Mátame Lento // Choni

4

Una maldita cena social es lo que le esperaba en la casa del matrimonio Topaz-Blossom.

Elizabeth iba a estar ahí. Ella misma le dijo a Toni que se tranquilizara porque Cheryl no haría nada contra ella.

-Esta noche tengo una sorpresa para ti. - Habló la pelirroja, divertida.

Toni quería vomitar lo poco y nada que había comido. Lo único que la hacía sentir segura era el vestido que Betty le regaló. De color negro con bordados del mismo color, se puso un blazer del mismo color, era un atuendo sencillo.

-¿No vas a decir nada, señorita "quiero el divorcio"? - La diversión notandose en su suave voz.

-No puedo creer que seas así. - Gruñó Toni.

-Y yo no puedo creer que seas tan fácil. Pero descuida, tanto que me deseabas, tal vez me tengas esta noche. - Y dicho esto el carro se detuvo.

Toni se bajó rápidamente y caminó hacia dentro. Cheryl se unió a ella después.

Betty la estaba esperando con una copa más en su mano, Toni se dirigió a ella. Soltándose rápidamente del agarre de Cheryl. Se sentó al lado de Betty, feliz.

-Betts - Sonrió Toni, tomando la copa y mirándola a los ojos. - Viniste.

-No voy a perderme una oportunidad para verte... Estás preciosa, amor. - Susurró chocando sus copas, para que solo Toni escuchara.

La pelirosa ya se sentía en el cielo. Ignorando el hecho de que era la primera vez que Cheryl estaba observando su interacción.

¿Tan puta resultó ser Toni para andar como perro detrás de una tipa que solo le rompió la vagina? Oh, pero si se trataba de hijas de puta ella era la mejor. Se ganaba la vida siéndolo.

Y haciendo memoria en las cosas ridículas de su vida, se encontró de que ese mismo día era su aniversario. Debía aprovechar ese momento.

Tomó una copa y la alzó.

-¡Disculpen! - Habló atrayendo la mirada de todos, incluso de aquellas dos idiotas. - Hoy es un día muy especial para mi. Hoy hace algunos años decidí unir mi vida a la de mi amada esposa, Toni, mi preciosa y fiel Toni. - La miró y sonrió.

Betty frunció el ceño y Toni tragó saliva nerviosamente. Cheryl se acercó hasta ella y posó sus labios contra los suyos.

Toni liberó sus lágrimas.

-Te amo. Te amo tanto que daría lo que fuera por ti, lo daría todo. - Habló y la miró como si de verdad sintiera amor.

Toni se levantó de la silla y salió corriendo.

-¡Mi amor! - Habló Cheryl. - Bebé, regresa.

-Basta, Cheryl. ¡Estoy cansada de ti! - Toni giró y vio a las dos mujeres allí.

-¿Por qué mientes bebé? - Frunció el ceño, luciendo verdaderamente confundida.

-¿Toni? ¿Qué significa ésto?

Toni caminó hasta ella y la tomó de las mejillas.

-No es lo que crees, Betty. Ella no es así, Cheryl me odia, nosotros no nos amam... - Se vio interrumpida por la voz de Betty.

-Toni...

-No lo digas Betty, no lo hagas. - Rogó Toni devastada.

-Hazlo Betty, la cubierta de amante también la tengo ocupada. ¿Sabes cómo Toni gime como loca cuando está conmigo, su esposa, en la cama?

-Toni... - Betty se escuchaba algo cansada, y no es para menos.

-Es mentira, nunca la amé. Te amo a ti. - Toni se tiró a sus brazos y chocó sus bocas.

Cheryl se sintió molesta, celosa tal vez. Porque su cabeza le reclamaba que debía recibir aquello y no esa estúpida que estaba alentando a su esposa a ser libre... Libre lejos de ella.

-Por favor no te vayas. - Susurró Toni con lágrimas corriendo por sus mejillas y la voz quebrada.

-Anoche me dijiste lo mismo. - La voz de su supuesta esposa se escuchó tan herida que hasta ella se la creyó.

Betty gruñó y salió de allí, mientras que la pelirosa lloraba descontroladamente.

.....

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