Ginger
—¿Crees que funcione? —salimos directo del elevador y caminamos hasta el fondo del pasillo, donde ahí se encontraban los que hacían las citas.
—Por supuesto que funcionará, Ginger —Craig se detuvo a mi lado y volvió a mirarme —Es una de las mejores psicólogas qué hay.
—¿Y el pago? —pregunte sorprendida —Las consultas son muy caras.
—Algunos —me guiño un ojo —Pero ella no me cobró.
¿Que? ¿Ella?
—¿Se puede saber que hiciste para que no te cobrara la sesión? —entrecerré mis ojos.
—Yo venía saliendo de comprar la cena y vi que un hombre la venía siguiendo —lo mire atentamente para ver si no mentía, pero dice la verdad—Le pregunté que si todo bien, y el señor cuando me vió se fue.
—Fuiste muy lindo en ayudarla a salir de esa horrible situación.
—Suerte que estuve ahí —seguimos caminado a paso lento — hablamos unos momentos para que el hombre no volviera a venir y no llegó. Después me dijo que si tenía niños o adolescentes viviendo en casa, porque era psicóloga y ya.
Llegamos al final del pasillo y me encaminó hacia los asientos.
—Vendré por ti al terminar tu sesión.
Antes de que se diera vuelta lo detuve.
—Craig —se giró sobre sus pies y me miró atentamente —Gracias.
—No tienes nada que agradecer, todo saldrá bien, lo prometo —revolvió mi cabello.
Sin nada más que decir se fue directo hasta el elevador y al cerrar la puerta movió su mano en señal de despedida.
Seré sincera estoy nerviosa.
¿Hace cuanto que no voy a un psicólogo?
¿Años? ¿Meses? Ni idea.
Nunca fuiste a un psicólogo.
Hoy es viernes y los chicos están en sus habitaciones, mamá y papá ayer llegaron por la noche —sin avisar— ahorita que estoy sola... la estoy pensando en comprarme un boleto en autobús y alejarme de aquí.
Hazlo Ginger, ¿que te detiene?
Tengo dinero suficiente para un boleto y comida para unos dos o tres días.
Escuche que dijeron mi nombre y era una de las señoritas que atendían para pasar directo con la sicóloga.
Me alarmé.
Rápidamente saque mi teléfono y le mande un mensaje a Craig.
Ginger : Lo siento Craig, no estoy lista para contarle esto a alguien.
Craig: Te entiendo, yo también estaría nervioso la primera vez con el psicólogo. Voy directo a recogerte y espérame ahí donde estás.
—Usted es la señorita... —estaba buscando mi nombre en la lista.
¡Ay no! Se que puedes contarle lo que sea a un psicólogo, pero, ¿cómo se lo tomaría? ¿me juzgaría? probablemente me mire con cara de horror al contar todas las situaciones que he vivido tanto con mis padres y hermanos. Probablemente ella apriete un botón y en eso aparezcan 2 señores altos fuertes y me lleven a un cuarto de color blanco... y si llegaría a pasar, ¿Estaría a salvo de ellos?
—Ginger —termine por ella —Ginger Evans.
—¿Vas a querer pasar?
Tome mi celular y lo enseñe.
ESTÁS LEYENDO
The boys who lied +21
Teen Fiction[ EN PROCESO Y ACTUALIZACIÓN ] Qué harías cuando 4 chicos sexys te salvan de la lluvia ? Pero lo que no sabes es que ellos te ocultan un secreto y tienes que recordar todo lo que paso esa noche tras la lluvia .