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Mis clases habían acabado, la hora del almuerzo estando a unos minutos de comenzar. Mi cuerpo y mente ansiando poder salir al patio a sentarme al aire libre, queriendo escapar de esas cuatro paredes donde paso horas y horas.

Me sentía agobiado ahí dentro, mi ojo latía al igual que mi labio, sin siquiera moverme por el maltrato que mis costillas habían recibido.

El timbre sonó y todos se levantaron, yo como siempre quedando último, guardando mis cosas con pasciencia para después tomar mi celular y salir a hacer lo que tanto deseaba.

─ ¡Hey! ─ mis ojos captaron a alguien al lado de la puerta, haciéndome dar un leve susto. Lo miré sorprendido y continué mi camino tratando de irme lejos de allí. ─ ¡Hey tú!─ volteé mi cuerpo topándome con su mirada de nuevo, miré detrás mío, a mis costados pensando que no era yo al que solicitaban ─ Si, tú.─ se acercó lento.

─ Hola.─ saludé tímido, mirándolo con atención, un poco de color invadió mis mejillas en ese momento. Mi corazón a mil y mis piernas pidiendo por correr del lugar, alejarme lo más rápido posible.

─ Hola.─ devolvió el saludo frente a mí de manera amable, haciéndome retroceder un poco ante la invasión a mi espacio.─ ¿Todo bien?─ su pregunta me descolocó un momento, haciéndome parpadear de forma rápida. Aún no me creía lo que estaba pasando.

─ Todo bien... ¿Y tú?─ me animé a preguntar con la vergüenza a flor de piel. Miré a nuestro alrededor, casi nadie había notado que el mismísimo Min Yoongi estaba hablandome.

─ Me alegro por tí Jungkook, yo me encuentro bien, gracias por preguntar.─ mis piernas casi se hacen gelatina mientras mis ojos soltaban destellos. Me había dedicado una sonrisa y... Él sabía mi nombre ─ ¿Vas al comedor? ─ preguntó levantando su ceja, aquel simple gesto se me había hecho tan atractivo.

─ Sí, estaba a punto de ir.─ dije aún avergonzado, con una sonrisa boba que seguro habrá notado. En realidad no pensaba comer, pero no podía decirle que no, debía aprovechar el momento.

─ Te acompaño, no tengo nada que hacer realmente.─ se colocó a mi lado comenzando a caminar en aquella dirección, miró hacia atrás esperando a que retome mi paso para seguirlo. Agaché la cabeza mientras mordía mi labio, me puse a la par de él para caminar a su lado ─ ¿Tus clases bien?─ La pregunta hizo que mi cabeza se levantara, aún sin creer lo que estaba pasando, ni entender el por qué aún no me desmayaba ahí mismo.

─ Sí, bastante bien ¿Las tuyas?─ Pregunté con un rubor en mis mejillas, la calentura en ellas invadió todo mi cuerpo. Siquiera sabía como las palabras salían bien de mi boca.

─ Falté a las dos primeras clases, Geografía estuvo bastante bien, supongo.─ lo ví levantar sus hombros sin darle importancia al tema ─ Vamos a pedir para comer, ¿Te gustaría una hamburguesa?─ Levantó sus cejas esperando respuesta.

No podría comer tal cosa, las calorías de la carne y el pan, los aderezos. No podría hacer algo como eso, me iba a inchar como nunca, pero quedaría muy mal si le niego una hamburguesa a Min Yoongi.

Mordí mi labio nervioso pensando que hacer.

─ Creo que una hamburguesa estaría bien.─ sonreí con los labios, mirándolo con atención─ No tienes por qué comer conmigo... Digo, si no te sientes cómodo no lo hagas, yo puedo irme y no molestarte.─ los nervios me ganaron y pronuncié eso de manera rápida, esperando que me dijera que me vaya.

─ ¿Por qué tendrías que irte si el que interrumpió tu almuerzo soy yo? Vine porque así lo quise.─ aseguró con las cejas fruncidas, viendome con rareza.

Trouvaille. // KTH + JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora