Capitulo XIII: Donde las pesadillas se hacen realidad.

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Simone y Harper se adentraron en lo profundo del bosque, lejos de donde ellas habían ingresado. Tenían miedo y eso no lo iban a negar, no sabían a donde se dirigían y mucho menos sabían quién les había mandado ese mensaje o por que las estaba ayudando. Tenían un mal presentimiento de todo esto.

El bosque era espeso y seguía habiendo neblina, lo que dificultaba el camino. Los pasos los daban cuidadosamente, no querían tropezar y que algo más pasara. Cada vez se iban adentrando más y conforme eso sucedía su miedo iba en aumento. Temían lo que pudieran encontrar cuando llegaran a su destino.

Querían a Tamara de regreso, pero eso no quitaba que tuvieran miedo, estaban aterrorizadas. Siguieron caminando hasta que el sonido de un mensaje de texto las hizo saltar del susto.

"Ya casi están ahí, sigan hasta que vean una cabaña"

Ambas quedaron viendo el camino que les faltaba recorrer, no sabían si era su imaginación o el camino se hacía cada vez más tenebroso.

***

Ambas amigas se encontraban de pie frente a la cabaña, que tenía un aspecto aterrador en comparación a la que sus amigos fueron el día que desaparecieron. Tomaron una profunda respiración y se dirigieron directo a la entrada de esa aterradora cabaña.

Harper tomo el pomo de la puerta y se preparó para abrirla, girando lentamente la perilla. La puerta emitía cierto chillido por la falta de uso, termino de abrirla completamente y el aspecto de adentro la aterraba más, todo estaba a oscuras, no entraba nada de luz y eso solo incrementaba el miedo de ambas. La cabaña consistía en sillas y mesas rotas, vidrios esparcidos por el suelo y la madera podrida. La cabaña estaba deteriorada y era perfecto para esconder a alguien lo que la hacía mil veces más espeluznante de lo que era.

Ambas dieron un paso dentro de la cabaña, dejando la puerta abierta para que al menos eso les diera un resquicio de luz. Avanzaron más, con el miedo calando sus huesos, de pronto la puerta se cerró de golpe y ellas gritaron por la sorpresa y el miedo.

— No veo nada Harper, dame tu mano — Simone era la que más asustada estaba, así que se le pegó como una lapa. Ambas se tomaron de las manos y siguieron dando pequeños pasos a tientas, adentrándose cada vez más al fondo de la cabaña.

Hasta ese entonces por el miedo Simone no había podido pensar bien, pero recordó que llegaron ahí porque alguien las estaba ayudando por mensajes de texto, lo que quería decir que tienen celular y los celulares tienen linterna.

— Enciente la linterna de tu celular por favor harper, no quiero seguir caminando a oscuras.

Harper tampoco había podido pensar bien por el miedo y tampoco se le habría ocurrido eso, así que rápido encendió la linterna, alumbrando a todos lados para asegurarse que solo estaban ellas.

— ¿Para qué nos traerían a esta cabaña cuando está claro que no hay nadie? — Simone también se preguntaba lo mismo, desde que habían llegado no volvieron a recibir ningún otro mensaje.

Estaba por responder cuando llegaron al costado de las escaleras, donde había una puerta que tenía escrito con sangre "Ábreme y atrévete a descubrir que hay abajo."



 Holaaaaaaa, ¿Cómo están? 

Si aun siguen aquí leyendo muchas gracias, tuve un pequeño bloqueo pero me he recuperado. 

Muchas gracias por votar, aunque sean pocos me ayudan <3

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