:^) Epílogo #2

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POV. STEVE

Salí al callejón, por la puerta trasera de mi restaurante, en busca de Tony.

Lo busque con la mirada hasta dar con el.

- ¿Tony? - lo vi sentado, abrazando sus piernas y llorando.

Me acerqué rápidamente hacia el.

- ¿Amor qué ocurre? - no me respondió simplemente, me abrazo y siguió llorando - Tony, me estás preocupando ¿Qué pasa? ¿Son tus ojos? Voy a buscar a Bruce.

Trate de levantarme pero este no me lo permitió.

- Mis ojos están perfectamente - dijo entre sollozos - No tienes que preocuparte por eso, Steve.

Deje escapar un suspiro aliviado.

- ¿Entonces qué pasó, cielo? - limpie varias de sus lágrimas.

- Los vi, Steve - fruncí el ceño confundido - A mis padres, a mi hermano.

Lo abrace fuertemente, mientras este solo sollozaba sobre mi camisa.

- Está bien, cariño - acaricie su cabello - Está bien.

- Están adentro, Steve - suspiré - Ellos...

- Escúchame Tony, todo está bien - le sonreí, mientras sostenía su rostro en mis manos - ¿Te vieron?

Tony negó.

- No sabia que hacer, solo corrí hacia aquí - asentí y bese su frente.

- Está bien, cielo. Esta bien - le sonreí - ¿No crees que ya es hora, de que te vean?

Tony negó.

- Tu me llevaste con mi madre, tal vez es momento de que yo te lleve con tu familia - vuelve a negar.

- No puedo, Steve. Es más complicado - reí y negué.

- Nada es complicado, amor - deje besos por todo su rostro - Nada.

- Tengo miedo - asentí.

- Lo sé, pero yo estoy contigo - acaricié sus mejillas con mis dedos pulgares - Todos estamos contigo.

- Es la primera vez después de 9 años que perdí la vista y 2 años, desde la operación para recuperarla - bese la punta de su nariz.

- "Todos los finales son también comienzos. Simplemente no lo sabemos en el momento"

*Las cinco personas que conocerás en el cielo, Mitch Albom*

- Levántate cariño - me incorpore y extendí mi mano hacia el - Perdiste 11 años de tu vida lejos de ellos y ahora tienes la oportunidad de remediar eso.

- ¿Tu los trajiste? - sonó más, a afirmación, que a pregunta.

Asentí.

- Toma mi mano, Tony. Entremos, no te soltaré - miro mi mano inseguro, se limpio las lágrimas de los ojos y suspiro.

Me miró directamente a los ojos y asintió.

Toma mi mano fuertemente y me sonríe.

- No se que sería mi vida sin ti - me abrazo.

- Y la mía sin ti - bese su frente y este suspiro - Vamos, mi vida. No hay que hacer esperar a tus padres y hermano.

Tony asintió y aún con las manos entrelazadas, entramos al restaurant.

Un Gran Amor En La OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora