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Capítulo 25

Esta vez quién se apareció fue mi papá, no sé como terminó sabiendo donde estaba viviendo con Peter, me lo encontré en la puerta, sus ojos estaban llenos de lágrimas.
-Lali-me llamó- ¿queres volver a casa? Con tu mamá queremos hablarte..
-¿Porqué ella no está acá?-traté de demostrarle de que no estaba afectada- ¿no tiene la valentía para venir ella misma después de como me hizo sentir?¡Estoy asustada papá! Y me dejaron sola cuando más los necesité..-mi voz finalmente se quebró.
-Por favor.. Vení conmigo, nos debemos una charla los tres..
Solté un suspiro y terminé sentada en el asiento del acompañante, no le hablé, me concentré en no soltar las lágrimas que tenía contenidas.
Fue un infierno mi viaje a La Plata, había clima de tensión, le avisé a Peter donde iba a estar, le pedí si podía venir cuanto antes.
Cuando llegamos a la puerta de la que fue mi casa mi papá me abrió para entrar, mi mamá estaba sentada en el living con la mirara perdida, cuando me miró supe que iba a ponerse a llorar.
-Perdón... Yo estaba muy asustada por vos..
-¡¿Y yo?!-me reí con ironía- ustedes dos nunca me soltaron la mano... Hasta que se enteraron de que estaba embarazada.. Sentí dolor, lloré, pero no quiero seguir llorando.. No merecen que siga llorándoles
Se me formó un nudo en la garganta, estaba siendo dura, pero claramente fui así porque quería que sientan un poco de lo mal que lo pasé.
Mis papás hicieron que me siente.
-Yo... -mamá no sabía que decir- perdón..
Suspiré, me hizo venir hasta acá para pedirme perdón.
-Tiempo, necesito tiempo..-últimamente por todas las cosas que me habían pasado estaba necesitando tiempo.
Nos quedamos en silencio, uno incómodo.
-Te compre algo...-mamá sacó de una bolsa un osito blanco-¿te acordas? Vos tenías uno igual..
La miré firmemente.
-¿Para todo este me hicieron venir?-me puse de pie-Peter tiene que estar por venir, en cualquier momento toca el timbre
-¿Queres tomar un té? Necesitamos hablar Lali-mi mamá se puso a jugar con sus manos, estaba nerviosa.
-¿Acaso no estamos hablando? Si no estamos hablando es porque a ustedes no se les está ocurriendo que decirme-elevé mis cejas, realmente quería calmarme pero estaba a la defensiva.
-Lali, somos seres humanos-mi papá me miró a los ojos-cometimos muchos errores en el pasado, antes y después de que vos nacieras, tuvimos mucho miedo.. Mucho.. Lo tuyo nos hizo entrar en estado de shock, no puedo justificar el no haberlo hablado antes, pero a lo que voy es que.. Podes contar con nosotros, esta vez cometimos otro error, nosotros te amamos hija.. Solo queremos lo mejor para vos
Tomé aire y solté un suspiro.
-Ok-instintivamente llevé mi mano a mi pancita, mis papás lo notaron y se quedaron maravillados, ni se habían detenido a mirar eso.
-Que linda mi amor..-mamá se emocionó, se puso de pie para acariciarla, dudo en hacerlo o no, terminé asintiendo con la cabeza, mi papá también lo hizo, se miraron entre ellos emocionados.
Sonó el timbre y se separaron de mi.
Mi papá fue hasta la puerta y entró Peter, saludó a mis papás con una sonrisa, de manera cálida.
-Hola de nuevo La-besó mi frente-¿queres irte ya?
-Vamos a tomar té, puede ser mate, café, lo que quieras..-mamá se adelantó- ahora somos familia, sos el marido de mi hija, van a tener un hijo juntos..
¿Cómo le cuento lo de mi marido para que no lo ataquen a Peter?
-Yo.. No estamos casados-empecé- historia larga
-Ya era sospechoso que no nos hayas invitado ni mandado una foto..-papá elevó sus cejas.
-¿Y el anillo?-mamá siempre tan observadora.
-Yo cometí un error muy grande cuando me reencontré con Lali.. No sé como decirlo-Peter me miró pidiéndome ayuda.
-Tuvimos un desencuentro.. Yo perdí la memoria, creí que estaba casada con Peter, y bueno.. El no me dijo nada, ya había pasado muchas cosas feas, me lo iba a decir..-elevé mis cejas mirándolo, pasándole factura.
-Ella está contando la historia de manera light, suave..-Peter suspiró- me comporté como un hijo de puta, yo estaba por casarme, no me casé, Lali estaba en el casamiento, se puso a correr porque yo quería alcanzarla y tuvo el accidente.. Al despertar ella recordó que si estuvo en un casamiento, creyó que era el nuestro
Otra vez se hizo silencio.
Mi papá fulminó con la mirada a Peter que se intimidó.
-¡Ya eso es pasado! Lo que no te mata te fortalece-traté de sonar divertida, aunque en realidad todo eso me había causado dolor-ahora tenemos un presente lindo..
-Yo.. La quiero a Lali, realmente la quiero..-Peter se atrevió a mirarlos a los dos-cometí muchos errores, pero yo creo que aprendí, no se si soy lo mejor para ella, pero pienso darle todo..
Lo agarré de las manos y esbocé una pequeña sonrisa, besé su mejilla.
-Nunca más le mientas a mi hija-mi papá lo señaló con el dedo elevando sus cejas.
-¡Ya papá! Toda esa mierda nos hizo más fuertes.. Ahora esta todo bien-asentí con la cabeza.
Mi mamá no se contuvo y me abrazó fuertemente, sabía que estaba abrazándome por todo lo que no me abrazó en este último tiempo.
Papá también lo hizo, a lo lejos lo vi a Peter sonriéndonos.
Tomamos el té, comimos sandwiches de miga, galletitas y budines, el que hace mi mamá y amo.
Por suerte pudimos "cambiar de página" y dejar  todo lo que había pasado de lado.
Nos despedimos y me subí al auto, me acomodé bien en el asiento porque tenía sueño, lo escuché a Peter reírse.
-¡Yo soy la persona embarazada! Merezco dormir-también me reí.
-Dormí todo lo que quieras- soltó una carcajada.

PETER

Llegamos, desperté a Lali besando varias veces su cara.
-Si no fuera porque me despertaste tan amorosamente ya te estaría ladrando-me sonrió.
Bajamos del auto, ella dejó su mochila en una silla y se acercó hasta donde yo estaba, rodeó mi cuello con sus brazos.
-¿En que estas pensando?-le sonreí.
-En lo mucho que me gustas Juan Pedro..-ella me besó en los labios, mientras nos besábamos le hice caricias en la cara, su pelo.
-Estamos a mano Mariana, yo también gusto mucho de vos-le di una palmadita en su trasero, ella se sorprendió y se mordió los labios, sí, estaba provocándome, bajó la tira de su vestido dejando su hombro al descubierto.
-¡Sos una hija de puta!-me reí sobre su boca- no tienes al diablo
-¿Te tenté?-me guiñó un ojo.
Estaba divertida jugando a nuestro jueguito de seducción y coqueteo.
Claramente terminamos en la cama, yo acariciando su espalda, su cintura, llenando su cuerpo de besos, su pancita, su cuello, su boca, me encantaba, ella me encantaba.
Nuestra conexión siempre era algo que me sorprendía, no era normal, claramente era obra del destino que los dos sintiéramos lo mismo tan intensamente.
Ella me hizo caricias en la cara y besó la puntita de mi nariz.
-Estas muy muy hermosa mujer-se lo susurré en el oído, escuché su risa, me abrazó.
-Soy tu mujer-también me lo susurró sin soltarme, sus palabras me hicieron pensar, ella era mi mujer pero al mismo tiempo no lo era.
-Antes tendríamos que casarnos, ¿no? Para que pueda llamarte mi mujer..-le hice una caricia en la frente, ella se me quedó mirándome procesando las palabras.
-¿Qué?-elevó sus cejas.
-¿Te casarías conmigo? Soy un desastre, no tengo anillo de compromiso, nada.. Me salió de manera espontánea, sentí que era un lindo momento..-iba a seguir hablando hasta que ella me silenció de un beso, nos sonreímos.
-Ahora sí-asintió con la cabeza.
Nos quedamos mirándonos sonrientes, terminamos acurrucados en la misma cama, feliz de haber dado otro pasito más en mi vida junto a Lali.