Segunda parte del libro wattpad.com/story/217379236-frases-y-cosas-de-un-chico-yandere dónde continuará la temática.
Este libro puede tratar temas como abuso, manipulación, maltrato e incluso la violación SIN INTENCIÓN DE BROMEAR O INCENTIVAR A C...
Advertencia: Mención de secuestro, maltrato, acoso y de violación.
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*Narradora PO.V*
Aún recuerdas como empezó todo.
El día en que conociste a aquel apuesto pero desagradable mujeriego de nombre Anderson.
Él en un principio te interesaba, pero al ver cómo coqueteaba con otras mujeres una y otra vez, comprendiste que así como te trataba bonito a ti, trataba igual de bonito a otras, ganándose la fama de "mujeriego" en el vecindario dónde vives.
No hace falta decir que eso mató tu interés de inmediato.
--Por dios, que desagradable-- Susurraste al escuchar por parte de un par de mujeres de aparentemente unos 26 o 30 años el cómo Anderson jugó con ellas, sin saber ni tú ni ninguna de ellas el oscuro secreto que había detrás.
Tenías unos 29 años y ya lograste mudarte a tu propia casa, solo que ahora tenías no solo que vivir a su frente, sino que tenías que soportar su presencia en el trabajo. Si, tenías que soportarlo en su oficina, alardeando no solo con su respectivo trabajo, sino también restregándole en la cara a algunos de los otros empleados la cantidad de citas y novias que ha tenido de vez en cuando e indirectamente, como si buscara sentirse superior por eso o algo por el estilo.
Y cuando llegaste por primera vez, oh dios, de inmediato empezó a poner el ojo en ti como "su próxima cita", cosa que siempre le rechazaste.
--Vamos nena, solo unos tragos después del trabajo, eso no te matará-- Decía intentando convencerte mientras tú registrabas los balances de la empresa en tu computadora de la oficina.
--Vuelve a tu cubículo y déjame en paz, ya te he dicho que no mil veces-- Siempre lo rechazabas ya sea dentro o fuera del trabajo, porque sí, aparte de tener una reputación de mujeriego ligón, era intenso y a veces hasta llegó a actuar como un completo acosador contigo, por lo que tenías bastantes razones justas para odiarlo o que al menos te resulte fastidioso.
