Me persiguen mis secretos

Respuesta a las letras de nadie

Letras de nadie agitaron mares.

Agua calma con la brava espuma,

insolencia de tinta y de pluma,

la propia de charlatanes juglares.

Mas, no serás tú quien los navegares,

acosando con descaro que abruma

un corazón a latido de reuma.

Pues, el tiempo talla hondo los pesares.

Marchad por donde ha venido farsante,

actor de mentiras de seda obscena.

Vaya con su yo seductor arrogante

o acabará rimando en la pena

por abordar de forma desafiante

a esta vivida en años sirena.

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Bilbao a 1 de octubre de 2021

1:00 a.m.

A quién ha tenido la desfachatez de escribirme semejantes barbaridades:

Para empezar, y dado que por su forma de expresarse parece un fantasma del siglo XVII, le seré, en la medida de lo posible, correcta, lo que me va a llevar a morderme la lengua todo lo que dure la redacción de esta misiva. Así que, cargue en su conciencia el que hoy no tenga gusto para saborear la cena.

Bueno, parece que además de espíritu rancio, usted es un amago del verso. Sepa que para intentar rozar un ápice las genialidades de la época de El Quijote, aparte de buscarse otra Dulcinea, que por cierto ha elegido mal al pensar que mis partes bajas se iban a ruborizar con tanta descripción obscena, debe de dejarse de estimadísimas y amigas en su lenguaje.

Siento decirle que me ha recordado al Hombre casado y pobre de Quevedo. Y siguiendo con este que sí es un grande de las letras y del que le recomiendo se instruya por el bien de los ojos de la desgraciada a la que escoja para sus desahogos, no se ciegue con mi persona. Pues, no sabe en dónde se está metiendo y se está ganando con creces un Diálogo de galán y dama desdeñosa del que quedará escaldado.

En cuanto a la especie de soneto inglés que encabeza su carta, no entiendo un carajo, de polvos, gases ni giros, ni falta que me hace el entenderlo.

Sinceramente, no sé por qué me he tomado la molestia de responderle. Quizás, simplemente, para dejarle claro que no me interesa nada de su persona. Le recomiendo que le haga un favor a la humanidad y se haga mirar esta fiebre por el castellano antiguo y el acoso postal que padece o se meterá en problemas. Yo por mi parte seré benévola y haré como que nunca supe de su persona.

Me despido sin aprecios

quien no cree en palabras huecas.

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