La Causa Perfecta (Adaptación Camren G!p)

Cap VI: "Destino"

Tres meses.

Lauren había entrado en su semana número 13 de gestación y ese era un tiempo importante solo para ella: su primera visita al médico.

Su padre también era doctor y ya habían tenido sus charlas días atrás; pero esa tarde Michael estaría ocupado con los exámenes de Camila por lo que ella debía también consultar con un médico especialista en el tema.

Esa tarde tomó su bolso de salida, guardó solo su celular por seguridad y bajó las escaleras de su casa con total tranquilidad. Se despidió de su madre quien preparaba un pastel y de Michael con un abrazo después de que él se colocara su bata.

Y abrió la puerta esperando salir con libertad. Pero Camila estaba del otro lado con ambas manos dentro de su chaqueta y lo que parecía esperando algo. O esperándola a ella, tal vez.

La morena le sonrió dulcemente y ella no pudo evitar hacerlo con sinceridad. Ese brillo en los ojos de la morena posiblemente sería el mismo en los de ella justo en ese instante.

Dio un paso al costado y Camila balbuceó algo al darlo al mismo tiempo y hacia el mismo lugar; sus nervios la invadieron y sus labios titubearon frente a otra cercanía con el cuerpo de la morena.

Ya no podía negarse a sí misma el calor que le provocaba estar a centímetros de Camila.

- Lo siento- se disculpó la morena en una broma antes de avanzar otro paso y terminar finalmente frente a ella- Mike está ¿verdad?

- Eh...sí, sí. Está esperándote-

- Genial... ¿estás por salir?

- ¡Lauren! Por dios niña- se acercó Clara limpiando la harina de su delantal y descuidando el tono de su voz- ¿qué haces aún aquí?...vas a perder tu turno ¡vete ya!...Buenas tardes, Camila...Michael está adentro-

- Enseguida voy, Clara. Gracias- dijo Camila alzando apenas la mano y siguiendo a Lauren que ya se alejaba a pasos apresurados- ¿Vas al médico? –

- No - aseguró la pelinegra acomodándose el cabello con la vista fija en el suelo-

- Eso es lo que dijo tu madre. No me mientas-

- ¿Qué quieres Camila?

- Saber si vas o no al médico...Saber si estás bien- murmuró la morena notando que ya se habían alejado más de cien metros y que debía volver cuanto antes para no enfadar a Michael- Saber si nuestro hijo está bien...¡Lauren!

- ¡Si, Camila, si! ¡Demonios!...acabas de escuchar a mi madre ¿no?...- gritó Lauren deteniéndose bruscamente y obligando a Camila a hacer lo mismo. Agitó su cabeza e intentó controlar su respiración antes volver a hablar- voy a una consulta...saber cómo va todo y...y posiblemente me digan...posiblemente me digan el sexo del bebé-

- ¿Qué?- preguntó Camila un débil susurro con la mirada perdida en un punto fijo que Lauren no encontró. La morena parpadeó un par de veces y terminó por sonreír emocionada para volver a preguntar- ¿Te dirán que estamos esperando?

- Posiblemente- sonrió Lauren de lado y luego completa cuando vio el agua que comenzaba a juntarse en los ojos de la morena. Tal vez era la misma cantidad que le nublada la vista en ese instante a ella-

- ¿Puedo ir contigo?- preguntó Camila y Lauren tragó fuertemente. Sonaba a imploración y no se encontraban en la situación de siempre: ella la malvada capitana de las porristas y Camila el blanco perfecto para descargar su molestia. Cuando la morena avanzó el último paso en dirección a ella, Camila estiró su brazo y la detuvo alejándola por uno de sus hombros-

- No, Camila...No puedes venir conmigo. Lo siento pero esto lo haré sola-

- Pero, Lauren...

- Y además mi padre está esperándote...Vete- le ordenó tomándose la frente y esperando estar sola. Sin embargo, Camila permaneció de pie, frente a ella y sin ganas de obedecerla- Al diablo, sino te vas tú, me voy yo-