Chlorine 2Doc

Anathema

Toque la puerta roja y espere a que abrieran, salió y se rio sarcásticamente, saque el dinero y le di lo que le debía, lo tomo, iba de regreso, pero lo detuve, sabía lo que quería, asintió y me lo dio, empecé a caminar buscando una farmacia abierta, cuando la encontré trate de verme lo más decente posible entre y un chico me sonrió, camine entre los pasillos hasta encontrar las inyecciones, mire hacia todos lados, sabía que necesitaba receta médica para comprarlas, tome una y me la escondí en el pantalón, tome unas curitas y un dulce para no verme tan extraño, me acerqué a la caja y le sonreí, empezó a cobrar.

- ¿sería todo? Señor.- Asentí.- serían $3.90

Le pagué y le sonreí, salí deseando que no se diera cuenta, cuando abrí la puerta me gritó a lo lejos, corrió hacia mí, genial pasaría la noche detenido.

- Su cambio señor.- Me estiro la mano. Lo acepté era cierto.- Que tenga linda noche.

- Gracias, tu igual.

Salí aliviado, camine varias cuadras para alejarme de ahí, entre a un callejón y me tire al piso, saque mi botellita, abrí la inyección y la prepare, levanté mi manga y busque mi vena, suspire y la inyecte, si me moría en este momento no me importaba, nada valía la pena y a nadie le importaba una mierda lo que me pasara, aventé la inyección y me quede viendo hacia fuera del callejón a veces pasaban carros que empezaban a verse borrosos, la estela de luz que dejaban era tan bonita, sentía que me iba con ellas, recorrería el mundo encima de una...

- ¿Qué haces, sunshine?

- Tomo fotos, no quiero olvidar este día.

Camine en el bar y me acerqué a la barra, me senté a lado de Jamie que estaba jugando muy cerca de la cara de Damon, sonreí al ver lo perfecto que era todo, Noodle se encontraba hablando en una esquina con Ace.  Dolores, Paula y Russel en otra, una copa para brindis nos llamó la atención a todos, voltee a ver, estaba subida en una mesa con la copa en mano viéndonos a todos.

- A diferencia de papá, yo no sé hablar en público.- Nos reímos.- Pero tenía que intentarlo, ammh cuando mis padres se separaron mi madre se encargó de hacerme entender que mi padre jamás sería feliz por qué eligió un mal camino, como si él lo hubiera decidido peroooo después te conoció a ti.- Me sonrió y yo me sonroje, Damon me dio un codazo coqueto.

- Y desde ese día nunca había visto a papá tan feliz, sonreía, se sonrojaba, se la pasaba atento al celular cada segundo, lo cual fue perfecto para molestarlo por regañarme cuando yo lo usaba jaja y eso me hace feliz a mí porque yo no quería ver mal a mi papá y me dolía mucho que mi madre dijera eso así que gracias por hacer feliz a mi papá.- Empezó a sollozar, corrimos los dos y le dimos un abrazo muy fuerte y lleno de amor...

El ruido de los coches y la luz empezaba a molestarme, empecé a mover la cabeza, pero era inútil, entre abrí los ojos y noté como había verde frente mío.

- ¿Café?.- Abrí los ojos de golpe al escucharlo

- ¿¡¿¡PERO QUÉ CARAJOS?!?! Ace, no jodas, casi me matas del susto.

- Lo siento, pero creo que soy lo más inofensivo que te pudiste encontrar.- Estaba arrodillado frente mío, tenía dos vasos de cafés en las manos.- Vamos, te debe doler terrible la cabeza.

Se levantó y se hizo aún lado, estaba algo mareado, así que me levante agarrado de la pared y recargada en ella, su droga era más fuerte que la de Paula, me puso enfrente el café, lo tome para calmar mi dolor de cabeza, este café sin duda era de Dolores.