Mátame Lento // Choni

11

Decir que Toni no se sentía con miedo era una mentira.

-¿Betty?

-¿Mmh?

Toni se sentó en la cama y sintió las manos de su amante sobre su espalda.

-¿Qué pasa, cariño? - se sentó en la cama junto a ella y la abrazó para besar su cien - Has estado preocupada desde que llegamos.

La contraria asintió con la cabeza y se volvió a acostar. Desde que llegó solo estaba ahí, acostada con Betty.

-Cheryl mató a su padre.

-Eso nunca se comprobó, Toni. La policía nunca llegó a cerrar el caso.

-No lo digo porque lo escuché sino porque lo sé.

La menor se giró en la cama y se apoyó en el pecho contrario.

-Ella me lo dijo esta mañana - la vio fruncir el ceño - solo hablamos, Betty, no pasó nada.

-¿Entonces se puede saber donde te lasmitaste el labio de esa forma? ¿Y el moretón en tu mejilla.

Toni suspiró y se sentó sobre ella.

-No debes preocuparte, son cosas de nada.

-¿Cosas de nada? - Betty se recompuso en la cama y la miró enfadada. - Antoniette te está golpeando, te está maltratando. Aún cuando todavía son matrimonio no puede hacer eso contigo ni con nadie, no tiene ningún derecho. Toni, se donde trabaja.

-¡No! - colocó ambas manos en las mejillas - No quiero saber que has estado con Cheryl en su oficina o en algún otro lugar ¿entendiste? Cheryl es peligrosa y... - la interrumpió.

-¿Quieres que me quede sin hacer nada?

-No te pido eso, olvídalo, me estoy encargando.

-No quiero que te haga daño, cariño.

-No lo hará.

//

Toni llegó a casa nuevamente, el rostro insensible de Cheryl la recibió.

-Cámbiate, nos iremos.

-¿Irnos?

-A los Ángeles, tengo negocios que hacer allí.

-Yo no iré - respondió la pelirosa directa, subiendo las escaleras pero no pudo seguir, una mano firme la empujo hacia atrás.

-No es una pregunta, tampoco te estoy pidiendo permiso, te estoy diciendo que te cambies porque nos iremos ahora.

-Te dije que no voy a ir, deja de molestarme.

Cuando iba a empujarla hacia atrás, su esposa movió su brazo para dejarla contra la pared, haciendo que un sobre saliera volando, Toni bajo la vista y perdió el color se su rostro.

-¿Qué... haces con fotos de Betty?

-¿Acaso no me creías cuando te dije la primera vez que si estás conmigo es solo conmigo?

-¡Estás enferma! - gritó.

-Y mi padre no será el único muerto que me cargue si no me obedeces.

Toni tragó saliva y la empujó para tratar de tomar más aire de lo que sus pulmones permitían.

-Necesitas ayuda, Cher. Lo nuestro se está volviendo tóxico, necesitamos separarnos, no podemos seguir así, solo nos hacemos dañ... - sus palabras fueron cortadas cuando su esposa se abalanzó sobre ella.

Le acarició el cabello y sonrió.

-Ve, cámbiate de ropa que el viaje a los Ángeles nos espera, amor - susurró tan tierna... tan desquiciada.

La más baja asintió suavemente con la cabeza antes de subir las escaleras rápidamente y encerrarse en su cuarto. Tomó su teléfono y escribió un mensaje para Betty sobre lo que había pasado minutos antes, luego se puso lo primero que vio.

Se miró en el espejo, observando su labio partido por lo que había ocurrido la noche anterior.

-Seguramente vas a querer que nos acostemos de nuevo - murmuró a sí misma antes de salir.

La mayor ya estaba en el coche y Toni la siguió.

¿Acaso sus padres sabían quien era su esposa realmente?

-¿C-cher? - murmuró, la ventanilla que tenía vista a la cabina del chófer se subió así que solo estaban ellas dos.

-¿Ahora qué? - gruño la pelirroja.

-Necesitas ayuda... a donde llegaste es un extremo muy... no es normal Cheryl, da miedo.

-¿Creías que no era tan hija de puta? - la pelirroja la miró a los ojos, le sonrió fría, vacía. - Lo que tú me haces, yo puedo hacerlo el triple... y que realmente te haga llorar.

-¿Qué planeas? Yo no... Cheryl quiero el divorcio ahora más que nunca - respondió antes de quejarse de dolor. - ¡Cheryl, me duele!

La mano de su esposa estaba en los cabellos de su nuca jalando los cabellos de ahí duramente.

-Te dije que no iba a dejarte ir. ¿Qué parte no entiendes? Estás conmigo sin retorno, sin arrepentimientos. Te lo repetiré más claro para que lo entiendas. - acercó su rostro hasta que su boca estuvo en su oído. - Estarás conmigo, dejarás a esa basura de Elizabeth y serás mí puta.

-Cheryl no voy a hacer eso - jadeo la pelirosa de dolor.

-¿Quieres ir al funeral de Betty?

-Estás enferma - sollozó la menor.

-Nos encontraremos con una persona muy importante para las empresas Topaz. Le dije que podía acostarse contigo, buena suerte, cariño... - se burló Cheryl.