INSANIA ( Completa)

El culpable soy yo ...✨

El culpable soy yo
El culpable soy yo
Por dejar que el corazón te amara tanto así
Y dejar que aquellos besos me hicieran tan feliz
Mira cómo pagas esta devoción

En: Eso es imposible...¿cómo que ya?...Dios!

J.A: Mire Mendoza, no se que asuntos tiene usted, pero fue muy contundente cuando me pidió que salga lo más pronto posible. Ahora cambió de opinión y yo no puedo hacer nada. Si me disculpa tengo un almuerzo familiar y preciso disfrutar del fin de semana.

En: Lo siento, tiene razón...buenos días y gracias juez Álvarez

J.A: Relájese Mendoza, tiene que estar contento. Acaso a su esposa usted ¿no la declaró con insanía? ...ya está. No tiene ningún tipo de unión con ella...
Nos comunicamos Mendoza. ( Colgó)

En: Maldita sea!

Y el celular rebotó en el aquella cama justo cuando Tatiana entraba en la habitación...

Ta: ¿Pero qué pasó?

En: Nada, sólo que los papeles del divorcio se atrasaron...( Mintió)

✨✨✨

Lobby del hotel

E: ¿Cuánto quieres?

A.R: Hazme un cheque ...por el doble de la suma.

E: Ana Rosa por favor, te estás volviendo loca ...

A.R: Aquí el que quiere libertad, eres tú...

E: ¿Ya firmaste?

A.R: Claro que no

María, aún sin ser vista, se apartó de allí totalmente confundida ...

E: ¿Cómo se que no volverás a chantajearme?

A.R: Dame el cheque...y firmo ese bendito papel.

E: No confío en ti...

A.R: Tendrás que hacerlo.

Esteban resoplo

E: Iré a buscar la chequera

A.R: Muy bien ...( Se sentó cómodamente en uno de los sillones del lugar)

Habitación 215

E: ( Entrando) Mi amor, ya nos vamos

M: Si...

Esteban buscó entre sus cosas la chequera y volvió al lobby.

E: Toma... ( Luego de haber escrito una suma con varios ceros) ¿Cuándo lo harás?

A.R: Que apurado...quiero leerlo bien, no quiero que me salgas con alguna sorpresita. ( colocaba cuidadosamente el cheque en su bolsa)

E: Legalmente lo que te corresponde...

A.R: De todos modos. Es lo menos que puedes hacer por mi...aún te quiero Esteban, y no sabes cómo sufro...por eso hago esto, por despecho...

E: Ya...Ana Rosa...

A.R: Lo se...te llamaré cuando haya firmado.

Esteban suspiró

A.R: Adiós...

Maria había terminado de empacar encontrándose sentada sobre la cama un tanto pensativa.

E: Ya ( entrando ) ¿nos vamos?

M: Si...

Se levantó de allí pero la duda le asaltaba

¿Quien era esa mujer Esteban?