EL CHICO DEL CAFÉ© +18 ✔️

40. ¿Nos tomamos un café?

☕️Capítulo 40.☕️

«Último capítulo.»

Dos meses después.

Kiara.

― ¡Oh carajo! Voy a extrañar esto.

― Espero por tu bien que no te toque otro chico.

― No prometo nada ― bromeo y me toma del nacimiento de mi cabello embistiéndome con fuerza.

― ¿Qué acabas de decir?

― Que no tendré sexo hasta navidad ― me rio y arremete más fuerte, mientras que yo disfruto de las sensaciones que provoca el tenerlo dentro.

― ¿Qué harás cuando estés ansiosa?

― Llamarte.

― Esa es mi chica ― lanza una última estocada y el orgasmo me toma nublándome la vista.

Sale de mi interior y mi cabello sudado se pega a mi frente y lo mismo sucede con el suyo. Llevo un pequeño top que medio cubre mi cuerpo y acomodo mi falda dejándome caer a un lado sobre su cama.

Nuestras respiraciones son aceleradas y se me comprime el pecho de solo pensar que lo he logrado, pero que he ahora tengo que alejarme, lo único bueno de esto es que será por mi bien.

― Puedo vislumbrar que serás una mala y traviesa universitaria ― murmura Dwayne a mi lado.

― ¿Por qué dices eso?

― Porque tu avión rumbo a Cambridge sale esta tarde y estás aquí teniendo sexo en vez de empacar.

― ¿Empacar? ― me subo a horcajadas sobre él, colocando mis manos en su torso descubierto. ― ¿Y perderme de esto? ― me refriego en su entrepierna.

― ¿Ni un minuto más ni un minuto menos? ― me toma de las caderas.

― No quiero nada de tregua.

Me ayuda a retirar mi blusa y terminamos en otra placentera y calurosa tanda de sexo. El orgasmo nos toma por tercera vez y él sale de mi interior con rumbo a la habitación de baño.

Me quedo jadeando sobre su cama con una loca y desquiciada sonrisa en el rostro. No podía pedir sentirme tan plena como ahora. Estoy tan feliz que podría ponerme a saltar como Pinky Pie, pero la última vez que hice eso me enrollé con los cables de la lámpara de mi habitación, así que me ahorraré esa vergüenza.

Han pasado ya dos meses desde ese momento donde me dijo que yo también era su chica del café. Las cosas han sido sencillamente increíbles. Estos tres meses que he compartido con él han sido prometedores, me enteré de que el café al que iba a acosarlo resultó ser suyo, (bueno de su madre), pero esta quiere dejarle ese a su merced. Lía se reunió conmigo ayer a modo despedida ya que se va a ir a estudiar a una universidad en México, alegando de que quiere regresar a sus raíces.

Mi relación con Noah cada vez va en aumento, no me soporta y yo tampoco, pero el fondo me aprecia y yo igual. Sasha se ha puesto en lleno en su universidad ahora que Chris se ha marchado y le ve poco.

Mis tardes se resumen siempre aquí, en los brazos de Dwayne, ya sea en mi casa, en la suya o en el departamento de Noah. Que con respecto a este, no puedo olvidar lo último que nos dijo a Dwayne y a mí.

Fue algo como:

― ¡Mi jodida casa no es un motel!

― ¡Lástima , creo que le hemos hecho sobre la alacena! ― le grité a modo burla.

― Dwayne, tú y tu pequeña gatita si vuelven a tener tanto sexo en mi departamento les coceré los genitales. ¡Demonios! Ni un ligue puedo traer a mi propio departamento.