La Causa Perfecta (Adaptación Camren G!p)

Cap. XXVII: "De maletas y distancia"

- Camila - la llamó Lauren llegando a al cocina en busca de su desayuno. La noche anterior había sido una patada directo a su estómago porque apenas durmió y cientos de preguntas, situaciones y molestias invadieron su cabeza. Ahora, con más lucidez y necesidad de saber todo, la pelinegra madrugó ese sábado y se unió a su novia que ya tomaba una taza de café-

- Ey, buenos días- la saludó Camila con su habitual sonrisa antes de llevar una tostada a su boca- Está tu café en el microondas-

- Gracias- murmuró la pelinegra llegando al aparato y tomando su taza. Regresó a la mesa y esta vez se sentó frente a Camila. No a su lado, como siempre- Creo que tenemos que hablar, Camila - aseguró y la morena alzó la vista hacia ella al instante-

- ¿Es…es por cómo has estado ayer? –

- ¿Cómo estaba ayer?-

- Distante- aseguró Camila dejando su taza y alejándola hacia un costado- Llegaste del Instituto y almorzamos en silencio. Pasaste la tarde con Verónica y a la noche…me ignorabas, Lauren-

- No quiero pasar por esto sola, Camila. Asique necesito que hablemos y me respondas con sinceridad-

- Pregúntame lo que sea porque no aguanto esta situación, Lo… ¿Qué sucede?-

- Ayer, cuando llegaba a casa después del Instituto, afuera estaba Natalie- comenzó Lauren y pudo ver como Camila rodaba los ojos y suspiraba con molestia- estuvo en casa y no me lo dijiste. Vino a verte-

- Dijo que quería saber cómo seguía-

- Pero no me lo dijiste-

- Lairen, no la considero importante y…-

- Pudiste habérmelo dicho en cualquier momento hasta hoy. Y no lo hiciste-

- No puedo creer que vayamos a discutir por su culpa-

- Hablamos. Me detuvo unos minutos para disculparse-

- ¿Se disculpó contigo?- preguntó Camila algo confundida-

- Me dijo que su gusto hacia ti había sido algo pasajero y que sabía que yo lo notaba. Pero le gustabas. Me dijo además que en ningún momento su intención era separarnos ni dañar la relación con nuestros hijos, que no quería eso. Que se encariñó con Joey y con Beth por igual. Y que había venido a verte porque su abuela se lo pidió; Eva estaba preocupada por ti y esas cosas-

- ¿Aceptaste sus disculpas?-

- Parecía sincera-

- Se las aceptaste- resopló Camila molesta-

- Solo quiero que nos deje en paz. Y por alguna manera se debe comenzar ¿no?-

- ¿Y qué más te dijo?-

- Algo que tú deberías haberme contado. También- ironizó la ojiverde haciéndole notar que le había ocultado algo más- No me habías dicho que las horas extras eran fuera de la empresa. En un restaurante. Y solo con ella-

- Eso no es cierto-

- ¿Entonces?- preguntó cruzándose de brazos y echándose contra su silla. Estaba segura que esta conversación se tornaría distinta a las demás. Pero necesitaba comprobar ambas versiones por mucho que sabía que su corazón iba a traicionarla y terminar creyendo solo la de su novia-

- No era solo con ella. Fuimos solo dos veces a comer y en la cena también estaban Eva y uno de los gerentes. La empresa quiere una sucursal en otro punto del país y de eso hemos estado hablando todo este tiempo. De los gastos, los posibles empleados que podríamos viajar a ocupar lugar, los nuevos salarios y eso. Pudo jurarte que apenas crucé palabras con ella- terminó Camila siguiendo con su vista el camino de su novia hasta uno de los muebles-