Una sorpresa

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Buenaventura, 20 de mayo de 2022

Querida Elene, 

Adivina... Tengo una maravillosa sorpresa para tí. La he dejado con tu marido. Eso, quiero que lo tomes como una verdadera muestra de mi aprecio.

A decir verdad, no soporto esta agonía que me carcome en la espera de ver tu reacción. ¿Sabes? Lo que dejé con tu marido no es lo que más me emociona. Quiero confesarte algo, pero para ello, quiero que le preguntes a tus hijos quién los visitó el miércoles antes que pasaras por ellos en la escuela. Ellos tienen una indicación puntual, me gustan esos crios, Son bien obedientes. Se ve que has hecho un buen trabajo con ellos. 

¡No te alcanzas a imaginar el gozo que me ha generado escribirte esta carta!

Ah, antes de que se me olvide, quiero que me cuentes con pelos y señales qué fue lo que encontraste cuando fuiste a buscar a tu Felipe querido. Por ahora, te dejo estos versos...


Aguardabas calmosa y con una sonrisa, 

ataviada con la fuerza de la pasión,

me esperabas del viento o de una brisa

para que en un instante, en una noche hacia otra dimensión...

Latieran los días de abril e inolvidable 

surgiera el alba en tus ojos, ¡qué hermosa canción!

la cual suena y suena, imperecedera e inexorable

tan clara cuando no dices nada y yo te recuerdo

con ese baile de enamorada y pasos imparables. 


Con mi mayor aprecio
Tuyo afectísimo

Me persiguen mis secretosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora