Me persiguen mis secretos

Sobre está historia - Prólogo

A continuación, se comparten unas breves notas de los dos autores sobre la génesis de esta historia.

Palabras de NúmerosLiterarios:

Cuando Aldebarán me propuso ser la parte femenina de esta historia, me pareció algo retorcido. Porque, en principio, la protagonista y yo podíamos tener muchas cosas en común y sentí que podía ser una manera de cotillear mi vida personal. Soy una persona de pensar siempre mal con respecto a las intenciones del prójimo, pero aclarado esto con él, no dudé en aceptar. Admiro la sensibilidad que trasmiten las letras de Aldebarán y la pasión que significa para él el escribir. Me pareció un reto, pues yo no me siento a su altura creativa. Somos muy diferentes literariamente hablando.

Por otro lado, la estructura narrativa por la que optamos nos dio la libertad de seguir cada uno ese estilo personal, cosa que me preocupaba porque podía quedar demasiado obvio la escritura a cuatro manos y muy artificial al intentar forzar la unión de ambas narrativas.

Como punto negativo, que quizá no lo sea, apunto la obstinación de mi compañero en que yo hiciera poesía muy estructurada (con métrica), cosa que no había hecho en mi vida. Pero, ahora se lo agradezco. Sin más, espero que disfrutes la historia.

Palabras de Aldebarán Elías:

Lo mejor que se me pudo ocurrir fue proponerle a NúmerosLiterarios escribir esta obra a cuatro manos. Pero, un momento, les produce curiosidad ese nombre, ¿verdad? A mí también me pareció peculiar, genial: NúmerosLiterarios. Cuando nos conocimos, a través de una página o red de escritores de todo el mundo, se lo pregunté. No sé si mi compañera se vaya a molestar conmigo por compartirles esto sobre su nombre. Ojalá no me vaya a lanzar una zapatilla, porque no fallaría y mal de mí.

El hecho es que, ella me dijo que decidió adoptar el antedicho seudónimo; debido a que, su línea de formación profesional requiere de la lógica fría e imprescindible de los números y su pasión de siempre de la humanidad de las letras. Bastante ingenioso, porque después descubrí que en el fondo —déjenme se los susurro aquí—, NúmerosLiterarios es un perfecto equilibrio entre su buen razonamiento y su locura. Y pues precisamente esto, después de vacilar por días, fue lo que me hizo decidirme a proponerle a NúmerosLiterarios asumir este reto. Claro que pensé que ella creería que yo quería violar su espacio. No obstante, es bien dicho que quien no arriesga no gana.

Por lo tanto, estoy muy contento, como sé lo está mi compañera, con el producto logrado. ¡No pude elegir mejor compañera! De hecho, resultó que NúmerosLiterarios hace mejor poesía que yo y su creatividad e imaginación con la narrativa, simplemente, no dejan de sorprenderme. Así pues, estimado lector, esperamos que disfrutes de esta obra tanto como nosotros al escribirla.