ¿Qué no eres la tigresa que todos creen en la cama?

Cheryl no lo soportó más, estampó su boca contra la de Toni furiosamente. Los dedos de la más baja rasparon con sus uñas el cuello de Cheryl en un intento de que se apartara.

-Si crees que esa imbécil lo hace bien... - Susurró empezando a quitarle rápido y un poco torpe la camisa que llevaba. - No me has conocido.

-No quiero hacerlo. - Habló, tomando una de las almohadas para golpearla con está en la cabeza.

-Deberías - Habló. - Porque no sabes lo que te espera.

Fue a su cuello besándolo, dejando marcas.

-Aléjate. - Gruñó intentado quitarla de encima pero Cheryl la tiró nuevamente a la cama, tomo sus muñecas para ponerlas encima de su cabeza.

Los besos fueron bajando, primero a su pecho, mordiendo y chupando los pezones que solo los cubría un sostén de encaje. Cuando llegó a su vientre, la pelirosa cerró los ojos.

-Llama a Betty, dile que la pasarás conmigo. - Susurró contra su piel, bajando un poco los pantalones.

-Cheryl... Prometes mucho - Toni tomó el celular en su mano girándose sobre su mujer. - Y he aprendido mucho en una cama - hizo que sus pechos rozaran con la camisa que llevaba la mayor mientras se incorporaba sobre su zona sensible, que sorprendentemente estaba empapada. - A usar los dedos como las mejores, a chupar como nadie, a dilatarme si tengo que... - Susurró, y cuando la pelirroja estaba sumida en sus palabras, se levantó rápidamente y salió de ahí. Encerrándola en la habitación.

-¡Toni! - gritó Cheryl del otro lado.

Toni no perdió tiempo. Se vistió con lo primero que encontró y tomó las llaves del auto de Cheryl para salir. Para cuando Cheryl logró salir gracias a la llave escondida en la habitación, su esposa ya se había ido.

Su celular sonó y con un gruñido contestó, escuchando una risa del otro lado.

-Ya no soy la misma estúpida, Cheryl. Si no te puedo tener a ti, no voy a esforzarme por intentarlo entonces.

-Estás jugando sucio, cariño

-¿No crees que tú lo hiciste conmigo? Durante tantos años, rogándote silenciosamente, acostándome sola en una cama que era para dos. Pero la estúpida de Toni solo quería el amor de su esposa la cual sólo se acostaba con zorras. ¿No te parece que eso si es jugar sucio, cariño?

-Espero que si tienes algo de conciencia no vuelvas aquí. - habló apretando fuertemente su teléfono. - Porque en cuanto pongas un pie aquí, tu vida será un infierno.

-¿Y crees que sigo teniéndote miedo? - Toni río del otro lado de la línea. - Eres solo una mujer, Cheryl. Solo eso, con mucho dinero una don nadie con mucho dinero. Y la mitad de eso es mío. Somos iguales.

-No iguales, tú estás empezando a ser una hija de puta. Yo ya lo soy, desde antes que nos viéramos cara a cara, ya lo era.

Cortó la llamada y gruñó. Suspiró y giró sus ojos hacia la habitación en la que Toni dormía.

//

Toni entraba al departamento de Betty, la misma que la recibió elevándola en brazos.

-¿Y? ¿Sucedió lo que te dije? - habló Betty sonriendo y Toni repartió besos por todo su rostro.

-Absolutamente todo... ¿Hoy lo intentamos en la cocina? - habló Toni, Betty mordió su labio inferior.

Se bajó y caminó quitando su suéter para tirarlo por ahí.

......

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