capitulo 3: La ceremonia

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-Asi que ella es la famosa Afthea- una voz habló por atrás.

Las tres mujeres voltearon a ver quién había entrado en la habitación.

Un hombre de aspecto rudo, pero bastante agraciado, cabellos negros y ojos oscuros que brillaban cómo si fueran la luna.

-Ares- pronunció Artemisa como si fuera veneno

“Ares” la ignoro y se sentó en una de las sillas cercanas.

-¿Que necesitas, sobrino?- pregunto amablemente Hestia

¿Sobrino? ¿Quien era este hombre? ¿Qué hacía aquí? Thea tenía muchas preguntas para hacer.

-Padre quiere que escolte a la niña- Le contesto Ares a Hestia.

-Yo pedí a padre escoltarla- Artemisa refunfuño.

-Parece que de nuevo no te tomo en cuenta- contesto Ares mientras se paraba de su asiento

-JaJa, muy bien sabes que padre solo te tiene en cuenta por los berrinches de tu madre- Artemisa estaba lista para atacar con todo, pero su tía prefirió intervenir.

-hare que Afthea se vista y vaya a la fiesta- Hestia corto la tensión entre sus dos sobrinos.

Ares le dio un asentamiento, luego volteo hacia donde estaban Artemisa y Thea.

-si sigues teniendo esa cara de amargada y esa lengua de serpiente seguirás pasando la eternidad sola, Arti- Sonrió engreídamente.

Artemisa se acercó más a él

-Como si todo el Olimpo no te odiara, Ares- contratacó

Los dos estaban a escasos centímetros por lo que parecía que comenzarían una pelea.

-Cobarde-

-Desquiciada

Estos dos si que se odian- Thea se dijo a si misma en sus pensamientos

-Basta de sus peleas ridículas- Hestia les gritó viendo que no pensaban parar la discusión-¿No tiene respeto ni siquiera por mi presencia?

Los dos dioses se disculparon con la mujer mayor al ver su sobresaltó.

Hestia se volteo a Thea que seguía  mirando la pelea sin decir nada.

-Ve a cambiarte- Le ordenó Hestia a su sobrina- que el día recién comienza.

Entrego el vestido que habían estado observando hace unos momentos.

Thea obedeció entrando a una pequeña habitación que su tía le indico.

La joven se cambió cuidadosamente tratando de no rasgar el vestido, después de terminar de ponérselo admiró la belleza del vestido.

Fue una buena idea venir después de todo- pensó Thea.

Salió de la pequeña habitación para encontrarse con los demás.

Recibió halagos de parte de su tía y hermana por lo bella que se veía en el vestido.

Ares la miro y le ofreció su brazo para irse, Thea lo acepto.

Elitista | La deshonra de una dios #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora