Memorias de una desquiciada.

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Sinopsis:

Shori Arubaresu es llevada a un psiquiatra a discutir sobre su cordura mental después de casi asesinar a Kanao y dejarle una herida a Tanjiro. Ahí, ella cuenta todo sobre su pasado y la razón por la cual es como es.

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Ella caminaba por los pasillos de aquel extraño edificio al que sus padres decidieron llevarla, su mano derecha estaba con una pequeñas manchas de sangre, pero no la suya, era la sangre de quien había lastimado hace apenas unas horas, Tanjiro Kamado al proteger a Kanao.

Antes de ir a donde debía, tomó un rápido desvío para dirigirse al baño y limpiarse la sangre de su mano. Al hacerlo hubo un punto en el que se dejó llevar por su obsesión por el chico, dándole una pequeña lamida a su mano aun con la sangre de Tanjiro ahí, saboreandola.

—Es... la sangre de Tanjiro...— Dijo ella complacida por la sangre, terminando así de lavarse la mano.

Después de lavarse la mano, siguió su camino hacia donde se dirigía, con una sonrisa complacida y un rubor en sus mejillas causados por haber saboreado la sangre de su amado no correspondido.

Después de caminar por un rato, llegó a su destino, tocó la puerta que tenía enfrente de ella tres veces, recibiendo un "adelante" como respuesta, la chica entrando después de recibirla. Adentro de la habitación que en realidad era una oficina, vio un gran escritorio en el que estaba un hombre en traje sentado en frente del mismo, teniendo adelante del escritorio dos sillas más.

—Estaba esperandote, Señorita Shori— Dijo aquel hombre de ojos rojos.

—No me digas "señorita"— Dijo ella irritada.

—En fin, tus padres hicieron lo correcto al dejarte en mis manos— Él sonríe.

—Escucha, viejo, no sé la razón por la que mis padres aquí pero si es para lidiar con un pedofilo, prefiero estar muerta.

El hombre ríe. —No te preocupes, Shori, solo te trajeron aquí para hablar sobre ti.

—¿Sobre mi?.

—Claro, despues de ver lo que ocurrió con ese chico-...

—Su nombre es Tanjiro— Lo interrumpe.

—Después de ver lo que ocurrió con este Tanjiro, tal parece que mandaste tu reputación por la borda.

—¿A quien mierda le importa eso? Yo lo único que quiero es el amor de ese angelito— Dijo con una linda sonrisa, pero con una mirada tétrica.

—Leí los informes que tus padres me dieron sobre ti, estuviste en un hospital mental hace tres años porque-...

—No me importa haber matado a esa chica, se quería robar a mi amado en ese entonces.

—Así que es verdad que mataste a alguien... En la pagina de KimetsuBook decía que en realidad solo la apuñalaste con una tijera.

—La policía hizo que se viera así, no es mi problema.

—¿Y eso perjudicó a tus padres?.

—Claro que lo hizo, los padres de esa maldita exigieron bastante dinero por ello, mis padres lo pagaron pero igual fue bastante dinero y bueno, me mandaron a ese estúpido hospital lleno de locos.

—¿Te consideras una loca?.

—No estoy loca, solo estoy enamorada...

—¿Sacaste esa frase de un manga yandere o que?.

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