﹙ 002 𓈒࣪ ?!

1K 130 2
                                    

Un chico de maravillosa y tersa piel pálida despertaba con pereza de su profundo y relajante sueño a pesar de que fueran mas de las dos de la tarde

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Un chico de maravillosa y tersa piel pálida despertaba con pereza de su profundo y relajante sueño a pesar de que fueran mas de las dos de la tarde.

Al intentar rodar en su cama para envolverse mas en sus acogedoras sabanas término callendo de su preciada y amada cama. Se estiró como si de un gatito se tratase bostezando en el acto, sus ojos estaban listos para cerrarse nuevamente pero una pequeña y húmeda lamida lo hizo abrir poco a poco sus ojos creyendo que era a causa del sueño pero se llevo una sorpresa cuando un pequeño peso se posó en su pecho.

— Veo que le agradas Hyung. — dijo su compañero de casa y casi hermano Kim Sunoo con una sonrisa en sus labios.

— Quítame esta pequeña bestia de encima enano.— reclamo con su voz grave a causa del sueño.

— No y menos por decirme enano. —  dijo indignado y con un bonito puchero en sus gruesos labios.—  Además, ya te dije que le agradas y no creo que se valla a querer separar de ti.

El cachorro se metió bajo el brazo de Sunghoon buscando más de el calor que el humano le brindaba. Chilló como si fuese un berrinche cuando el humano amargado se levantó evadiendo los reclamos de su compañero, fue corriendo tras de el pero entonces Sunoo lo cargo evitando llegar hasta el sillón donde dormía su humano.

— Sunghoon, necesito hablar contigo. ¿podrías despertar solo por unos minutos? — dijo Sunoo mientras dejaba al cachorro a su lado.

— Mgh. ―respondió aun con los ojos cerrados.

— Necesito buscar a los hermanos de Ni-ki.

— ¿Quien demonios es Ni-ki?

— El cachorro y no hables así por que esta presente.

— Como si entendiera lo que digo. —  respondio indiferente.

Sunoo le lanzó un cojín dándole justo a la cara del perezoso chico.

— ¡Oye! ―le regañó furioso por no dejarlo seguir con su sueño reparador.

— Sunghoon esto es serio, necesitó que tu lo cuides y encuentres a los demás.

— ¿Por que no lo haces tú?

— Lo haré, pero tengo otros pendientes.

— ¿Como cuales?

— Por favor Hyung. — suplico con sus ojos vidriosos para tratar de convencer a Sunghoon que miraba fijamente a aquel animalito.

Ni-ki chillo uniéndose a las suplicas del chico que lo acogió en su casa, Sunghoon podría ser el chico más frío del mundo pero no era capaz de resistirse ante los encantos de un animalito.

Suspiró derrotado, asintiendo ante la partición de su mejor amigo que chillo de alegría entregándole al cachorro. Sunghoon se levantó solo para cargar al perrito y dejarlo en el suelo para tomar su lugar a lado de Sunoo este suspiro con un poco de gracia.

— ¿Donde se supone que debo buscar a los otros?

— En el bosque.

— ¿Tengo que caminar?

— Obvio que si Sunghoon.

El chico suspiró y luego cerro sus ojos fingiendo dormir solo para ver si así conseguía callar a su amigo.

— Jungwon me va a ayudar a buscarlos en otra parte.

— En primer lugar, ¿Como sabes que tiene hermanos?

— Te contare.

— ¿Es mucho?

— Solo callate y escucha.

...
Lo que parecía ser una llovizna termino siendo una fuerte tormenta que parecía no tener fin ni piedad por los dos chicos que pasaban por el bosque buscando regresar a casa.

— Demonios Sunoo, te dije que era mala idea venir solo por esa tonta flor—  dijo Jungwon casi gritando debido a la fuerte lluvia.

Callate y sigue caminando.

Ambos temblaban por el horrible frío que les tenía congelados hasta los huesos, sus delgadas prendas estaban empapadas al igual que sus zapatos y calcetines. Al intentar ir más rápido, Jungwon choco con un tronco callando encima de este.

— ¿E-estas bien? — pregunto Sunoo entre cortado por el frío, le extendió la mano para ayudarle a levantarse.

Si.

Mientras hablaban unos pequeños animalitos salieron de aquel tronco corriendo en diferentes direcciones, excepto uno.

¡Ratas gigantes! — gritó Jungwon mientras intentaba correr.

No, son perritos. — dijo Sunoo mientras asomaba su cabeza en el hueco del tronco. — Hay uno aquí.

No lo toques, puede morderte.

¡Jungwon! ―le regañó para luego tomar al perrito con cuidado. — Esta herido, hay que ir rápido a casa.

Ya no esta tan lejos la carretera, vamos.

Sunoo asintió mientras abrazaba al canino. Ambos chicos corrieron hacía la carretera no sin antes haberle prometido al perrito que volverían por sus hermanitos y que lo salvarían cueste lo que cueste. Al llegar a la carretera esta estaba desolada ni siquiera un gusano pasaba por ahí, pero la esperanza se mantenía viva en sus corazones, no esperarían un taxi tanto tiempo así que empezaron a caminar rápidamente de todas formas ya no estaban tan lejos de casa.
...

— ¿Así que esa fue tu gran aventura? —  Sunoo asintió. — ¿Por que si lo encontraste hace dos semanas no me lo habías dicho?

— ¿Sopresa?

— Como sea, ¿no crees que en esas dos semanas ya pudieron haber sido devorados por un oso o incluso haber muerto de otra forma?— El cachorros chillo asustado ante las palabras de Sunghoon.

— Cállate Sunghoon, no pienses así. Ellos están bien, lo presiento.

Cuando Sunoo salió a comprar comida, Ni-ki se escondió debajo del sofá llorando por sus hermanitos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando Sunoo salió a comprar comida, Ni-ki se escondió debajo del sofá llorando por sus hermanitos.

— Pequeño... — lo llamó Sunghoon con un toque de dulzura en su voz. —  Encontrare a tus hermanitos, te lo prometo.— Al escucharlo el cachorro se lanzó sobre el para luego lamer su mejilla.

"Gracias humano amargado"

𝐃𝐎𝐆𝐆𝐘  ױ  psh&nrkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora