¡Kimetsu Academia!

¡Vamos a la montaña!

Sinopsis:

El Clan Kamaboko emprende su viaje rumbo a las montañas de esquí, aunque digamos que ese viaje no va a ser para nada normal, y al momento de llegar mucho menos lo va a ser.

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—¿Ya tienen todo?— Preguntó la madre Kamado a sus hijos.

—Sip— Respondieron Tanjiro y Nezuko al unísono.

—¿Seguros de que van a estar bien?.

—No te preocupes, todos vamos a estar bien— Habló Tanjiro con su característica sonrisa.

—Bueno, espero que la pasen bien y cuídense mucho— Kie abraza a sus hijos.

Al separarse, ambos hermanos se van de la casa, rumbo al punto de encuentro acordado.

—¿Quienes han llegado al punto de encuentro?— Preguntó Nezuko.

—Genya, Inosuke y Aoi.

—¿Y Zenitsu y Kanao?.

—Zenitsu lo más seguro es que esté buscando videos en Internet sobre cómo esquiar para presumir que "sabe" esquiar— Tanjiro hace un entrecomillas con sus dedos. —Y Kanao aún se debe estar arreglando, sabiendo lo muy sobreprotectores que pueden llegar a ser sus padres...

—¿Conociste a tus suegritos?.

—Si, fue ya hace varios meses, Shinobu-San nos invitó a mi, a Shinazugawa-San y a Tomioka-San a su casa, ella quiso organizar una extraña competencia de parejas, y al final sigo sin saber quién ganó.

—¿Competencia? ¿What the fuck?.

—Es muy raro, lo sé, en una nos tocó hacer una competencia de "placer", no se bien exactamente qué pasó cuando Shinobu y Kanae-San entraron a la habitación con sus parejas y ellas salieron con un extraño olor y de paso jadeando como si corrieron una maraton.

—¿Y que pasó con Kanao?.

—Nada, fue muy agradable pasar ese día con ella— Tanjiro recuerda con nostalgia el día, pero es interrumpido por un ligero golpe por parte de Nezuko. —¡Ey! ¡¿Y eso por qué?!.

—¡Por pendejo! ¡Tenias la oportunidad perfecta para ponerla!.

—¡¿Poner que cosa?!.

—... Olvidalo.

—¡No me dejes con la duda!.

—¡Chicos, por aquí!— Genya levanta la mano en el aire para llamar la atención de los hermanos.

—¡Kentaro! ¡Aoi no me quiere!— Exclamó Inosuke con una expresión de enojo, pero tenía lagrimitas en sus ojos.

—¡No es que no te quiera, estúpido! ¡Simplemente no te dejaré revisar mis cosas!.

—¡¿Y por qué no?!.

—¡Porque son cosas privadas!.

—¡Dejame ver!— Inosuke toma la mochila de Aoi.

—¡¡QUE NO!!.

Y para sorpresa de nadie, los dos terminaron peleando.

—No se preocupen, llevan diecisiete minutos en ese problema— Dijo Genya al ver cómo la pareja se estaban gritando el uno al otro.

—¿Y hace cuanto llevan aquí?— Preguntó Tanjiro.

—Diecisiete minutos.

—A.